Tepic, Nayarit, jueves 21 de noviembre de 2024

Lo que el caso Moreira nos enseña

Ulises Rodríguez

21 de Enero de 2016

Humberto Moreira no es una excepción aislada entre los gobernadores que asumen el papel de caciques en sus estados a falta de un liderazgo fuerte en la presidencia de la república, es tan sólo uno más de quienes vienen haciendo la regla desde hace años.

En las postrimerías del sexenio anterior en nuestro estado y también por finalizar el de Humberto Moreira en Coahuila, éste último comenzó a operar de la mano de su entonces homólogo mexiquense Enrique Peña Nieto su asunción a la presidencia nacional del PRI en sustitución de la tlaxcalteca Beatriz Paredes. Emprendió Moreira un recorrido de auscultación y de operación por las entidades gobernadas por el PRI para pedir el aval de los mandatarios en su aspiración y convencerles al tiempo que les invitaba a formar parte de un proyecto mayúsculo: el regreso del PRI a los pinos.

Recuerdo haber leído por aquellos días en un diario de circulación local en cuya primera plana se presentaba una encuesta de opinión que evaluaba el desempeño de los gobernadores de aquellos días siendo Humberto Moreira de Coahuila quien arrojaba una mayor aceptación -9.8- entre los habitantes de su estado. La encuesta circuló en nuestro estado a tan sólo dos días de la llegada del profesor Moreira, sin duda como preámbulo prefabricado al arribo de quien hoy duerme en una celda española por corrupto.

El encuentro entre Ney González y Humberto Moreira en el restaurante del hotel Real de Don Juan, fue más allá de solicitar apoyo político. Moreira fue el enclave para operar también la candidatura de unidad a la gubernatura de Roberto Sandoval, como peón también en el ajedrez de quienes apuntalaban a Peña Nieto como su proyecto en 2012.

Fue Moreira quien hizo que Ney González dejara de obstaculizar la aspiración de Sandoval Castañeda, quien logró que su cuñado, el gobernador, se deslindara del el senador Raúl Mejía y también la declinación del otro senador, Gerardo Montenegro, con apoyo esto último de la maestra Elba Esther Gordillo, también presa, pero en nuestro país. La tarea de Moreira no fue menor y así lo agradeció Roberto Sandoval en septiembre de 2011, cuando rendía protesta como gobernador del estado:

“Agradezco a mi partido, al Revolucionario Institucional, por haberme permitido ser el candidato y el gobernador de la gente. En especial alguien que llegó en el momento justo al Comité Ejecutivo Nacional, para darle y abrirle las puertas al pueblo de Nayarit, para que fuera el pueblo de Nayarit quien decidiera el candidato de mi partido, gracias a mi líder, a mi amigo, a mi maestro, el profesor Humberto Moreira. Gracias maestro, por usted aquí estamos, gracias presidente de mi partido.”

La estrategia y el papel que jugó Moreira en la elección presidencial fueron muy claros. Coordinó la operación de los recursos que desviaron los gobernadores priístas para la campaña de Enrique Peña Nieto. Lo anterior quedó evidenciado en enero de 2012, cuando la PGR decomisó 25 millones de pesos en efectivo pertenecientes al gobierno del estado de Veracruz, encabezado por el corrupto y represor Javier Duarte, presuntamente para la campaña del actual presidente de México ¿La recompensa? La impunidad.

Moreira, a pesar de tener denuncias por desvío de recursos durante su administración como gobernador de Coahuila, más allá de la humillación por haber abandonado de manera abrupta –y consensada- la presidencia nacional del PRI, no habría tenido mayor sanción por la justicia mexicana. La detención de Moreira ocurrió en España, donde no alcanza a cubrir el manto de la impunidad y las complicidades. No hubo justicia en nuestro país que alcanzara tampoco a Arturo Montiel -tío y antecesor de Enrique Peña en el gobierno del estado de México-, no ha llegado a Fidel Herrera, ex mandatario de Veracruz en cuyo gobierno se puso al estado en bandeja de plata al cártel de los Zetas, no ha llegado a Juan Sabines, el Chiapaneco que endeudó como nadie a su estado, no ha llegado a ninguno de los 3 gobernadores de Tamaulipas que han sido vinculados también con el crimen organizado, Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández, no ha llegado mucho menos a la Mololoa a buscar al corrupto Ney González. La justicia mexicana ha sido ciega con casos de escandalosa corrupción como el de “La casa blanca” del presidente, las mansiones de Luis Videgaray y el secretario de gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, pero ha sido certera y ha puesto a todo el aparato de procuración de justicia para que crucifiquen a la actriz Kate del Castillo por su supuesta relación con el capo sinaloense Joaquín “El Chapo” Guzmán. El caso Moreira nos enseña que en México, robar una lata de leche para alimentar a tus hijos es un delito y puede llevarte a la cárcel…. Robar a todo un estado, te hace un rico e influyente ex gobernador.

Comentarios

© Copyright 2009 - 2024 Nayarit Altivo. Todos los derechos reservados.
Tepic, Nayarit. México
Director General: Oscar González Bonilla
Comercio & Empresa
Precio Gasolina