(Segunda parte)
Guadalupe Francisco Javier Castellón Fonseca empezó con el pie izquierdo en el escabroso juego político de la designación por parte de la militancia, o más bien por la tribu empoderada del comité nacional, como candidato del PRD al cargo de elección popular.
En 2005, por una decisión de cúpula partidista se vio
obligado a ceder su lugar como aspirante a candidato del PRD a gobernador de Nayarit al doctor Miguel Ángel Navarro Quintero, quien dimitió del PRI inconforme porque en la elección interna le hicieron trampa para evitar que fuera candidato a gobernador.
El acuerdo en aquel entonces de la dirigencia nacional del PRD que encabezaba Leonel Godoy fue que a Javier Castellón no obligaran a declarar que declinaba a la aspiración de ser candidato, sino que el anuncio lo hiciera la comisión de la alianza que integraban PRD, PT Y PRS como si fuera una decisión de ella.
Otro punto del acuerdo para él importante fue que sería apoyado en la siguiente elección federal. “Por eso, en el 2006, cuando se planteó lo de las candidaturas, yo pedí ser candidato a senador, por tanto recibí el apoyo de la dirigencia nacional del partido”, sostiene Castellón. Fue senador de primera minoría durante seis años.
Tras afirmar que no hubo más acuerdos que esos, explica que la determinación de separarse de la precandidatura fue discutida y analizada en las oficinas del PRD de la calle Monterrey en Tepic por Leonel Godoy, Jesús Ortega, Guadalupe Acosta Naranjo, Carlos Navarrete y el propio Javier Castellón con el doctor Miguel Ángel Navarro Quintero.
Castellón no oculta su pesar de entonces, sobre todo porque año y medio había realizado precampaña, una vez que en julio de 2004 dejó de fungir como rector de la Universidad Autónoma de Nayarit. Semanas después de este acontecimiento, dice que construyeron la Alianza por Nayarit con el PT, PRS y PRD.
Hicieron el esfuerzo hasta finales de 2004 por integrar al PAN a dicha alianza, pero la dirigencia del blanquiazul tomó la decisión de nombrar a Manuel Pérez Cárdenas como su candidato a gobernador de Nayarit.
Narra Javier Castellón que el consejo estatal del PRD lo había ya postulado como candidato a gobernador, estaba a punto de rendir protesta durante un acto en la plaza principal de Tepic, cuando el Senado a través de su canal de televisión, en programa de noticias, dio a conocer que el doctor Miguel Ángel Navarro Quintero sería el candidato.
A él nadie le avisó de tal acontecimiento, tampoco nadie lo consultó.”Por supuesto que tal determinación me molestó sobremanera, me dejó muy dolido porque consideré no ser la manera de tratar así a un militante que se la partió durante año y medio en el trabajo de proselitismo para que todo quedara en la nada”.
“Nos invadió la pesadumbre porque hubo un considerable grupo de perredistas, universitarios y simpatizantes que se sumó a la aspiración por la candidatura, me apoyaban sin cortapisas, por consiguiente externaron su molestia. Quizá eso fue lo que más pesó en mí en ese momento”.
A la mejor festinó no haber participado en esa elección por la gubernatura, le comenta el reportero de la gente. Ni usted maestro, le hubiera ganado al priista Ney González, agregué.
Su respuesta a la velocidad del relámpago.
“El hubiera no existe. Las elecciones son de circunstancias.
“En verdad, no digo que bueno que no participé, pues no es un asunto de juicio de valor. Si no participé, las circunstancias que se dieron en aquel tiempo lo provocaron.
Luego reflexiona que las propias circunstancias generaron la victoria Ney, “cuando pudimos haber ganado en el 2005”. Pone el ejemplo de la entrada tarde (seguro a la campaña) de las fuerzas políticas de Antonio Echevarría Domínguez.
“Recuperar la historia de aquel momento implica señalar que las mismas circunstancias no nos permitieron llevar al triunfo a Miguel Ángel. Quiero recordar que la diferencia en el porcentaje de votos fueron dos puntos, no fueron más. En Tepic, por ejemplo, ganó Miguel Ángel, es decir, venció la candidatura a gobernador, aunque la presidencia municipal haya sido ganada por el candidato del PRI.
“Las circunstancias son las que finalmente generan las cosas. Eso fue lo que pasó. La verdad, yo no digo si es bueno o es malo. Ni sé qué hubiera pasado si hubiera sido candidato, quizá no hubiera ganado, pero en los procesos electorales suceden cosas que a veces uno no entiende.