Gana la Francia transnacional con Macron en la eurozona

Emmanuel Macron asumió la presidencia de Francia el domingo 14 de mayo del 2017 y prometió reducir las divisiones en la sociedad, en alusión a la dura campaña que lideró para derrotar a la ultraderechista Marine Le Pen. ¿Qué significado tiene su triunfo electoral y la consecuente derrota de su oponente Le Pen?

Desde el punto de vista geopolítico, su triunfo electoral significa el robustecimiento de la eurozona, después del abandono del Reino Unido que vino a desestabilizar la cohesión de los países en la Unión Europea. Por eso, Laurent Fabius, presidente del Consejo Constitucional, al proclamar al ex banquero Emmanuel Macron como jefe de Estado le dijo: "Para ser el hombre de su país, hay que ser el hombre de su tiempo"… "Sin duda, usted es un hombre de nuestro tiempo, por sus decisiones, por su formación, por su carrera y hasta por su estado civil"… "Y por la elección soberana del pueblo, ahora es, sobre todo (...) el hombre de nuestro país". Una clara alusión a su postura a favor de la globalización del capitalismo europeo y de apoyo a la Unión Europea. Por eso en su primer discurso como presidente, Macron dijo que los franceses que habían elegido "la esperanza y el espíritu de conquista". Y prometió también que la Unión Europea, golpeada por la inminente salida del Reino Unido, será "reformada y relanzada" durante su mandato. Por su parte, y en el mismo sentido,  su esposa Brigitte Macron, de 64 años, quien fue su profesora y más fiel aliada en su conquista del poder expresó: "El mundo y Europa necesitan a Francia ahora más que nunca y necesitan una Francia fuerte con un sentido de su propio destino"

Desde el punto de vista del acceso al Poder, Macron demuestra que no es indispensable la tradición política ni la experiencia en el ejercicio previo de dicho Poder. Un centrista proeuropeo de 39 años, sucede al socialista François Hollande una semana después de haber derrotado en la segunda vuelta de las elecciones a la líder de la extrema derecha Marine Le Pen. El ex banquero nunca antes se había sometido al veredicto de las urnas y el domingo fue proclamado jefe de Estado. Una gran lección electoral. Una conciencia política popular transnacionalista unió a las supuestas izquierdas con las derechas transnacionales para llevar al Poder a alguien que les garantizara, a los grandes capitales transnacionales desde luego, mantener el neo-liberalismo, o sea, el libre acceso de las mercancías y de los capitales a todos los países del mundo. En este sentido llama la atención la enajenación del pensamiento e intereses propios de los trabajadores franceses por el pensamiento ajeno a ellos y a sus intereses, como es el pensamiento de los capitales transnacionales.

Hoy lunes, se espera que Macron revele el nombre de su primer ministro, antes de volar a Berlín para reunirse con la canciller alemana Angela Merkel. Él es un ferviente europeísta y quiere impulsar una cooperación más estrecha con la primera economía de la zona euro para ayudar al bloque a superar la inminente salida de Reino Unido, otro de sus miembros más poderosos. También quiere proponer a sus socios la creación de un parlamento y un presupuesto para la eurozona. Sin embargo, el nuevo presidente de Francia tiene que solventar en junio unas difíciles elecciones legislativas en las que su movimiento político buscará la mayoría absoluta para poder aplicar su ambiciosa agenda de reformas. En fin.