Tepic, Nayarit, sábado 23 de noviembre de 2024

Sin pies ni cabeza

Sergio Mejía Cano

22 de Julio de 2016

Se dice comúnmente que segundas partes nunca son buenas, y si bien tanto un sector del PAN como otro del PRD en Nayarit están pensando en volver a arrebatarle la gubernatura del estado al PRI, ahora las circunstancias son mucho muy diferentes a como se presentaron en 1999, debido al desprestigio de los partidos políticos entre la ciudadanía, pero más al factor de desunión que existe entre los mismos militantes tanto del PAN como del PRD.

Y más desprestigio aún de los partidos antagonistas al PRI, porque pregonan a voz de cuello que su única aspiración es no dejar que llegue el PRI al triunfo el próximo año de 2017, y esto es lo que ha puesto a levantar las cejas a gran parte de la población interesada en el acontecer político de la entidad, porque si lo que pretenden el PAN y PRD es no dejar que el PRI se alce con la gubernatura, pues de ahí que buena parte del electorado se ponga a pensar que dichos partidos no piensan o no tienen un programa de gobierno ni tienen contemplados bienes sociales ni nada por el estilo más que hacerse del poder político en el estado; y eso como que para nada inspira confianza en esa parte de la ciudadanía que se podría interesar ahora sí a entrar de lleno en cuestiones políticas y dejar la apatía que los ha llevado a ser parte del abstencionismo ya tan arraigado no nada más en Nayarit, sino en todo el país.

Sin embargo, esa posible alianza entre el PAN y el PRD está en veremos ahora con el cambio en la presidencia nacional del partido del Sol Azteca, porque de entrada, la nueva presidenta del PRD, Alejandra Barrales, ha dicho que en caso de haber alianzas con el común acuerdo entre las corrientes de su partido, sería primeramente con otro partido de izquierda, y si los tiempos lo dicen, posiblemente con otros partidos, pero que no será el PRD quien los busque porque no desea que el PRD sea un partido que vaya agarrado de la cola de otro; pero también señaló la señora Barrales, que en lo primero que habría que pensar hoy que asume la presidencia de su asociación política, es en la reposición del partido, en fortalecerlo y pensar en la unidad de sus integrantes.

Y a propósito de integrantes, varios de los perredistas le han dicho abiertamente a la flamante presidenta del PRD que sería mejor buscar la alianza con el Partido Movimiento de Renovación Nacional, más conocido en el bajo mundo como MORENA, partido que nació bajo la tutela del sempiterno candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y más ahora que se dice, AMLO se ha abierto al diálogo con los grupos perredistas, por lo que existe la posibilidad de que se haga efectiva esta alianza si bien no en lo inmediato, sí para el 2018. Y precisamente para ese año es que hasta el señor Miguel Barbosa, coordinador del grupo parlamentario del PRD en el Senado de la República, quien haciendo coro con otros connotados perredistas le han sugerido a la señora Barrales, que piense primeramente en una alianza con otras fuerzas de izquierda antes que con el PAN.

Pero hay otras voces al interior del mismo PRD que cuestionan la llegada de Alejandra Barrales a la residencia de su partido, aduciendo que fue impuesta para tenerla a modo en una posible alianza para el 2018, y ese es precisamente el temor de Miguel Barbosa y allegados, pues temen que Barrales tenga en la mira contender por el gobierno de la flamante Ciudad de México y que aliada con el PAN, trate de impulsar la candidatura de la señora Margarita Zavala de Calderón.

Aquí en Nayarit, ya hay quien se esté frotando las manos pensando en una coalición PAN-PRD, pero si los grupos perredistas que están en contra de tal alianza se imponen a la señora Barrales, bien podrían derrumbarse los sueños de los que ya se ilusionan con dicha coalición, y si bien se dice que el señor Guadalupe Acosta Naranjo es prácticamente el dueño del PRD en Nayarit, si la dirigencia nacional se opone a la alianza con el PAN, a menos que Acosta Naranjo trabaje en Nayarit como si el PRD fuera un partido local, tal vez solamente así se podría aliar de acuerdo a sus propios intereses. Porque es más que probable que así como lo manifestó de entrada doña Alejandra de que si hay alianza la primera tendría que ser con la misma izquierda, pues como que para el 2017 es este mensaje, año en que habrá elecciones en Nayarit y otras entidades. Así que quienes andan detrás de Acosta Naranjo para ver si cae algo, será mejor que lo piensen más a fondo, porque hoy en día, el PRD no tiene pies ni cabeza.

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