La riqueza del subsuelo venezolano

Cada vez que la Selección Mexicana de Futbol va a participar en alguna de las tantas competencias a nivel internacional surgen controversias sobre la actuación del seleccionado mexicano. Y desde luego quienes dicen que nuestra selección perderá, son tachados de anti mexicanos, de malinchistas e incluso hay quienes señalan a quienes ponen en duda el posible triunfo de los futbolistas mexicanos, que hasta les dicen “traidores a la patria”.

Obviamente que hasta a los que no nos apasionamos por dicho deporte nos gustaría que la Selección Mexicana de Fútbol destacara y ganara algún campeonato; sin embargo, nada tiene de malo el analizar el cotidiano mal desempeño de nuestros futbolistas y deducir que seguirá, como ya tiene buen tiempo, sin hacer un buen papel. Y esto es lo extraño, pues a pesar de que nuestro país se destaca a nivel mundial como uno de los más futboleros, son pocos los triunfos que ha logrado y si se habla de la Selección Mexicana en el mundo, es más bien por lo mal que jugaron o por las goleadas que sufrieron.

Todo lo anterior viene a colación debido a que así como hay mexicanos que sin apasionamientos no esperan nada bueno de los futbolistas mexicanos en un torneo internacional por no haber obtenido buenos resultados, y los triunfos que ha obtenido quedan en entredicho por no convencer a la afición, es lo que está pasando entre muchos mexicanos con el affaire que abrió el gobierno mexicano en contra de la Hermana República de Venezuela, pues si alguien se inclina a favor del país sudamericano de inmediato se le dice que no ama a México y que mejor se vaya a vivir a Venezuela , que le prenda una veladora a Nicolás Maduro, que cómo es posible que se ponga de lado de ese “dictador” y un largo etcétera de epítetos tan solo por analizar y ver las cosas imparcialmente y sin romanticismo de por medio un problema que a fin de cuentas atañe única y exclusivamente a los venezolanos y nada más; sin embargo, a pesar de todo esto, nuestro actual gobierno está metido hasta el cuello en  los denuestos hacia dicho país del sur del continente, porque el secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Videgaray Caso, fungió como el presidente de la mesa de debates de la Organización de los Estados Americanos (OEA), y por lo mismo hasta impulsando veladamente los señalamientos sobre la actual situación de Venezuela y además, afirmando que la entonces canciller venezolana Delcy Rodríguez, se había expresado en esa reunión con ofensas, groserías y majaderías hacia los cancilleres de otros países; cosa en la que desde luego se vio muy mal el canciller mexicano, porque lo único que hizo la señora Delcy Rodríguez fue defender a su nación con números no de Venezuela, tal y como la canciller venezolana lo señaló firmemente, sino con datos duros de organizaciones internacionales afiliadas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Y más mal se vio Videgaray Caso al lanzar miradas de desaprobación a los países que no le hicieron el juego de juzgar malamente a Venezuela, algo que se vio muy claro en el debate televisado y que cundió en las redes sociales, cuando habló el canciller de Nicaragua.

Lo extraño es que el Poder Legislativo en su conjunto no haya llamado a cuentas al secretario de Relaciones Exteriores mexicano por estar violando flagrantemente nuestra Carta Magna, especialmente en su artículo 89 que señala claramente la no intervención y la libre auto determinación de los pueblos, así como las resolución pacífica de las controversias; y más, porque todos estos señalamientos en determinado caso debería llevarlos a cabo el propio Presidente de la República y sin intermediarios.

Así que desde el primer momento en que Luis Videgaray comenzó todo este argüende, de inmediato debió haber sido llamado a cuentas al Congreso de la Unión para que explicara de bien a bien cuál es el motivo de su intromisión en asuntos de otro país y que no le atañen en lo absoluto y menos, porque de toda la información que se ha estado transmitiendo mediáticamente en contra de Venezuela, mucha de esa información está en duda de que en realidad sea cierta, porque hoy en día se ha puesto de manifiesto que la mano del gobierno gringo tiene mucho que ver en esos denuestos en contra de Venezuela, porque se han desmentido muchas de las supuestas agresiones del gobierno venezolano en contra de los manifestantes; y además, se ha estado mostrando el verdadero motivo de quitar al presidente Nicolás Maduro: las riquezas del subsuelo venezolano.