Oscar González Bonilla
08 de Junio de 2022
-SEGUNDA Y ÚLTIMA PARTE-
Ya encarrerado para dar puntual cita al articulado de la Ley de Derechos y Justicia Laboral para los Trabajadores del Estado, Benjamín Sandoval Cedano, abogado especialista en la rama laboral, indica el caso de las cuestiones del salario.
“Cuando surja un despido del trabajador o jubilación la indemnización, que incluye el otorgamiento de alguna prestación, la ley señala que se tomará para el efecto el salario base, lo cual niega al salario integrado que abarca la acumulación de bonos, como el de puntualidad, entre otros.
“La Ley Navarro” expresa de manera tácita que el salario podrá ser disminuido. Argumenta que el salario no podrá ser disminuido durante el ejercicio fiscal (1 de enero al 31 de diciembre), pero de ninguna manera está prohibido que el salario del año siguiente sea reducido. Se asienta en la ley que en el año fiscal no será disminuido, salvo que se presenten cuestiones extraordinarias que te obliguen a la reducción.
“El secretario general de gobierno, Juan Antonio Echeagaray Becerra, ha dicho que nadie está obligado a lo imposible. Y para reducir el salario nomás van a decir que no hay presupuesto. Pero además esta ley, como no ha habido una antes, señala que lo único que el trabajador tiene garantizado es que no te deben pagar menos del salario mínimo. ¡Ah, mira que gran garantía! El pagarte menos del salario mínimo implica un delito. Y eso no perjudica a los trabajadores, entonces qué perjudica.
“Otra cuestión. Dice la oficialidad que esta ley va dirigida contra los líderes sindicales, porque ellos conforman una mafia y se apoderan de las plazas. Allí hay un reconocimiento tácito de la derrota de su plan de gobierno, en el sentido de despertar al gigante y generar empleos.
“En la exposición de motivos, cuando el análisis de reforma al artículo 101 de la Ley Laboral Burocrática (promovida por el gobernador Antonio Echevarría García), dijeron: el único que genera empleos es el gobierno, y esas fuentes de empleo las tienen acaparadas los sindicatos. Ello no lo podemos seguir permitiendo, no al acaparamiento, se deben abrir a la sociedad. Y nosotros decimos: esa no es más de una campaña de querer enfrentar a la sociedad con los sindicatos. Ahora si la finalidad era eso, ¿para qué hacer una nueva ley? Tan simple decir que las plazas de nueva creación serán concedidas a través de concurso abierto. Aquí de tajo se desconoce conquista sindical de los trabajadores, como lo es el derecho del sindicato a proponer al trabajador para cubrir una plaza. Propone no pone. Porque el trabajador propuesto debe tener perfil profesional, de lo contrario el patrón no tiene por qué aceptarlo.
“Vayamos ahora a la más reciente declaración del gobernador Navarro Quintero: “Qué me cuentan a mí que se su historia”. Con ello les dice corruptos a los dirigentes y que por ello está molestos. Está bien. Si hay un dirigente sindical corrupto, si los sindicatos están desviando cuotas, pues que hagan auditorías, vivimos en un Estado de derecho. Si el gobernador tiene facultades para hacer autorías a los sindicatos, que las haga, pero no con la bandera de que va encontrar dirigentes corruptos se joda a los trabajadores. Qué tiene que ver un dirigente corrupto con bajar el salario, qué tiene que ver un dirigente corrupto con las cuestiones de no respetar la bilateralidad de la relación laboral ¿Qué quiere decir bilateralidad? De que un sindicato tiene el derecho de sentarse a la mesa con el patrón y negociar las condiciones generales de trabajo para mejorar éstas. Pero aquí las están desconociendo, en franca violación a la Constitución y convenio internacionales.