Una más de las tragedias tepiqueñas

Es obvio que a falta de industria en el estado de Nayarit, pero principalmente en su capital Tepic, mucha gente le busque como sea para la manutención de su familia y más, quienes por la edad o falta de algún tipo de capacitación no encuentren empleo entre los escasos que hay y que por eso tenga que recurrir al comercio informal ya sea ambulante o hasta sacando una mesa afuera de su domicilio para vender lo que se pueda.

En la tarde-noche del pasado jueves voy caminando por la Plaza Principal a un costado del Palacio Municipal y me encuentro con un conocido que está con otro señor que se ve muy compungido pues muestra un semblante de estar muy abatido. Después del saludo y presentación correspondientes, mi conocido me pregunta que cómo veo lo que le ha pasado al señor que está a su lado, pues los fiscales le acababan de quitar su canasto en donde traía bolsas con papas fritas para vender, y que apenas iba a comenzar a comerciar en las calles del Centro Histórico (CH), y  porque había pedido prestado para la inversión de hacer su producto. Y este señor me comenta que se había venido a pie desde donde vivía y que no había vendido nada ni siquiera para abordar un camión y así no llegar tan cansado al centro.

Me platica este señor que en forma prepotente unos señores que se dijeron fiscales lo pararon y le preguntaron que si traía permiso para vender, al contestarles que no, le quitaron su canasto con todo y la mercancía que pensaba mercar y que ahí sintió que volaba su inversión del gasto de comprar las papas, pelarlas, freírlas en aceite y empaquetarla; que sintió de pronto que todo aquello se había ido al caño.

Le comento a este señor que vaya y reclame, y me dice que ya se enteró que posiblemente sí le entreguen su canasto pero de la mercancía ni hablar, porque les preguntó a otras personas que habían sufrido lo mismo y a varias ni sus contenedores les habían devuelto porque se habían extraviado y no sabían dónde habían quedado. Y respecto al supuesto permiso que tenía que solicitar al H. Ayuntamiento, me dijo este señor que ni siquiera lo querían atender, que ya ha ido a donde dice “licencias” y que ni lo recibieron y que una persona le dijo que no había permisos para venta ambulante. Y además, añadió que lo habían traído vuelta y vuelta de un lado para otro porque quería ponerse a vender con todas las de la ley y no había conseguido nada; y eso porque ha visto que sí andan otros vendedores que no los molestan y a otros nomás les cobran plaza y listo, pero a él como a otros vendedores ambulantes hasta la mercancía les quitan.

Se entiende que en nuestro país  a nadie se le puede impedir que se dedique a cualquier profesión, industria, comercio o trabajo que pudiera hacer siendo lícitos, y si bien lícito está relacionado con lo legal, con la ley, en sí, el andar vendiendo ambulantemente no es algo ilícito porque no se hace daño a nadie en el entendido de que para todos hay; y si alguna ley señala que para vender de esta manera se debe de contar con un permiso, pero si este se le niega a quien pretende vender algo, pues mientras no reciba respuesta de la autoridad que otorga los permisos correspondientes, pues he ahí el cobro de plaza tal y como se ha acostumbrado desde hace muchos años en que únicamente pagan dicha plaza los vendedores tal y como si fuera un cargo de impuesto y listo. Sin embargo y además, ninguna ley podría afirmar que se le recoja el producto de su trabajo a ningún vendedor a menos que haya una resolución judicial, pero en casos como estos de vendedores ambulantes cómo puede haber resoluciones judiciales si es trabajo andar vendiendo algún producto en la calle debido a la desesperación de mucha gente y más si tiene familia que mantener. Sería algo así como confiscar la prensa a un periódico y eso ya hace mucho que quedó prohibido.

Ahora bien: si nadie puede ser privado del producto de su trabajo, ¿por qué se les quita su mercancía a algunos vendedores ambulantes y no a todos? Porque esto de “decomisar” la mercancía a un vendedor si no hay nada escrito al respecto se podría considerar prácticamente como un robo; y si por ejemplo es fruta o como en este caso, papas fritas, ¿qué hacen con esta mercancía quienes se la quitan a los vendedores? Ni modo que la tiren, porque ya se ha visto en varios videos, que obviamente no son de Tepic, sino de otras partes del país en que en las mismas oficinas en donde va a parar toda esta mercancía, se aprovechan de ella los mismos que la decomisaron.

Sea pues. Vale.