Aguas, que viene el coco Nicolás Maduro

No cabe duda que para alguno mexicanos aún no les cae el 20 de que ya no hay vuelta atrás respecto a que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) será el próximo presidente del país, claro que a menos que no nos den una sorpresa antes de que tome posesión o después de asumir la Presidencia de la República que, ojalá y no llegue a pasar, aunque tal y como está el país de convulsionado, ahora ya nada no sorprendería.

Esos algunos mexicanos  están monitoreando todo lo que haga o diga AMLO para ver la posibilidad de dónde agarrarlo en curva, cosa que no sería nada rara porque como humano que es tiene todo el derecho a equivocarse o de desdecirse y desde luego a cometer errores.

Sin embargo, según varios analistas han sido esta clase de todo tipo de ataquen en contra de AMLO los que lo han llevado a la cumbre porque de todo lo que le señalan, acusan y hasta hacen burla, sus ya casi antecesores se han visto en problemas muy similares o peores. Como ahora el supuesto paseo que se anda dando su hijo mayor en Europa, satanizándolo de tal modo como si fuera el único como hijo de político que hace esto. Lo raro es que de todos los detractores de AMLO porque su hijo se anda paseando y que aparentemente nunca ha trabajado para darse estos lujos, jamás han dicho nada cuando se dio a conocer la noticia de que un hijo de Carlos Romero Deschamps andaba presumiendo un automóvil de súper lujo, y una de las hijas presumiendo su viajes al continente Africano; y menos dijeron nada estos criticones de AMLO o de su hijo, sobre los paseos y gastos suntuosos de la esposa del presidente Enrique Peña Nieto.

Está bien, se dice que el hijo de AMLO anda gastando dinero a manos llenas, eso se dice, y que no hay una base confiable de dónde ha sacado el dinero; pero el meollo del asunto es que no cuadra esto con el sistema de austeridad que tratará de implantar AMLO en su próxima administración. Sin embargo, ¿quién nos podría asegurar que el hijo mayor de AMLO se anda paseando con dinero de los mexicanos? ¿Y si se sacó la lotería o le pegó al melate o al chispazo,  al Tris, etcétera? Porque existe la posibilidad que de acuerdo al bajo perfil con el que se ha mantenido la familia de AMLO, a la mejor sí ha trabajado en algo y ahora anda disfrutando de sus ahorros o quién sabe. El caso es que por lo que se ve, a AMLO lo tienen más vigilado que a una quinceañera con padres mochos o muy escrupulosos.

Ahora el motivo o pretexto para atacar a AMLO es el que se haya invitado al presidente venezolano Nicolás Maduro a su toma de posesión el próximo 1 de diciembre. Por este simple hecho ha sido criticado por ese grupúsculo de mexicanos que al parecer nada más les gusta hacer la mosca chillar o no están bien documentados sobre la realidad de Venezuela y menos de nuestra propia Nación y que se dejan llevar por las noticias ordenadas desde allende el Río Bravo para desestabilizar aún más a la hermana República de Venezuela.

Pero ¿quiénes son los que andan gritando que no se invite a Maduro a nuestro país? Pues primeramente algunos panistas que por lo regular la mayoría de ellos, si no es que todos están identificados con la derecha más recalcitrante, pero muy sumisa a los dictados de los gobiernos gringos, tal y como ha sucedido también con algunos priistas que, como al aprendiz de Secretario de Relaciones Exteriores Luis Videgaray Caso, se les hace inverosímil contradecir al gobierno gringo porque lo entienden como su patrón, como su mandamás; y si el nefasto gobierno gringo actual en manos del pinto color zanahoria de Donald Trump les ha ordenado que griten o salten por la visita de Maduro a nuestro país, así lo están haciendo; y hasta los comunicadores que siempre han estado pegados a la ubre presupuestal que no bajan de “dictador” al presidente de Venezuela, siendo que ha sido electo democráticamente.

Y lo tildan de dictador a Maduro y de persona non grata –para ellos- dizque porque viola los derechos humanos en su país. Y cosas así son las que más refrendan el apoyo a Maduro por parte de los libre pensadores que al compararlo con sus demás homólogos latinoamericanos, pues otros pierden más que don Nicolás en las comparaciones; comparaciones que, si bien son odiosas, ahora están sirviendo como parámetro para ver las gestiones de sus colegas.

De Nicolás Maduro se dicen infinidad de cosas adversas; sin embargo, hasta el día de hoy no se ha dicho nada sobre fosas clandestinas que se hayan encontrado en Venezuela tal y como acontece en México, ¿por qué?

Sea pues. Vale.