La liberación del mercado es necesaria pero no suficiente para el capitalismo emergente

Cuánta razón tuvo el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, en expresarle a los Estados miembro de la Alianza del Pacífico conformada por Chile, Perú, Colombia y México, que el libre comercio es necesario pero no es suficiente para el desarrollo del capitalismo emergente de dicho países. Que el país tiene cerca del 80 por ciento de su comercio, del comercio mexicano, con los Estados Unidos. Pero se requiere "ser más eficaces frente a las limitaciones artificiales al libre mercado y al libre comercio. Cuando somos competitivos nos sacan del mercado, cuando no convenimos, nos ponen tarifas". Por eso se precisa de una mayor integración económica, mayor capacidad tecnológica de nuestros países, mayor peso relativo en el ámbito global, y mayor capacidad de defendernos frente a las “tendencias proteccionistas e imposiciones de tarifas”.

Tomemos el reciente caso de la papaya mexicana. El pasado 28 de junio se emitió una recomendación de no compra y por ende de no consumo de la papaya mexicana porque según se pensó, era portadora de Salmonella Uganda. Pero recientemente la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, FDA, informó al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria que queda sin efecto dicha recomendación.

Por otro lado, Ebrard Casaubon anunció durante la Clausura del Encuentro Empresarial de la XIV Cumbre de la Alianza del Pacífico, que Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Singapur han hecho saber su interés de integrarse como “Estados Asociados” a dicha Alianza.

El régimen de producción capitalista se caracteriza por producir mercancías, esto es, que sus productos tienen como destino el mercado. Por ello, antes de realizarse el consumo necesariamente tiene que realizarse el valor del producto. Más no obstante tal situación, conforme se va desarrollando la producción se va requiriendo más mercado y se van incorporando nuevos objetos a la producción capitalista. La expansión del mercado marca el dominio de unos países por otros para dar salida a sus mercancías. Pero conforme se va desarrollando la producción capitalista se van incorporando al régimen mercantil objetos que antes no se vendían, como los órganos humanos. Se dan entonces las ventas temporales y las ventas definitivas. En las temporales se rentan los vientres de las mujeres para la creación de nuevos seres humanos, etc. Pero al lado de estos productos surgen los productos financieros, los cuales también van al mercado. Con el desarrollo del capitalismo todo se vuelve mercancía, hasta la  conciencia humana.

En este sentido, unos países se desarrollan más que otros y los países capitalistamente más desarrollados dominan a los menos desarrollados. Empero, los capitales que se requieren para grandes proyectos de inversión generan la necesidad objetiva de la participación de distintos capitales pequeños, medianos y grandes, constituyendo lo que se conoce como los capitales transnacionales.

Esta situación es la que vive Latinoamérica y por la cual se está impulsando la Alianza del Pacífico. Sin embargo no basta con la liberación del mercado de bienes, servicios y productos financieros. Se requiere de un desarrollo de la ciencia y la tecnología para poder estar en condiciones de competir en el mercado mundial con mercancías provenientes de todo el mundo. Por ello el capitalismo emergente de México anda buscando mercados y capitales así como la integración de un frente de países para estar en mejor capacidad de enfrentar a los capitales transnacionales de USA, Rusia y China. En fin.