XXXI Legislatura: el inicio

Tal como se contempla en los artículos 35 y 36 de la Constitución Política del Estado, la XXXI Legislatura entró en funciones este 18 de agosto, tras su instalación previamente el día 17; y lo hizo, ya en un marco singular característico de nuestros tiempos: la consabida realidad político-social donde la sociedad sigue muy de cerca el desenvolvimiento de sus gobernantes y representantes populares, en espera de un cambio sustancial de mayores respuestas a sus crecientes necesidades.

Así, no son de extrañar las ‘sorpresas’ generadas en el reacomodo final de las fuerzas partidistas que tendrán concurrencia en dicho poder, toda vez que la lucha de cada cual por asegurar su mejor posición, deja constancia del desafío al que se enfrentarán de cara al actor más importante que asimismo cuantificará, después de todo, lo bueno o malo que se efectúe: el pueblo nayarita.

Por ello, cuán importante es de que el mensaje de apertura pronunciado por el Presidente de la Mesa Directiva y coordinador del grupo parlamentario del PRI, Jorge Humberto Segura López, posea el eco suficiente para que en efecto “en una democracia, el Poder Legislativo (juegue) un papel medular en el impulso y regulación de las transformaciones que se presentan en la vida social, económica y política”; y de conformidad “siempre (prevalezca) el interés general por encima de pasiones e intereses personales o de grupos, y al mismo tiempo una sana coordinación y cooperación con el Ejecutivo del Estado, para impulsar y salir al paso de la problemática que vive Nayarit”.

Es de ahí, que toda decisión –ya sea de manera colectiva o individual- tendrá grandes repercusiones para el ejercicio de la presente Legislatura, y de la consecuente concepción que influye determinantemente en la confianza de la ciudadanía. Que en esas condiciones, al no haber una mayoría completa para partido alguno, se hace indispensable entonces un trabajo de constante cabildeo racional, legal y transparente que trascienda a la sociedad y por ende le haga asequible razón, causa y efecto del trabajo realizado.

Para el Diputado del PAN, Javier Hiram Mercado Zamora, existe pues “un gran compromiso de los 30 diputados con los nayaritas. […] De ir nuevamente con nuestros electores, con el ciudadano que confió en nosotros, y con el que no confió también: sin distingos de colores. […] Y ahora con la conformación de una legislatura de mayor oposición, habrá grandes oportunidades de debatir e informar. La oposición no implica estar en contra de todo y a favor de nada; implica ser una oposición seria, respetuosa y propositiva; y en esos términos, hay una gran esperanza de que se dará lo mejor a los nayaritas”.

Efectivamente, el debate propositivo constituirá un elemento sustancial que abrirá la puerta a numerosas oportunidades de enriquecimiento comunicacional con la gente, porque supera con mucho el silencio de una simple concertacesión o el “mayoriteo” de la aprobación fácil y el “fast track” del mínimo esfuerzo -tanto criticados como vicios de un pasado unidireccional-;  la discusión exacerbada que nubla el diálogo, y la confronta estéril, sino más bien, comporta el sano e inteligente establecimiento de contrastes que demuestra, convence y persuade a la acción. Y por ahora, parece ser que ese será el eje rector de la operatividad correspondiente.

La política, la que reclama como nunca antes hoy, oficio y talante para entender las necesidades del pueblo, desentrañar sus orígenes y proponer conjuntamente soluciones desde el corto, para el mediano y largo plazo, confluye indefectiblemente con la práctica permanente de una correcta comunicación que suma, integra y recoge de continuo el sentir popular: de todos sus sectores sin exclusiones de ningún tipo, de inquietudes y demandas del ciudadano debidamente formado e informado que desea participar en la confección de las mejoras requeridas (como el proceso de juicio político que emprendió una persona los últimos meses de la anterior Legislatura, ante supuestas inconsistencias en la aprobación del marco legal de la Fiscalía General del Estado, y se hereda junto a otros pendientes de igual importancia); meta en la que los medios de comunicación, cada uno de sus profesionales posee un papel coyuntural, y en esa medida la correlación recíproca de esfuerzos lo hace posible. Por lo que seguramente también se habrán de enriquecer las líneas de acción en este campo, responsabilidad,  que cabe decir, asume la comunicadora Ariana Llamas en la Dirección de comunicación social, y a la cual se le desea éxito en su respectiva labor.

Es pues todo lo anterior, parte de la importancia de emprender un esfuerzo sobresaliente por adaptarse a una nueva realidad política y social, de hechos y beneficios tangibles que puedan comportar la base de un presente de soluciones eficaces y de un futuro mejor para todos. ¿Se logrará?

Al compañero periodista Ezequiel Parra Altamirano

De este espacio, aprovechamos la oportunidad para enviar nuestras sinceras condolencias al amigo y experimentado periodista Ezequiel Parra Altamirano, miembro destacado de la Unión de Columnistas y Articulistas de Nayarit (UCAN), así como al resto de su respetable familia, por el sensible fallecimiento de su señor padre, don Santiago Parra González, acaecido el pasado martes en su natal Ixtlán del Río, Nayarit, víctima de males propios de una longevidad que alcanzó los 91 años. Partió pletórico de vivencias, testimonios e historia neurálgica en el devenir del municipio sureño que, como tú mismo lo dijiste en alguna ocasión amigo Ezequiel: “Por ahora baste con decir que la libertad que arrancábamos a jirones del carácter firme de mi padre nos prohijó un sin fin de experiencias agridulces”.

Don Santiago se fue a dormir el sueño profundo de la muerte, a descansar, después de dejar su particular legado, mucho del cual seguramente ahora resguarda celosamente la mujer de su vida, esa mujer de mirada profunda, sonrisa constante y de silencio que inunda y comparte enseñanza: su esposa, la madre de sus 4 hijos, Celia, Ezequiel, Jesús y Santiago, hoy grandes personas, amigos y entregados luchadores de la existencia. Vaya pues, nuestro deseo de superación de este difícil trance, y recuerda amigo Ezequiel, que no todo está perdido (Revelación 21:3-5; Juan 5:28,29; Salmos 37:9-11). ¡Adelante entonces! Seguimos en la marcha, que para nosotros, aún falta mucho por hacer.