Alternativa de poder, gobiernos de coalición

Este año el Partido Revolucionario Institucional (PRI) inició con el pie derecho al ganar las elecciones extraordinarias en el Estado de Colima llevando al Ejecutivo Estatal a su candidato Ignacio Peralta.

Esa elección dejó una enseñanza tanto para el partido en el poder como para los partidos de oposición.

En elecciones muy reñidas las alianzas con los partidos políticos pequeños pueden determinar los resultados de la elección.

En el caso que nos ocupa el tricolor incorporó a su alianza con el Partido Verde Ecologista (PVEM), PANAL, PT y Encuentro Social.

Esta nueva táctica política del líder nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones posibilitó el triunfo de su candidato a gobernador.

Con este exitoso resultado es posible que el tricolor la implemente en aquellos estados en donde la elección al poder Ejecutivo Estatal sea muy competitiva; no es casual que utilice esta misma táctica de los partidos de oposición ya que a consecuencia de la caída electoral del partido del presidente su votación va en descenso en los últimos tres años, por lo que en lo futuro ya no podrá gobernar por sí solo.

Otro factor de los triunfos de los candidatos priístas es su disciplina y unidad interna. Los aspirantes a gobernador se supeditan a la línea presidencial al no tolerar que los ejecutivos estatales impongan a su sucesor, ya que los que se van por la libre penderá sobre sus cabezas la guillotina de la PGR.

Mientras el Revolucionario Institucional (PRI) amplía su política de alianzas con el partido Verde Ecologista, PANAL, PT y Encuentro Social la alianza PAN-PRD va a la baja.

Y los partidos considerados de izquierda como Movimiento Ciudadano y Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) cada quien va por su lado, es decir la izquierda está fragmentada, en tanto que el blanquiazul va en descenso respecto a su política de alianzas con el Partido del Sol Azteca.

Hasta el día de hoy de los doce estados en donde habrá elecciones a gobernador solo en los estados de Durango, Zacatecas, Veracruz y Oaxaca se negociaron alianzas entre ambos partidos.

De no haber cambio de posiciones tanto PAN como el PRD se la jugarán solos ante la amplia alianza que viene construyendo  el líder nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones para enfrentar a una oposición fragmentada por lo que es posible que ese partido vuelva a ser hegemónico en los próximos años.

Sin embargo no hay mal que por bien no venga. En los comicios de este año los electores tendremos la oportunidad de conocer los proyectos de gobierno de ambos partidos políticos hoy diluidos ideológica  y programáticamente en aquellos estados en donde hicieron alianzas, que no de gobierno.

A la vez conoceremos la fuerza real de los partidos de izquierda y de la derecha en cada uno de los Estados en disputa. Será como un termómetro y a la vez un diagnóstico del mapa electoral en el país para implementar la nueva estrategia electoral y así encarar a los aliancistas encabezados por el tricolor en la sucesión presidencial del 2018.

Si los panistas no dan una buena lectura a los resultados electorales adversos a su partido en Colima y por el lado del PRD continua con sus pleitos internos y con el partido Movimiento Ciudadano y MORENA de Andrés Manuel López Obradores previsible que en las elecciones federales del 2018 Manlio Fabio Beltrones logre el propósito del Presidente Enrique Peña Nieto, es decir de ganar junto con sus aliados la mayoría calificada en el Congreso de la Unión y dejar a un sucesor leal a su actual proyecto de gobierno.

Los gobiernos de coalición serán la mejor manera para enfrentar a la alianza aplanadora PRI-PVEM-PANAL y Encuentro Social…