En México más pobres con pocos ricos
Octavio Camelo Romero
26 de agosto de 2015
El secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, CONEVAL, Gonzalo Hernández Licona dijo en el Senado de la República que “es impensable reducir la pobreza si no tenemos crecimiento en la actividad económica, y ello no ha ocurrido por lo menos en los últimos 20 años”, o sea, según nosotros, desde Ernesto Zedillo hasta Enrique Peña Nieto. Subrayó que la evolución del ingreso corriente per cápita 1992-2014 a precios de 1992 se ha mantenido prácticamente igual: en 1992 las familias tenían 3 mil 500 pesos al mes y en 2014, 3 mil 600 pesos, sin embargo le faltó decir que los precios de la “canasta básica” han aumentado considerablemente. Respecto a los últimos dos años del periodo peñanietista se tiene que la población con ingreso inferior a la línea de bienestar se incrementó al pasar de 51.6 a 53.2. Hernández Licona señaló que la población con ingresos bajos aumentó en general, la pobreza extrema disminuyó, pero hubo un aumento general de la pobreza en general.
Según los datos de la Standardized World Income Inequality Database, con datos de entre 2008 y 2012, México tiene un Coeficiente de Gini de 0.441 cuando el promedio es de sólo 0.373, o sea, nuestro país tiene mucha más desigualdad que el promedio de todos los países de la muestra, esto es, ocupa el lugar 87 de 113 países lo que significa que más de 75 por ciento de los países del mundo son menos desiguales. Por otra parte en estimaciones no oficiales del Global Wealth Report 2014 de Credit Suisse se señala que el 10 por ciento más rico de México concentra 64.4 por ciento del total de la riqueza del país. Y un reporte de Wealth Insight reveló que en 2012 había en México 145 mil individuos con una riqueza neta superior a un millón de dólares. En conjunto sus riquezas ascendían a un total de $736 mil millones de dólares. Estos millonarios representaban menos del uno por ciento de la población total y concentraban en ese año alrededor del 43 por ciento de la riqueza total del país. El reporte de Wealth Insight señala que la riqueza de estos millonarios excede por mucho el promedio que corresponde a los millonarios de otros países, quienes concentran apenas el 29 por ciento de los recursos de sus respectivos países. El número de multimillonarios en México no ha crecido. Se calcula que en la actualidad son alrededor de 16. Sin embargo, lo que sí ha aumentado es la magnitud de sus riquezas.
La mundialización del capital se percibe claramente desde hace poco más de 20 años atrás. El tejido de intereses capitalistas de distintas partes de mundo se ha amalgamado en un único interés general: obtener ganancias de sus inversiones. No importa si el obrero colectivo generador de la utilidad está constituido por latinoamericanos, norteamericanos, europeos, asiáticos y por africanos. Lo único que importa es su creación de ganancia y que el Estado Nación garantice su apropiación. Para la obtención de ganancia tampoco interesa la ubicación geográfica de las empresas. Pueden estar en distintas ciudades del mundo las plantas productivas. Por eso la práctica política actual necesariamente debe ser diferente a la de los años 30-40 o a la de los años 60-70 del siglo pasado. Por lo pronto el PRI y el Gobierno de la República priista ya dieron su primer paso de adecuación a las exigencias del Capitalismo Global de hegemonía occidental. Y como atinadamente los presidentes tanto del partido como de la República lo han dicho, la normatividad fundamental y secundaria son como un corsé que impide enfrentar los grandes retos del país. Por ello hubo de adecuarse con las Reformas Estructurales en el caso del país y con los documentos básicos en el PRI. Lo que estamos viendo es el resultado de todas estas transformaciones en el modelo de desarrollo del país. Sin embargo tenemos una clase política gobernante torpe e ineficaz que provoca más laceraciones en el cambio. En fin.
Comentarios