Fidel Castro a la eternidad

Ayer por la tarde millones de cubanos rindieron un póstumo homenaje al histórico líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, todos ellos congregados en la monumental Plaza de la Revolución en aquel país caribeño.

En este evento histórico estuvieron presentes numerosos mandatarios de naciones latinoamericanas, asiáticas, africanas, europeos y delegaciones especiales de las potencias mundiales de los Estados Unidos de Norteamérica, Rusia, China, Japón, Alemania, Francia y, por supuesto el Presidente de México, Enrique Peña Nieto.

El comandante Fidel Castro Ruz de formación jesuita pero luego una vez en el poder de la república de Cuba asumió la construcción de la utopía socialista durante más de 50 años; durante el ejercicio prolongado de su poder actuó con mano dura mediante la represión a cualquier signo de disidencia.

Para algunos Fidel Castro fue un héroe y para otros fue un tirano que traicionó sus propios ideales.

Fue un héroe porque fue un líder carismático que con un grupo de apenas 80 jóvenes idealistas, entre ellos el Che Guevara desde la Ciudad de México se embarcaron en el Puerto de Veracruz rumbo a las montañas de aquel país quienes con las armas en la mano y con su firme decisión de liquidar la dictadura de Fulgencio Batista y luego tras largos años de lucha logró conformar una insurrección popular armada que lo llevó a derrocar al dictador Batista, quien mantenía a millones de cubanos en la extrema pobreza mientras que una minoría en el poder convirtió a Cuba en un inmenso prostíbulo de los Estados Unidos.

Fue un héroe porque siendo Cuba un pequeño país caribeño logró vencer el ignominioso embargo comercial de la Unión Americana por más de 50 años. Durante su gobierno liquidó el analfabetismo, construyó miles de escuelas básica, media y superior gratuita; edificó a lo largo y ancho de la Isla cientos de hospitales de alta especialidad gratuitos; fomentó el deporte de alto rendimiento; la cultura y las bellas artes y el desarrollo de la ciencia y tecnología.

Fue un héroe porque en la crisis de los misiles a principios de la décadas de los 60´s Fidel Castró alertó al presidente de la Unión Soviética, Nikita Krutchov del peligroso riesgo que corría la humanidad si las dos potencias desataban la guerra pues esta ya no sería convencional si no termonuclear lo que provocaría la desaparición del género humano. Con firmeza el comandante Castro le exigió a Nikita Krutchov actuara con prudencia y que no utilizara a su país como pretexto para lograr sus objetivos estratégicos políticos-militares. De no ser por esta actitud heroica de sacrificar a su pueblo en aras de la salvación de la humanidad fue posible que las dos potencias mundiales encabezadas por John F. Kennedy y Nikita Krutchov firmaran un acuerdo de paz y hoy continuemos escribiendo esta columna.

Fidel Castro fue símbolo de heroísmo porque fue el ejemplo para que otras naciones pobres del mundo se sublevaran a sus dictaduras e hicieran posible la edificación de países democráticos, aunque algunos de ellos pervirtieron esos ideales de cambio humanístico.

Fue un tirano porque una vez que conquistó por las armas el poder presidencial durante el curso de su mandato de 50 años aplastó las libertades ciudadanas, envió al paredón de fusilamiento, a las cárceles o al exilio a quien disentía de su gobierno sostenido en el partido comunista y en las fuerzas armadas revolucionarias. Durante su mandato presidencial no toleró la formación de otra organización política como alternativa a la del gobierno en el poder.

Fue un dictador porque mantuvo férreamente una economía cerrada al exterior salvo con los países amigos en la que estableció relaciones por conveniencia política o económica. Este aislacionismo aunado al embargo de los Estados Unidos llevó a la pobreza a millones de cubanos porque ni siquiera podían establecer sus propios negocios. Había una Cuba que sobrevivía de las raciones alimenticias que provenían del estado y otra Cuba que compraba alimentos en tiendas de autoservicio solo para extranjeros.

Lo que no hay duda es que Fidel Castro pasará a la historia como uno de los últimos líderes más controvertidos del siglo XX. Ahora serán las nuevas generaciones de cubanos los que estarán llamados a construir una sociedad democrática, de respeto a la pluralidad ideológica y religiosa, a reconciliar a toda la comunidad cubana y de una economía abierta al mundo para que todos los cubanos puedan disfrutar de todos los avances de la ciencia y la tecnología, o sea retomando los ideales humanísticos y universales del joven revolucionario Fidel Castro Ruz…