Saldo positivo para Nayarit
Francisco Cruz Angulo
19 de diciembre de 2013
Bien vale la pena hacer un recuento de los eventos más trascendentes ocurridos en el ámbito estatal durante el 2013.
Nayarit pese a la precariedad de los recursos financieros que dispone el Gobierno Estatal presidido por Roberto Sandoval logró despuntar en varios aspectos; a saber, en primer lugar en la consolidación como una de las entidades de la república más seguras para invertir en obra pública y privada.
En estos dos años de gobierno el capital extranjero invirtió millones de dólares en hotelería en la Riviera Nayarit, mismo que se ha constituido como uno de los principales destinos turísticos en el país. Como un reconocimiento a este polo de desarrollo turístico desde esta región el presidente Peña Nieto anunció su Plan Nacional en esta industria.
No podemos decir lo mismo en el desarrollo productivo en el sector agropecuario, pesquero y de industrialización en el resto del estado.
Tal vez en los próximos cuatro años podremos ver los resultados de lo que ahora es un ambicioso proyecto para el desarrollo agrícola en la zona norte del estado con la construcción del canal Centenario en el cual el Gobierno Federal prometió invertir 9 mil millones de pesos; 7 mil millones en el canal y 2 mil millones en el Agroparque.
Anunció en días pasados el titular de la CONAGUA que ya están elaborados los proyectos ejecutivos en donde se anuncia la construcción de los primeros 16 kilómetros de canal y derivadores que a mediano plazo irrigará las primeras 5 mil hectáreas de cultivo con una inversión de casi 2 mil millones de pesos. Esta obra se iniciará en el mes de marzo cuando SHCP libere los recursos.
Otras obras que impactaron en la sociedad nayarita son las grandes obras de infraestructura, unas ya concluidas otras en proceso de culminación. Destacan la construcción de la autopista Jala-Bahía de Banderas; Tepic-San Blas y Ruiz-Zacatecas; los 11 boulevares en varios municipios; la construcción de 2 mil casas-habitación, según el decir del titular del Iprovinay; de clínicas y hospitales; la rehabilitación de redes de aguas negras y pluviales; el nuevo rencarpetamiento de avenidas y calles principales en las cabeceras municipales; la construcción del magno Auditorio de la Gente en esta capital; y otras que se me escapan a la memoria.
Cabe destacar que gran parte de estas obras de infraestructura han sido posibles a la permanente gestoría del mandatario estatal ante el gobierno de Peña Nieto quien continúa apoyando la gestión de Roberto Sandoval.
En el aspecto social se han dado grandes pasos en el combate a la pobreza. Programas como “Rosa”, escuelas seguras, becas a estudiantes, apoyos a los adultos mayores; desayunos escolares; comedores populares en la sierra y en la ciudad; incentivos al deporte y la capacitación de la mujer en proyectos productivos ha sido el sello distintivo de ese gobierno.
Lo que no hay medición alguna es si todas estas obras y programas de gobierno ha beneficiado a un gran número de nayaritas y solo a determinados grupos sociales. Eso lo sabremos en las elecciones de julio del próximo año cuando se elija a los 20 presidentes municipales y diputados de la próxima legislatura.
En lo que corresponde al desempeño de la XXX Legislatura local que lidera el Dip. Armando García hay saldos positivos de su gestión. Durante su gobierno prevaleció el diálogo, la tolerancia y la construcción de acuerdos en el debate parlamentario. Como poder popular es factor de equilibrio ante los otros dos poderes del estado. Durante este año ha reformado y adecuado leyes que protegen los derechos humanos como la integridad física y moral de las mujeres, niños, niñas, los adultos mayores y a los minusválidos.
De igual manera fueron adecuados a nuestro marco constitucional las numerosas reformas constitucionales que promovió el presidente Peña Nieto y luego aprobadas por el Congreso de la Unión. Esta legislatura abrió más cauces legales para una mayor participación ciudadana en las acciones de gobierno.
En suma, la XXX Legislatura ha sido un importante factor de gobernabilidad.
Respecto al Poder Judicial del Estado conducido por el Magistrado Presidente Pedro Enríquez Soto su gestión ha sido dinámica y positiva de cara a los grandes cambios que se avecinan en la procuración y administración de la justicia. El titular del poder Judicial ha sido un diligente promotor en la capacitación de ministerios públicos, jueces, litigantes y estudiantes de Derecho para que se preparen al ejercicio del nuevo sistema penal acusatorio en el cual los juicios orales serán la columna vertebral en los procesos contra de quienes infrinjan la ley.
Ante tal perspectiva, en Nayarit ya se inició con los juicios orales en materia mercantil con gran éxito lo que obliga a que en el mediano plazo los juicios orales se apliquen en todos las ramas del Derecho.
En materia política poco hemos avanzado. Los partidos de oposición como el PAN y el PRD están desmovilizados, desfigurados y atrapados en una cómoda modorra de sus dirigentes que ven pasar los problemas de los nayaritas desde sus cómodas oficinas. No existe ningún contrapeso al PRI ni al Gobierno Estatal o en los municipios.
Los ciudadanos que se manifiestan en las calles son por demandas gremiales o de servicios públicos. Los partidos de oposición carecieron de una agenda programática para este año que concitaran a la unidad y con rumbo. La protesta de los ciudadanos fue denunciada fundamentalmente a través de las redes sociales y no en las calles o por los medios de comunicación escrita y electrónica. Este año, el saldo fue positivo para Nayarit.
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