El cheque en blanco de los Galván Ponce
Ulises Rodríguez
19 de Septiembre de 2024
No hay fecha que no se llegue ni plazo que no se cumpla y los Galván Ponce estuvieron en condiciones, desde ayer martes 17 de septiembre, de cobrar el reintegro de la lotería que los tepiqueños les obsequiaron el pasado 2 de junio. Podemos encontrar múltiples lecturas al triunfo del clan que, los últimos 3 años convirtió al gobierno municipal de Tepic en una especie de negocio familiar y todas serán válidas, seguramente. Sin embargo, hay que decir que los tepiqueños tenemos también una enorme responsabilidad en ese error que, desde ya, hemos comenzado a pagar. Seguramente era tepiqueña la gallina de aquel cuento en el que Stalin despluma con crueldad al animal, quien, pese a los cacareos de dolor, fue dócil al encuentro del dictador ruso apenas éste sacó de su bolsillo unos granos de maíz.
No tenían ni dos horas de haberse hecho nuevamente con la presidencia municipal de Tepic los Galván Ponce cuando ya hicieron de las suyas. Aprovechando la novatez de los nuevos regidores -y tal vez los pactos inconfesables con algunos de ellos-, pusieron a consideración de éstos un dictamen a través del cual sometían a su consideración la solicitud para autorizar al Ayuntamiento de Tepic, por medio de la tesorería municipal, para que pudieran contratar líneas de créditos simples o revolventes, supuestamente para solventar la falta de liquidez en el gobierno municipal. Para ello, el gobierno que sonríe compromete el 6% de sus ingresos por año. El dictamen representa un cheque en blanco, toda vez que, lo que aprobaron los irresponsables de los regidores el día de ayer, fue que los Galván Ponce no tengan ya la necesidad de someter a consideración del cabildo en lo que resta de toda la administración, una solicitud para contratar deuda pública. Si el 6% de los ingresos del ayuntamiento representa, de acuerdo con el paquete fiscal aprobado para el 2024 por la XXXIII legislatura, cuando menos unos 80 millones de pesos, ayer los regidores le dieron a la familia Galván Ponce un cheque en blanco por, al menos, 240 millones de pesos si sumamos los 3 años de su ejercicio constitucional.
Dicha aprobación es irregular. No sólo se sometió a consideración del cabildo en las primeras horas de ejercicio de los regidores, quienes no tenían elementos para conocer la situación financiera del ayuntamiento, sino que se hizo sin que este dictamen procediera de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública, facultada, de acuerdo con la ley municipal, para conocer de esta clase de temas. Esta comisión, aunque ya integrada, no ha tenido su sesión de instalación y mucho menos discutió el dictamen ya aprobado en el más sospechoso sigilo. El único regidor que se abstuvo, precisamente argumentando estas cuestiones, fue el emecista Luis Zamora. El resto, parecen no haber leído y si lo hicieron no lo entendieron o, quizá peor, no les importó. Como fuere, hoy los Galván Ponce tienen en sus manos un cuantioso recurso que les permitirá, sin problemas, financiar su proyecto con miras a ganar la gubernatura en 2027.
Vale la pena recordar que, hace apenas un año, el ayuntamiento dirigido por los Galván Ponce intentó hacer lo mismo. En aquella ocasión, la presión social ejercida por los ciudadanos y la intervención -por debajo de la mesa- del gobernador Navarro Quintero a través de Elizabeth López Blanco, quien ofreció a varios regidores cargos en el gabinete y candidaturas a diputados o a la reelección a cambio de que votaran contra la solicitud de préstamo que, se decía, tenía como propósito, distraer recurso público para financiar el proyecto de Claudia Sheinbaum en los días donde el gobernador hacía lo propio para Adán Augusto López. Se tardaron un año, pero los Galván Ponce se salieron con la suya. A los tepiqueños nos acaba de costar muy caro el haberles dado otra oportunidad para estar al frente del municipio.
ESCENA POSTCRÉDITOS: Mal empieza el regidor Juan Guerrero con esta votación. Él, igual que muchos otros integrantes del cabildo, ya ha sido regidor y no puede acusar desconocimiento. Luis Zamora y él son los únicos regidores de oposición y los tepiqueños no esperamos de ellos que ganen votaciones imposibles, pero al menos sí, que luchen con argumentos y con su voto contra los latrocinios a los que los Galván Ponce son tan afectos. Guerrero en esta ocasión no le hizo honor a su apellido y eso levanta sospechas, no podemos ser ingenuos.
Comentarios