Las expectativas de López Obrador
Francisco Cruz Angulo
26 de Octubre de 2018
La agenda de la política nacional la configura sin contrapeso alguno el presidente electo Andrés Manuel López Obrador legitimado por un inmenso apoyo popular.
Esta circunstancia histórica obliga a que las conciencias críticas, la sociedad civil organizada y los partidos políticos de oposición no se queden pasmados sea por indolencia o por oportunismo a la sobrevivencia del estatus quo del jefe de la próxima administración federal y en cambio sean aliados confiables dispuestos a sumar esfuerzo para implementar con éxito los ejes programáticos del desarrollo económico y social de la Nación, no de cortesanos o adversarios a ultranza de continuar disfrutando los privilegios del pasado. De polarizarse las posiciones entre el régimen lopezobradorista y los poderes facticos conduciría a un país de ingobernabilidad o a la tentación de establecer un régimen autoritario similar al caduco régimen priísta.
Viene esta reflexión a propósito de tres temas de los ejes programáticos del próximo gobierno de mayoría morenista en las dos cámaras del Congreso de la Unión…
PRIORIDADES NACIONALES
El primero de ellos en el que se edificará el gobierno de López Obrador es el combate a la corrupción pública y el cumplimiento al Estado de Derecho, esto es, a la impunidad y al grosero dispendio de los recursos públicos.
De acuerdo a su modelo proyecto de Nación el político tabasqueño todo ese caudal de recursos públicos que se van a los bolsillos de una clase política corrupta y privilegiada serán orientados al financiamiento especifico a millones de jóvenes estudiantes para que se capaciten y trabajen en los procesos productivos.
Su otro gran proyecto es el lograr la paz y la reconciliación en el país y así contener la violencia del crimen organizado. Por la mala experiencia en regímenes priístas y panistas el uso de la fuerza militar la ha incrementado exponencialmente en los últimos doce años, lo que provoca lo que hoy conocemos: miles de muertes y desaparecidos, desalienta la inversión productiva pública y privada y los capos de la droga y de otras actividades ilícitas toman como rehén a nuestras instituciones públicas.
Por los foros de consulta popular el próximo gobierno lopezobradorista seguramente ya comprendió que no puede haber perdón y olvido sin justicia y verdad.
En su próxima agenda de gobierno estas demandas son las de debatir y consultar la posibilidad de la descriminalización de la marihuana y la amapola con fines terapéuticos; por otro lado crear las comisiones de la verdad por peritos en la materia que investiguen científicamente la localización de los desaparecidos y de los restos encontrados en cientos de tumbas clandestinas así como la reparación de daños a familias victimadas.
El tercer objetivo estratégico del próximo gobierno de López Obrador es el crecimiento económico en todo el territorio nacional.
Como Andrés Manuel López Obrador no propone cambiar el modo capitalista de producción ni de gobierno presidencialista prometió observar las reglas de la macroeconomía internacional, esto es, autonomía del banco de México, reducir el gasto público y por ende evitar el crecimiento de la deuda pública e incrementar su productividad económica e iniciar la productividad en el agro mexicano y el impulso a la pequeña y grande empresa que serán generadores de millones de empleos.
La diferencia a los anteriores gobiernos neoliberales priístas y panistas será que esta vez el interés público y no el privado será el que decidirá a que regiones debe fomentarse la inversión pública y privada y no como en el pasado en donde se concentró la inversión pública y privada en pocas zonas privilegiadas por la clase gobernante lo que generó la pobreza y el abandono de las regiones más atrasadas del país.
La prueba más fehaciente de esta polarización entre riqueza y pobreza fue el Tratado de Libre Comercio de América del Norte ya que triplicó sus fortunas familiares a un pequeño sector de empresarios y banqueros y destruyó la economía y el bienestar de millones de mexicanos en el campo y la ciudad por el abandono de miles de hectáreas de cultivos y por el desmantelamiento de la planta productiva de la pequeña y mediana industria y de los centros comerciales y en consecuencia una clase media en la línea de la proletarización.
Estas fueron las causas del por qué el adefesio PRI-PAN y PRD se desmoronó como castillo de naipes el pasado 01 de julio ante el tsunami electoral encabezado por López Obrador…
FUTURO ESPERANZADOR
Estas enormes expectativas que despertó López Obrador, cumplirlas es responsabilidad de todos los sectores de la sociedad. De nada servirá las buenas intenciones de un honesto gobernante sino es apoyado y vigilado en el ejercicio del poder. La historia nos enseña que cuando se tensa la liga por la desigualdad social viene la irrupción de la gente a las calles, violenta, destructiva y hasta sangrienta, caldo de cultivo de las castas autoritarias y que se aprovechan del poder político para sostener sus privilegios ahogando las libertades ciudadanas.
Por lo pronto examinamos con cuidado el próximo presupuesto de egresos y la distribución del gasto público del presidente López Obrador que aprobarán o rechazarán la nueva legislatura federal para el año fiscal 2019. Allí tendremos indicios de hacia qué rumbo conducirá López Obrador a nuestra Nación…
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