En busca de la Ley Orgánica perdida

El presidente Javier Castellón Fonseca, acudió como invitado especial a la Jornada de Consulta para la Reforma Normativa de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), donde docentes plantearon propuestas para mejorar el modelo universitario en sus fases académica, educativa y curricular.
 
“Fuimos convocados varios maestros que hemos participado en los procesos universitarios desde hace muchos años; queremos que esta participación contribuya al inicio de la discusión sobre los cambios en la Ley Orgánica y en la construcción del modelo universitario”, dijo el presidente municipal de Tepic, Castellón Fonseca, luego de su intervención en este foro.
 
“Vengo como maestro, aun cuando esté de licencia, para plantear cuáles han sido mis experiencias en los procesos de transformación de la Universidad Autónoma de Nayarit. Se debe contribuir a mantener que esta institución siga siendo la más importante del estado a nivel educativo”, agregó el alcalde capitalino.
 
La solución a la crisis financiera, a decir de Castellón Fonseca, “deberá provenir de la movilización de los universitarios de todo el país, que deberán convencer y exigir a los legisladores acerca de la inviabilidad institucional de las medidas draconianas que se quieren imponer a las universidades con problemas, como la nuestra”.
 
En este foro para la reforma normativa universitaria, también participaron catedráticos como Saúl Aguilar, docente e investigador; Omar Wicab, ex rector de la UAN;  Carmen Navarro Téllez, docente; Lourdes Pacheco Ladrón de Guevara, docente e investigadora; Angélica Cureño, docente; la directora de la Unidad Académica de Educación y Humanidades, Margarete Moeller; Norma Galván Meza, secretaria de Docencia; Laura Isabel Cayeros López, secretaria de Investigación y Posgrado; el historiador Mtro. Pedro Luna Jiménez; Amelia Gascón, directora de la Biblioteca Marx-Lenín de la UAN, entre otros docentes no menos importantes.
 
Finalmente, el ex rector de la Máxima Casa de Estudios, Javier Castellón,  precisó que “una universidad dividida, con una comunidad hundida en el silencio y la apatía, está derrotada de antemano; y de seguir así, la construcción de una salida viable se pospondrá por años”, sentenció.