Dijo que no participaría más en elecciones para dirigencia SETUAN, y se rajó

Luis Manuel Hernández Escobedo acepta que incumplió a su palabra. En pasada entrevista al reportero de la gente declaró que la anterior sería su última participación en elección por la secretaría general del Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Universidad Autónoma de Nayarit (SETUAN), que rebasaría los 65 años de edad y por tanto no deseaba vieran a un vejete como dirigente sindical. Se iría a cuidar nietos.

Resultó falacia. ¿Existen razones para haber dado marcha atrás?, pregunto al añoso líder que ofrece entrevista en su oficina del edificio central del SETUAN, en las inmediaciones de terrenos de la Ciudad de la Cultura, asiento oficial de la Universidad Autónoma de Nayarit.

Es extensa su exposición, pero define que frente a la multiplicidad de conflictos que enfrenta al interior de la universidad, “lo más cómodo sería pues me voy, y listo. Sin embargo, soy persona responsable”. Pero además sostiene ser el apoderado de todos los contratos colectivos firmados entre universidad y sindicato, por tanto custodio de la aplicación de los beneficios económicos y sociales para los trabajadores.

No se fue, porque quiso demostrar a sus detractores al interior de la universidad que no les asistía la razón muy a pesar de fundamentar acusaciones con base en juicios de la Autoría Superior del Estado. “Tengo que ser parte de la solución, hay quienes piensan que la mejor solución era que me fuera”. Cita ejemplos como la presentación en enero pasado al Congreso del Estado de la iniciativa del gobernador Antonio Echevarría García sobre reformas a la Ley Orgánica de la UAN que quiso terminar con la hegemonía sindical del entrevistado.

Se pretendió hacer modificaciones al régimen laboral, desaparecer financiamiento al SETUAN, echar fuera del Consejo General Universitario a los representantes sindicales, entre otras acciones fuera de lo normal, que Luis Manuel Hernández Escobedo considera llevaban destinatario, dedicatoria. Esa es otra de las razones, según declaró, por las que decidió continuar al frente del sindicato, “pero, claro, con la decisión mayoritaria”.  Además, explica, por medio de la Auditoría Superior del Estado se exigió eliminar cláusulas del contrato colectivo de trabajo. “¡Por favor! Afortunadamente la justicia federal nos dio la razón. Como es un acuerdo de partes, ni el Gobierno del Estado, tampoco el Congreso del Estado, tienen facultades para intervenir en lo que se conviene en contrato colectivo regido por el apartado A del artículo 123 Constitucional y Ley Federal del Trabajo”.

“Tenemos suspensión definitiva pero no ha sido posible llegar a la audiencia constitucional porque se vino la pandemia y se suspendieron las labores. De no resolverse eso, es mi obligación moral y legal buscar la manera de resolver y así tomar una decisión. Obviamente que esto lo consulté con los compañeros trabajadores y ellos me dieron el aval para continuar al frente del sindicato. No puedo dar cola, tengo que enfrentar una situación totalmente atípica, como es el caso de irregularidad en el trabajo desde marzo pasado, por la presencia de la pandemia”.

Luis Manuel Hernández Escobedo logró una nueva reelección en el cargo mediante el 84.6 por ciento de los votos a su favor (dos mil 940). El proceso se realizó los días 26 y 29 de junio mediante, por primera vez, votación electrónica. Fue tan confiable el programa, la aplicación tecnológica, que no permitió doble votación al trabajador. “En los últimos 40 años no he hecho otra cosa, más que ser secretario general del SETUAN, más las dos oportunidades de estar en el Congreso del Estado”.

-¿Asegura que esta será la última reelección?

-Mira, lo único seguro es que me voy a morir un día, y no quiero morirme de Covid, por eso nos cuidamos.

Cuando se le cuestiona si hay algún pendiente por realizar como dirigente sindical, Luis Manuel responde que existe el pendiente de consolidar las conquistas logradas. Se trata de cumplimentar algunas acciones explícitas en la Reforma Laboral.

Pido haga un análisis autocrítico para saber cuáles considera son sus virtudes, por las que los trabajadores adheridos al SETUAN continúan irremediablemente entregando voto a su persona.

“Me creo un secretario general de carrera. Nosotros siempre hemos practicado el sindicalismo independiente. A nadie se obliga que sea de un partido o de otro. Nos interesamos en reivindicar la dignidad de nuestros agremiados, más que el salario. El 98% de nuestros compañeros tiene tiempo completo con un ingreso al menos de doce mil pesos mensuales, suficientes para vivir mínimamente con dignidad. Lo que hemos hecho por los trabajadores es la diferencia. Por eso la gente está con nosotros”.

-Después de la pandemia la UAN será otra universidad ¿Cómo la visualiza a futuro? ¿Dónde tendrá cambios sustanciales?

-Claro que habrá cambios, sin duda. Serán nuevos los hábitos de trabajo. El tejido social que estaba roto en este país, necesariamente se volverá a articular. Lo he dicho: la universidad es inmortal. Tendrá que encontrar condiciones para que cada día más jóvenes logren ingreso para su formación integral. La nueva normalidad es tan importante que permitirá la reconstrucción del tejido social, pero además que se entienda que la educación es trascendental para que esto ocurra. Las clases presenciales, pedagógicamente son de mucho más interés que cualesquiera otros métodos.