Triunfo y alternancia...

Nayarit está a punto de consumar una histórica alternancia político-gubernamental, como resultado del irreversible y contundente veredicto mayoritario de las elecciones del pasado cuatro de junio, en donde los candidatos de la Alianza “Juntos por Tí” que conformaron los partidos PAN, PRD, PT y PRS, bajo la coordinación del joven empresario Antonio Echevarría García, se alzaron con la victoria en la contienda por la gubernatura,10 alcaldías, 16 diputaciones y la mayor parte de las regidurías y sindicaturas, en contraposición con el actual partido en el gobierno, el PRI.

No obstante que dicha alternancia se dará por segunda ocasión, pues su simiente radica en la gran batalla de 1999 que tuvo de protagonista precisamente a Antonio Echevarría Domínguez, padre de quien será el próximo Gobernador, sus circunstancias fueron distintas para un escenario distinto en que la sociedad depositó su confianza en tal proyecto que logró abanderar  hasta el final la esperanza colectiva de construir conjuntamente “una nueva historia para Nayarit” que sume, integre, reunifique y subsane al erradicar los graves flagelos que la aquejan como consecuencia de las peores condiciones de gobernanza por las que a su vez se atraviesa.

De conformidad, la ciudadanía pudo captar en esta versión de la alianza, la decisión valiente de una generación política que no tiene más opción que mantenerse a la altura de las expectativas con trabajo de continuo, dar un vuelco a los actuales y desgastados estereotipos de magras condiciones, que no pierda en lo absoluto el indispensable camino de la coparticipación popular.

Ya lo dijo el virtual ganador de la Gubernatura, Toño Echevarría: “Nuestro único padrino fue el pueblo de Nayarit, y con quien únicamente tenemos compromiso es con el pueblo de Nayarit". Y tiene razón, la votación tan solo en su caso, de 197 mil 481 sufragios, y del también triunfante Javier Castellón Fonseca en la Capital, cercana a los 60 mil sufragios, que marcan una notable diferencia con sus más cercanos contendientes, genera la valiosa oportunidad de gobernar al margen de cualquier presión, chantaje o “concertasesión”, a efecto de poner orden, fomentar las mejores condiciones de gestión y práctica gubernamental, y construir soluciones prácticas y eficaces para el corto, mediano y largo plazo, las cuales se traduzcan en beneficios sustantivos para todos; el tiempo es corto, cuatro años, lo espacios y coyunturas para lograr las metas, el reto: de aprovecharlos al máximo. En tanto que por el momento, de acuerdo a la ley, solo es cuestión de que las autoridades electorales den cumplimiento irrestricto a lo
dispuesto, validen y den constancia a la brevedad posible de la decisión popular.

"Hemos dado un gran paso -dijo Echevarría García ante miles de ciudadanos en reciente convivio con motivo del triunfo-, ya ganamos las elecciones, y yo les digo a los presidentes municipales, a los regidores y a los diputados de esta gran alianza Juntos por Ti que no le quedemos mal al pueblo; les pido a los dirigentes de los partidos políticos que no nos dividamos, ocupamos ir juntos en el Congreso para hacer leyes productivas para los nayaritas, para que en los municipios donde gano la alianza Juntos por Ti puedan cumplir cabalmente con lo que se comprometieron".

En la medida pues, en que el oficio político y comunicacional -comunicando y siendo comunicado eficazmente, en la reproducción analítica que mueve a la acción- revista el ejercicio del Ejecutivo como fortaleza continua de un liderazgo del pueblo y para el pueblo, se podrá incidir asimismo en la configuración de una fuerza de apoyo y compromiso símil con la ciudadanía en el Congreso del Estado y demás, a fin de hacer palpable el llamado del próximo Gobernador: “ir juntos en el Congreso para hacer leyes productivas para los nayaritas, para que en los municipios donde gano la alianza Juntos por Ti puedan cumplir cabalmente con lo que se comprometieron". Y en consecuencia, de esta alternancia histórica,  pasar a una gran transición histórica, que será en efecto la gobernanza conjunta que vele en hechos de probada eficacia por los intereses de todos y para todos.

Ya queda poco tiempo para el inicio entonces, de esa propugnada nueva etapa, y el pueblo de Nayarit más que un período de gobierno de cuatro años, en el Gobierno, en Tepic, y en el resto de los municipios, espera el parteaguas de un nuevo tiempo que garantice el derecho colectivo de retornar al camino del progreso, donde el desarrollo por fin ya sea armónico, para todos, en el campo y la ciudad, en la costa y en cada rincón de la geografía estatal, haciendo asequible la productividad de un gobierno comprometido pues con el derecho inalienable de vivir en paz. Que así sea entonces.