La mafia del poder en Infonavit El Mirador

En nuestra unidad habitacional tiene vigencia un grupo organizado que trata de defender sus intereses sin demasiados escrúpulos. Los mueve, según ha trascendido, la intención de lograr un propósito político para beneficio personal.

Este clan es comandado por Marco Antonio Martínez, más conocido como Toño Martínez, quien actualmente es por MORENA regidor (octava demarcación) del Ayuntamiento de Tepic que preside Geraldine Ponce. Es él quien mueve piezas a su antojo y capricho.

La camarilla está integrada por Josua Díaz, Esperanza González Becerra, Simitrio Moscoso y Omar González Murillo, entre otros. Ellos son quienes en la práctica ejecutan ordenamientos del regidor morenista con aquella voluntad que raya en la sumisión. 

El 24 de diciembre pasado, al regidor Toño Martínez se le ocurrió que en bola fueran a ser declaraciones videograbadas por un supuesto periodista, que según ha trascendido, a él y su jefe, el morenista tiene bien maiceados. Fue Josua Díaz el encargado de denostar acciones de la presidencia del Comité de Acción Ciudadana (CAC) en perorata que rebasó los veinte minutos.

Reaccionaron de esa manera cuando supieron, la noche anterior del 24, sobre el interés de cobrar por entrada a la Unidad Deportiva de Infonavit El Mirador, mediante la entrega de un boleto a cada persona por aportación de 10 pesos. Se realizaría allí un torneo relámpago de futbol entre equipos de jugadores veteranos, evento tradicional de hace muchos años.

Se trató de controlar el ingreso -cosa que no se hacía desde cinco años atrás, pues el dinero iba al bolsillo de una persona- para darle un manejo honesto. El dinero recaudado sería entregado a la tesorera, para, cuando fuera necesario, aplicarlo en el mantenimiento del centro deportivo, propiedad de todos quienes habitamos la unidad en comento, cuando menos en el dicho.

En el momento en que todo estaba preparado, con acciones propias de mañosos, tanto Josua Díaz como Simitrio Moscoso y Omar González Murillo se pusieron de acuerdo con los jugadores de los equipos para suspender definitivamente los encuentros de futbol con antelación programados. El boicot surtió efectos, pues muchas personas exigieron la devolución del pago mediante la entrega del boleto correspondiente.

Vino entonces el torneo de futbol del 31 de diciembre, que según los entendidos, se realiza en el campo de Infonavit El Mirador cuando menos desde hace 41 años. Tienen participación una suma no menor ocho equipos, categoría libre, integrados estos con jugadores vecinos de la propiedad unidad habitacional, tema este último que ha degenerado al paso de los años.

Antes de la fecha, al regidor por MORENA, Toño Martínez, se le ocurrió la brillante idea de no cobrar por la entrada a la Unidad Deportiva, donde todo ese día los aficionados gozan del espectáculo de su deporte favorito. A cambio hizo la promesa de hacer entrega de cinco mil pesos en efectivo, lo cual realizó en acto público en el propio campo de futbol frente a decenas de asistentes.

El regidor morenista se sintió complacido, pues él cree que este acto tendrá necesariamente resonancia política a su favor. Pero su intromisión, avalada por subordinados en el CAC, impidió que se recaudara buena cantidad de dinero por el pago por entrada, que por este y otros rubros, con facilidad triplicaría la suma donada. Su finalidad fue boicotear. Lo concedido por el regidor morenista es considerada una bicoca, puesto que la cantidad ni siquiera alcanza para comprar fertilizantes, elementos tan necesarios para la conservación en bues estado del pasto de la cancha de futbol.

El empeño de intromisión en acciones que corresponden solo a la directiva del CAC continuará por parte del regidor de marras, claro está que ello será al través de sumisos que integran la mafia del poder en Infonavit El Mirador. No descansarán hasta ver culminado su objetivo político.

Muy difícil a estas alturas del partido es suspender la versión de los vecinos que corre de boca a oído: el regidor prometió a Josua Díaz hacerlo regidor del Ayuntamiento de Tepic, mientras que Toño Martínez tiene el interés de ser el próximo diputado local por este distrito electoral.

Es loable la aspiración política del expriista, pero lo condenable del regidor ahora por MORENA, Toño Martínez, es que atropelle la dignidad de las personas por tal de lograr su objetivo y de alguno de sus incondicionales. Pareciera que la máxima presidencial: no robar, no mentir y no traicionar, ellos se la pasan por el arco del triunfo. No hay moral.