¿A quién culpar de los problemas de México?

Desafortunadamente al igual que en otros países del mundo, en el nuestro también llevamos muchos años escuchando a “gobernantes y gobernados” culparse mutuamente de ser obstáculo para encontrar soluciones a los principales problemas económicos, políticos y sociales que aquejan nuestra nación. Obstáculos y problemas que por supuesto, impiden el desarrollo necesario para lograr el gran propósito de ofrecer una mejor calidad de vida para todos los habitantes de esta sufrida nación. Personalmente creo que en una sociedad como la nuestra y dados los tiempos que vivimos, aunque no es del todo errado, tampoco es justo “achacar” toda la culpa de los problemas a quienes  nos gobiernan; pues si bien es cierto que quienes tienen en sus manos “EL PODER” para  tomar decisiones cometen errores o hacen mal uso de éste, también cierto es, que los ciudadanos fuimos quienes en su momento se los otorgamos y por tanto, según “las reglas que nos rigen”, es nuestra obligación vigilarlos, evaluarlos, calificarlos,  reprenderlos y/o reemplazarlos si lo consideramos necesario. Luego entonces, queda claro que EL QUE PERMANEZCA EN UN PUESTO DE GOBIERNO (cualquiera que sea su nivel) UN INDIVIDUO A TODAS LUCES INCAPAZ O DESHONESTO Y QUE TOMA DECISIONES QUE EVIDENTEMENTE NOS PERJUDICAN, LA CULPA FINALMENTE ES DE NOSOTROS LOS CIUDADANOS QUE LO PERMITIMOS. Hecha esta sencilla aclaración, creo que para este caso particular que nos ocupa ya no existe aquel dilema tan conocido de “si fue primero el huevo o la gallina”, pues si bien es cierto que “LA CLASE POLÍTICA” de la que comúnmente surgen nuestros gobernantes se ha vuelto cada vez más “MAÑOSA EIMAGINATIVA” para mentir, manipular, engañar y apropiarse del poder como si fuera algo propio; también es cierto que los ciudadanos en general HEMOS SIDO LO SUFICIENTEMENTE APÁTICOS Y/O COBARDES PARA PERMITIRLO. Si mis estimados lectores coinciden con un servidor en considerar válidas las anteriores REFLEXIONES, entonces también estarán de acuerdo en que LA SOLUCIÓN ESTÁ EN NUESTRAS MANOS, y que ya es tiempo de AGARRAR EL TORO POR LOS CUERNOS y comportarnos como CIUDADANOS MAYORES DE EDAD. Esto implica ser  RESPONSABLES, PARTICIPATIVOS Y EXIGENTES en todos los ámbitos que tengan que ver con decisiones que nos afecten como sociedad; y en especial, en nuestra relación con quienes de una u otra manera, esfera o nivel de importancia figuran con alguna representación civil, política o de gobierno. Relación en la que siempre habremos de reclamar y exigir que “estos” cumplan a cabalidad con lo que la normativa del caso establece según el cargo de que se trate. Ello va desde el que nos representa en nuestra colonia o sindicato, hasta el más encumbrado dignatario del país. Esto incluye también ABANDONARLA ATÁVICA Y PERJUDICIAL COSTUMBRE QUE TENEMOS LOS MEXICANOS DE RENDIR PLEITESÍA Y HACER SENTIR SUPERIOR A LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS O REPRESENTANTES QUE FINALMENTE RECORDEMOS, SÓLO SON SERVIDORES PÚBLICOS Y LOS CIUDADANOS POR TANTO, SOMOS SU RAZÓN DE SER. ¡Por supuesto que estoy hablando de todo UN CAMBIO DE CULTURA CI
UDADANA!  Dicho de otra forma, estoy hablando de una “reprogramación mental” tanto de nosotros los ciudadanos, como de los propios funcionarios  públicos y gobernantes. Es decir, volver a los orígenes del asunto de cómo y porqué surgió la necesidad de “elegir” representantes o dirigentes sociales, mismos que al aceptar serlo, adquirían el compromiso de “hacer su mejor esfuerzo” para cuidar y  velar por los intereses de sus representados y garantizar el bienestar de “sus electores mandantes”. ¿Qué cuándo y cómo fue que se “voltearon” los papeles y el servidor se corrompió y convirtió en mandante? Creo que discutir ese asunto no es ahorita lo importante, sino aceptar que permitimos que ocurriera y luego afanarnos en RECUPERAR NUESTRO PAPEL DE CIUDADANOS MANDANTES e insisto, hacer volver “a los susodichos desviados” a su papel original de SERVIDORES. ¿Sencillo y fácil? Claro que no será fácil ni sencillo, sin embargo, recordemos que una gran mayoría de votantes mexicanos tomamos la decisión de DAR LA ESPALDA A LOS POLÍTICOS DE SIEMPRE, y elegimos a uno que hoy ya es PRESIDENTE ELECTO e  igual que nosotros, ENTIENDE QUE LOS ASUNTOS DE GOBIERNO SE HAN VENIDO MANEJANDO INADECUADAMENTE Y QUE SE OCUPA UN CAMBIO DE FONDO PARA REGENERAR EL PAÍS. Entonces, es cuestión de  apoyarlo y claro está, vigilar y verificar que efectivamente transite por el camino y rumbo a los propósitos que quedamos y sabemos son los pertinentes para beneficio DE  TODOS. Si en otros países lo han logrado, ¿por qué en México no lo podemos hacer? Hagamos pues cada quien la parte que nos corresponde.

COROLARIO.- La noticia de la semana: Que en el equipo del Gobierno Estatal pronto “alineará” un nuevo integrante, mismo que entrará al relevo de Aníbal Montenegro Ibarra. ¿Las razones? Habrá que esperar el comunicado oficial. Hasta la próxima.