La jeringa tradicional perdió la batalla contra la desechable

Antes era muy común ver letreros en algunas casas de “se aplican inyecciones”, también que se oyera que nuestra mamá nos dijera: ponte a hervir la jeringa, etcétera; pero llegó el tiempo en que de pronto se dijo que todo hacía daño, que las jeringas tradicionales significaban un foco de infección y que habría que utilizar en adelante puras jeringas desechables; sin embargo, esto trajo a la par otro foco de infección y no en los hogares, sino en la basura al tener que tirar cientos y cientos de hipodérmicas que se han usado en personas con diversas enfermedades a cual más de infecciosas; y lo que es peor: muchas de las veces sin control alguno.

Según se ha dicho, la función de una jeringa es precisamente inyectar y sustraer líquidos a través de sus agujas, y que por más que se hirviera una jeringa tradicional en el interior de las agujas hipodérmicas se podrían llegar a aglomerar infinidad de colonias de bacterias muy difíciles de erradicar, así que mejor se optó por las desechables, que por cierto, según comentan muchachos que recolectan la basura, se han llegado a pinchas muchas veces con estos utensilios y obviamente sin saber con quién se habría utilizado, si con gente con sida o alguna otra enfermedad verdaderamente infecciosa.

Desde luego que hubo voces en su tiempo que decían que todo esto de que se prohibieran las jeringas tradicionales se debió para que las compañías fabricantes de las jeringas desechables repuntaran y así obtuvieran enormes ganancias, pues ya no habría vuelta de hoja al dejar de producirse las jeringas de vidrio; y desde luego con un bombardeo mediático satanizando estas últimas para desestimar a la gente de seguir usándolas, y para que quien iba a ser inyectado exigiera jeringa desechable en vez de la tradicional.

Pero respecto a la función de una jeringa con agujas hipodérmicas, cuando comenzó a proliferar el mentado dengue y ahora el zika y el chikungunya o algo así, y que se alertó a la población que estas enfermedades eran transmitidas por determinado mosco, zancudo o mosquito, pues a muchas personas nos dio por pensar que prácticamente estos insectos hacían un trabajo similar a las jeringas, así que si podría existir la probabilidad de que las agujas de las antiguas jeringas hicieran algo muy parecido con la humanidad.

Sin embargo, cuando se dice en los medios informativos que pululan por el mundo millones de insectos de diversas especies que transmiten diferentes enfermedades como en este caso el dengue y demás, pues entonces en el caso de que un mosquito picara en infectara a una persona de esta u otra enfermedad y otro insecto vuelve a picar a quien ya está enfermo y va y pica a otra persona sana y así sucesivamente, pues querría decir que siendo así la humanidad ya hubiera desaparecido; pero no ha sido así, por lo que quiere decir es que quien se infecta o es infectado se debe a la falta de defensas corporales, ¿por qué? Pues según los enterados, es debido a la dieta de cada persona que acostumbra comer algo que no le nutre o que su organismo no aprovecha para generar esas defensas o que posiblemente ya padece alguna otra enfermedad en la que ya están ocupadas esas defensas y por lo mismo no pueden con todas las bacterias o virus que se han introducido en un cuerpo.

¿Pero por qué se dan casos de epidemias en ciertas zonas o ciudades? Pues según los enterados del asunto, se debe precisamente porque los virus o bacterias nocivas para un organismo humano encuentran un campo propicio para hacer de las suyas; he ahí el caso de familias enteras en que comienza a enfermarse un miembro de una familia y terminan por enfermarse casi todos o todos los habitantes de un mismo domicilio.

Y lo extraño del caso es que no nada más se ha extendido el dengue y demás enfermedades parecidas, sino que han vuelto otras enfermedades supuestamente ya erradicadas como el sarampión por ejemplo. Y para esto la explicación de algunos expertos es que todo se debe a la alimentación de mucha gente que recurre a la comida industrializada que en muchos de los casos está adicionada supuestamente con vitaminas y minerales químicos, que no se llevan nada bien con la química orgánica; y porque hoy en día, es difícil seguir una dieta nutritiva y con componentes naturales que pueda aprovechar el organismo humano porque ya casi todo lo que comemos es prácticamente casi artificial como las frutas y verduras que no son de temporada pero creadas en viveros en serie para que no falten en ninguna época del año.

Sea pues. Vale.