Hasta automóvil pueden adquirir trabajadores de la UAN a través de Protección al Salario
Oscar Gonzalez Bonilla
27 de Mayo de 2018
El salario del trabajador administrativo y docente de la Universidad Autónoma de Nayarit es suficiente como para solventar a crédito de dos años la compra de un vehículo automotor con valor hasta de 150 mil pesos.
La afirmación corresponde a la titular del Departamento de Protección al Salario, CP Judith Aréchiga Ramos, quien agrega que hace años desecharon la idea de conseguir crédito para la adquisición de vehículos del año, de seis años a la fecha lo hacen sólo para automóviles seminuevos, “viejitos, usados”, aunque hay modelo 2016.
Explica que durante el mes de noviembre de cada año realizan tianguis del automóvil para trabajadores de la UAN, durante el cual personal administrativo ha sido el más beneficiado con la adquisición de vehículos, virtud a que no tienen acceso a crédito bancario para la compra de coche por las estrictas exigencias.
Con Maestría en Recursos Humanos, Judith Aréchiga Ramos está como jefe del Departamento de Protección al Salario desde 1986. Ella es una de las fundadoras. La dependencia funge como intermediaria en el otorgamiento de crédito ante las diferentes empresas y comercios. Los universitarios pueden adquirir de esta manera carros, motos, refacciones, llantas, seguros de vida y auto, muebles, ropa, calzado y hasta productos de primera necesidad, entre muchos más artículos.
Se ufana de hacer el trámite en beneficio del universitario en menos de cinco minutos mediante la exposición de un simple vale, “documento que para nosotros es oficial, pero con importancia y validez ante cualquier empresa o comercio”.
Echa a volar la imaginación y Judith Aréchiga recuerda que en aquellos años “la Universidad tenía mala fama en cuestión de pago, le tenían pavor. Eran otros tiempos y otras circunstancias cuando se creó el departamento. A mí me costó mucho trabajo, recuerdo perfectamente que el primer paquete que hicimos fue el escolar: papelería, uniformes y zapatería con negocios como El Águila, La Campanita y Paquita”. Esta última propiedad de la familia del exrector Joaquín Cánovas Pouchades, que de entrada negó el crédito, pero finalmente lo concedió.
“Hemos realizado intensa labor de gestoría, nuestro trabajo principal es gestionar y mucho trabajo nos costó que los proveedores accedieran a proporcionar un crédito; lo dialogamos y lo establecimos a cuatro quincenas sin intereses a pagar mediante el descuento en nómina. Este departamento funge como administrador-aval-administrador, nosotros pedimos el descuento en nómina y la universidad nos paga lo que nosotros retenemos al trabajador y así liquidamos a cada uno de los proveedores la parte proporcional de la compra”.
Más que protección al salario, me parece que ustedes promueven el gasto del mismo, comenta el reportero de la gente a la titular del departamento universitario.
Suelta una anécdota: “Recuerdo que el doctor Morteo me vacilaba cuando me decía: no Judith, no es protección al salario, eres la destructora del salario”.
Hace referencia a que los tiempos han cambiado en razón del establecimiento de grandes empresas comerciales y bancarias que conceden sin mucho miramiento tarjetas de crédito. “Hay quienes en su cartera las traen como si fueran naipes”.
Aréchiga Ramos aclara que el Departamento de Protección al Salario no maneja dinero, es el proveedor -alrededor de 50- quien ofrece el crédito, en tanto esta dependencia sólo se encarga de los trámites interiores en la universidad para realizar el pago oportuno.
Hasta el momento son alrededor de tres mil 200 los trabajadores incorporados al departamento, pero todos quienes integran la comunidad en la universidad tienen derecho al uso del programa de créditos. Aunque -aclara- hay quienes no se acercan al beneficio porque “no les gusta que les descuenten por nómina, o porque su capacidad económica es más que solvente, pero son los menos”.
La Contadora Judith Aréchiga Ramos expresa su admiración por la capacidad visionaria de Luis Manuel Hernández Escobedo, secretario general del Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Universidad Autónoma de Nayarit (SETUAN), para crear el Departamento de Protección al Salario, una vez que en el mismo 1986 se dio el cierre de la tienda de autoconsumo para los trabajadores de la UAN (tipo ISSSTE o Seguro Social).
Comentarios