Esperando a los héroes justicieros

Para la mayoría de nosotros, desde niños nos ha gustado tener la esperanza de que siempre llegue el héroe salvador que les dará su merecido a los malos. Como cuando un malhechor está haciendo de las suyas y llega el chicho de la película gacha y vence al malvado. Esa esperanza salvadora a muchos se nos arraiga tanto, que ya en la adultez seguimos con esa esperanza de que alguien llegue y venza a los malos.

Sin embargo, al parecer ya tiene tiempo en que no hay fuerzas salvadoras para la población que la rescaten de tantos malos haberes o que hagan un mínimo de justicia, sino nada más por el momento se oyen voces justicieras que nunca llegan. Desde luego que todo esto en el ámbito del servicio público en donde todo indica que cada quien está haciendo y deshaciendo sin que nadie les ponga el alto a las malas conductas administrativas de las que cotidianamente se está informando en los medios tanto impresos como televisivos.

Con esto de que la Secretaría de Hacienda no le quitará nada de lo supuestamente malversado a los gobernadores últimamente señalados como defraudadores del fisco, así como severos conflictos de intereses patrimoniales en perjuicio de la Nación, podría ser esto motivo de impulso para que otros gobernantes actúen con toda libertad teniendo en cuenta el precedente de que por ejemplo al gobernador con licencia de Veracruz Javier Duarte de Ochoa, no lo obligarán a que haga cuentas claras y regrese lo que se le compruebe o se le llegue a comprobar de que sí hizo mal uso de los recursos del erario que le fueron asignados y que por lo mismo, de acuerdo a lo documentado en los medios informativos a nivel nacional, Duarte de Ochoa dejó temblando y sin recursos a la mayoría, si no es que a todos los municipios que conforman dicha entidad federativa, por lo que se dice, varios de los alcaldes tomaron el palacio de gobierno en Jalapa para demostrar su indignación de haberlos dejado colgados de la brocha.

Sin embargo, también andan bailando en el escándalo mediático los ahora exgobernadores de Chihuahua y Quintana Roo, César Duarte y Roberto Borge, respectivamente, quienes son señalados como posibles defraudadores y malversación de fondos del erario; pero el problema es que al parecer todo esto es nada más un argüende mediático más para entretener y esperanzar más a la opinión pública que para darle una respuesta razonable y congruente. Y si se va apagando el mitote sale de inmediato la noticia de que se entregó el exgobernador de Sonora Guillermo Padrés y que su hijo también fue detenido. Pero para gran parte de la opinión pública todo esto no es más que un  juego mediático del que se espera el pronto olvido colectivo en donde únicamente quedará la esperanza de la llegada del justiciero vengador o de la caballería que venga al rescate del pueblo.

Nada les dolería más a quienes son señalados como malversadores de fondos del erario que, al comprobárseles que sí hicieron mal uso de los recursos otorgados les quitaran y confiscaran todos los bienes mal habidos después de hacérseles una auditoría a fondo en donde se descubriera que ni siendo ricos de abolengo podrían tener lo que ostentan después de haber ocupado un cargo público; y para los que entraron al servicio público con una mano delante y otra atrás. Sin embargo, ya quedó sentado el precedente con lo sucedido con Raúl Salinas de Gortari, a quien en su momento varios analistas señalaron que así no hubiera gastado un cinco en manutención, vivienda y gastos generales que generan la vida de cualquier persona, con todo lo que había ganado en su vida productiva no alcanzaría a tener la fortuna que se le habría descubierto, hasta con cuentas bancarias millonarias en Suiza y algunas aun con otro nombre. ¿Y qué pasó? Pues en este sexenio se le devolvió todo y nada más faltó que le dieran disculpas a don Raúl Salinas de Gortari. Así que si bien el pueblo tiene la esperanza de que algún día se haga justicia castigando a los malos servidores públicos o sus familiares involucrados, así muchos funcionarios tienen la esperanza de que los absuelvan como lo hicieron con Salinas de Gortari y como hoy en día en que prácticamente le han dicho al gobernador entrante en Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, que se tiene que rascar con sus propias uñas respecto al problema que le dejó su antecesor de no haberles otorgado los recursos debidos a las alcaldías de su estado, o que amaine el problema con los nuevos recursos que se le otorgarán cuando entre en funciones como gobernador.