Navidad
Héctor Severiano Ocegueda
28 de diciembre de 2015
(Segunda y última parte)
FASCISMO a la MEXICANA
En la columna anterior recordamos casos de CELEBRACIONES decembrinas vinculadas al SOLSTICIO de INVIERNO. El ÁRBOL de NAVIDAD fue tomado por el CRISTIANISMO de los pueblos NÓRDICOS (del norte de Europa) quienes, en días decembrinos colocaban un árbol en honor al dios FREY (Sol), el árbol representaba un símbolo del UNIVERSO (Yggdrasil) y cada parte del árbol poseía un significado especial según estuviera colocado en la base o en la cúspide. Esta costumbre fue transformada por el CRISTIANISMO en un acto de veneración al recién nacido Niño Dios, una práctica que implicó ADAPTAR los rituales de los pueblos nórdicos a la liturgia CRISTIANA, a través de personajes como San Bonifacio, un predicador del Evangelio en Alemania que se ATREVIÓ a tal adaptación colocando en el árbol original algunas novedades como las MANZANAS en clara alusión al pasaje BÍBLICO de Adán y Eva y unas VELAS que representaban la LUZ de las enseñanzas de Jesús. Como quiera que hubiera surgido, no cabe duda que la TRADICIÓN de colocar árboles de NAVIDAD, con todo su COLORIDO pletórico de LUCES y esferas, deviene una HERMOSA costumbre decembrina.
Colocados en la perspectiva específica de la Navidad de 2015 en México, resulta indispensable recordar que el año que termina fue de un PREOCUPANTE incremento de la VIOLENCIA CRIMINAL a la que por supuesto NO es ajeno el Estado mexicano, EMPEÑADO en imponer SU LEY a sangre y fuego. En 2015 el gobierno que encabeza PEÑA Nieto sufrió el señalamiento internacional por una CRISIS de DERECHOS humanos que se vive en México, a raíz de la persistente DENUNCIA de hechos BRUTALES cometidos por presuntos CRIMINALES pero también por fuerzas del Estado (militares y policiacas) a las que se ha señalado como responsables de hechos que nada le piden a los cometidos durante los años setenta del siglo XX por la DICTADURAS militares en América del Sur.
Aquellas dictaduras fueron IMPUESTAS por Estados Unidos, en apoyo a los grupos de PODER que sentían AMENAZADOS sus intereses por movimientos sociales y políticos de IZQUIERDA, con casos emblemáticos como el del GOLPE militar contra el gobierno constitucional encabezado por Salvador ALLENDE en Chile el 11 de septiembre de 1973. Ciertamente en México NO ha ocurrido un GOLPE militar con las características del que DERROCÓ al gobierno de la Unidad Popular en Chile, pero en los hechos, el PROTAGONISMO militar y policiaco que los gobiernos CIVILES les han OTORGADO desde el gobierno de Felipe CALDERÓN hasta el actual de Enrique PEÑA, permite establecer un ASOMBROSO parecido a lo que sucedió en la nación chilena y en otras naciones suramericanas, por lo que NO se exagera si se afirma que en este país actúa desde hace años un FASCISMO a la MEXICANA, que NO es del tipo que AZOTÓ a Suramérica en los años setenta, pero que por su contenido TERRORISTA destinado a ASESGURAR los intereses del CAPITAL TRASNACIONAL y la OLIGARQUÍA nacional, recuerda al de las dictaduras GORILAS que Estados Unidos auspició en América del Sur.
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