Recesión en México vs recuperación en Estados Unidos

¿Es posible avanzar y obtener blindaje justo en medio y a partir de la crisis que mantiene pendiente de un hilo al mundo, y aún del impacto que se espera? En la perspectiva de analistas internacionales enfocados al estudio del efecto económico de la pandemia por Covid-19, constituye un objetivo factible, tomando en cuenta necesidades, carencias y problemas que deja como huella el mal, especialmente en entornos donde existen condiciones de consumar innovación y creatividad a través de la oferta de productos y servicios, dirigidos a mejorar y generar soluciones.

Lo anterior, fue expuesto en la videoconferencia: “Oportunidades para hacer negocios en Estados Unidos de América después del Covid-19”,  organizado por la Agencia Binacional de consultoría empresarial Binationalink y la Cámara Hispana de Comercio en Austin, Texas, teniendo como invitados al analista internacional Erick Lobo y a Brenda Stefan analista en política internacional. Asimismo, la Webinar fue enriquecida con las propuestas anfitrionas del experto en Soft Landing (establecimiento eficaz de empresas en el extranjero), Arturo Lavín Salazar, y del Presidente de Greater Austin Hispanic Chamber of Commerce, Luis Rodríguez.

La complejidad de la contingencia, ha impuesto el inédito desafío de adaptar líneas de acción concretas que permitan obtener dividendos de un entorno que ya vemos, será distinto, y no habrá más opción que generar consecuentemente, satisfactores que demande la singular reconstrucción.

La analista Brenda Stefan, considera que en virtud de los antecedentes en el desempeño gubernamental y financiero antes de la pandemia, la recuperación tendrá como epicentro aquellos países que más inviertan en términos del Producto Interno Bruto (PIB) en sus sectores productivos, para evitar que el capital que lograron impulsar en su momento con claras políticas de apertura, desaparezca y en cambio amortigüe el descenso y apunte rápidamente el crecimiento.

Así, es evidente -dijo Stefan- que México tendrá severas dificultades para salir adelante, desde las acciones que han caracterizado a su Gobierno: ríspido trato con empresarios, incertidumbre ante la cancelación de obras coyunturales como el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) en Texcoco, recorte burocrático y salarios sin equilibrios, además de la inseguridad desbordada y la inequitativa relación con Estados Unidos, en donde a juicio de no pocas voces, “se dio mucho a cambio de poco”: Migración -muro-, y Tratado Comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC); llegaron para sumarse con la parálisis del “Gran Confinamiento”, creando un “Boom”, y ahora solo se está a la espera de la ayuda que pueda desprenderse del país vecino del norte, la potencia pues, que reúne los requisitos para constituirse en epicentro de la recuperación económica. Y es en este país, donde está la oportunidad de invertir y hacer negocios de cara a lo que llaman muchos “la nueva realidad”.

En tanto, el politólogo Erick Lobo, apoya la visión de Stefan, y sostiene que en efecto el Covid-19, no es responsable en sí de la brutal caída que está ya resintiendo México, lo es de forma indiscutible el resultado de una política de gobierno que no fortaleció su economía con una sólida y estratégica relación con sectores empresarial y productivo, para evitar inflación, decremento de empleo y poder adquisitivo, y así garantizar seguridad pública, dar certidumbre; de tal suerte que hoy pudiera hacerle frente a los impactos del “Gran Confinamiento”, apostándole a la eficacia de un gran pacto de todas estas fuerzas, y sin problema alguno invertir lo necesario para frenar la pérdida de 700 mil empleos, y desde luego, un incremento significativo en la pobreza, sector que no contará con los medios suficientes para cubrir sus necesidades básicas.  

Por lo anterior, el Maestro Lobo sostiene que el mercado de Estados Unidos, se vuelve especialmente atractivo a partir de la respuesta del Gobierno a la crisis, la inyección presupuestal más alta del orbe: del 12 por ciento de su Producto Interno Bruto, y más aún que se analiza en el seno del Parlamento, incrementar a 3 billones de dólares para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, y personas en lo individual y familias. Precisó estar viendo en lo subsecuente que la tendencia durante y después del Covid-19 en el marco de la reconstrucción, es la demanda en sector de tecnología digital, salud, seguridad, bienes raíces, alimentación y turismo. De tal suerte que la mejor opción es el mercado de Estados Unidos, y el tiempo es hoy.

En su oportunidad, el Presidente de la Cámara Hispana de Comercio en Austin Texas, Luis Rodríguez, refrendó que el mercado estadounidense comporta terreno fértil para invertir, y de ello habla el potencial que pese a la pandemia posee el Estado de Texas, y en este caso la ciudad de Austin, cuyo Alcalde mantiene una alianza con la Cámara a efecto de incentivar la movilidad y crecimiento empresarial de la comunidad latina. De ahí que invitó a todo aquel empresario y emprendedor que desee expandir sus servicios, lo haga con toda confianza con la Cámara, toda vez que se le conducirá adecuadamente para consumar su objetivo.

El anfitrión Arturo Lavín Salazar, concluyó entonces que la agencia que preside, Binationalink, se ha especializado precisamente en construir una red estratégica de contactos para coadyuvar al crecimiento económico de Estados Unidos con la fuerza productiva, la innovación y la creatividad de empresarios latinos que estén dispuestos a ampliar sus servicios. De tal suerte, que dijo ser la mejor opción en el mejor mercado para este momento crucial, que inaugura innegablemente un nuevo ciclo.

Es así como se deja en claro la urgencia de definir un nuevo modelo comportamental para transitar con éxito a esa esperada “nueva realidad”. Habrá que estar preparados entonces.