Pepe Espinoza, ahora millonario
Oscar González Bonilla
02 de Enero de 2017
Pepe Espinoza renunció a la titularidad de la Secretaría General de Gobierno del gobierno de Nayarit con la argumentación de restablecer salud perdida y dedicar atención al proceso de su divorcio.
Aunque el 15 de agosto, día de la transmisión de poderes, con el gobernador Roberto Sandoval de por medio, a Pepe Espinoza en la expresión de su rostro se notó suma inconformidad como que la renuncia no tuvo su origen en las causas antedichas, más se endureció cuando el mandatario estatal tomó protesta al abogado Jorge Armando Gómez Arias, quien lo sustituyó en el cargo.
Las conjeturas nos conducen a señalar que Pepe Espinoza algún pecado político o de cualesquier otra naturaleza cometió para que el testarudo de Roberto Sandoval obligara la renuncia, pues el muy sobado argumento “por problemas de salud” ya no convence a nadie.
De por sí, Pepe Espinoza como responsable de la Secretaría General de Gobierno durante casi cinco años que fungió como tal, nunca tuvo capacidad de decisión, pues el gobernador Roberto Sandoval centralizó el mando. Es razón por la que manifestantes de las diferentes ideologías partidarias, grupos sociales diversos, organizaciones campesinas, trabajadores al servicio del gobierno estatal, burócratas y muchos otros, que con él tuvieron contacto, de boca a oído corrieron la versión de que el funcionario nada resolvía. Se le perdió la confianza y ganó el popular apodo de “Pepe Atoles”, por aquello de que les daba atole con el dedo.
Pero lo que me dejó impresionado es la versión del abogado Jorge Vargas López hecha pública a través de redes sociales hoy en boga, sobre bienes materiales y dinero que entregó el ex funcionario del gobierno de la gente como finiquito del juicio de divorcio. El también director de la revista Tribuna (hoy columna virtual) sostiene que José Trinidad Espinoza Vargas, en la actualidad doctorado y notario público por obra y gracia del gobernador Roberto Sandoval, “después de meses de estira y afloja entregó a su ex esposa una casa en Tepic, una casa en Guadalajara, la empresa Consensos (periódico editado en la capital nayarita) con maquinaria y edificio”.
Pero eso no es todo, al parecer por propia voluntad, sin que el juez lo presionara, Pepe Espinoza también cedió “una suburban del año, un automóvil Jetta del año, un millón ciento ochenta y cinco pesos en efectivo y aportará una pensión mensual de veinticinco mil pesos”. ¿Pero de dónde sacó tantos bienes materiales y dinero? el mismísimo Jorge Vargas López da la respuesta: (En esta columna no tratamos temas particulares de nadie, este comentario solamente es para que ustedes formen su criterio) “de la fortuna que acumuló el hermano Pepe Espinoza bajo la sombra de su patrón el del sombrero Roberto Sandoval”.
Para que ustedes formen su criterio, como escribió Vargas, don Pepe Espinoza fue un funcionario del gobierno de la gente que manejó, al parecer como fondo revolvente, cien mil pesos en efectivo para satisfacer necesidades menores, para sus chicles, o más bien para echarse unos tacos o cualquier aperitivo en la calle, a lo que era muy afecto para la foto. Y se hizo público lo del dinero cuando a su chofer se lo robaron al dejarlo en una mariconera en el asiento de atrás del vehículo, en el momento que despreocupado éste para desayunar se metió un domingo a una fonda chiquita que parecía restaurante por el rumbo de El Tecolote en Tepic. Un joven con fama pública de drogadicto fue el autor del robo, no faltó quien diera el pitazo y el asunto lo resolviera la gente del Fiscal Veytia en un dos por tres.
Quienes de cerca han convivido desde hace tiempo con “mi brody” sostienen recibió una buena suma de dinero cuando su separación del Instituto Mexicanos del Seguro Social (IMSS), dependencia federal en la que, entre otros cargos, ocupó la titularidad de la delegación en Nayarit. Durante el gobierno de Antonio Echevarría Domínguez (1999-2005) dicen que “mi brody” invirtió en la compra de equipo y renta de espacio en la Plaza San Rafael de Ciudad del Valle (Casa Gallo) para desde allí hacer la transmisión televisiva (XHKG) del programa noticioso y de crítica “Consensos” en mancuerna con Enrique Hernández Quintero. Al aire permaneció corto tiempo. También el 31 de enero de 2003 se suspendió la emisión de “Consensos” por radio Korita (XERK). Según Jorge Mondragón Santoyo, gerente general de la radiodifusora, fue orden del gobierno estatal como condición para renovar el acuerdo anual de publicidad (con los empresarios de los medios electrónicos). En estos enlaces de radio y TV, Pepe Espinoza debió gastar miles de pesos.
La real sorpresa es la fortuna que debió entregar a la que fuera su esposa, pero de dónde salió tanto dinero y bienes materiales, puesto que siempre conocimos a don José Trinidad Espinoza Vargas desarrollar un modesto tren de vida, empeñoso cual más por ganarse con el sudor de su frente el pan de cada día. De su puño y letra, estos son los oficios y profesiones que ha desempeñado: “Yo he sido bolero, mesero, cantinero, lavacoches, vendedor de mangos, dulce de leche y empanadas casa por casa, trabajé en el campo, ayudante de albañil, músico, cocinero, comunicador, abogado, servidor público, y entre todas estas experiencias aprendí a ser amigo”. En ocasiones de campaña política llegamos hasta su lugar de oriundez: Santa Cruz de Camotlán, municipio de Ahuacatlán, donde con amable recibimiento de su señor padre comprobamos sencillez, sin pizca de lujos, la estancia de origen. De dónde pues ahora millonario.
Aparte del enorme caudal entregado, a don Pepe Espinoza debió quedarle en propiedad bastante dinero más como para darse el lujo actual de viajar por países de América, entre ellos Colombia y Paraguay, de ello hace ostentación al publicar fotografías en facebook. Hay quienes sostienen que si suman el salario de Pepe devengado durante cuatro años y once meses como funcionario del gobierno de la gente, no corresponderá a la fortuna que ha amasado. Entonces, la suspicacia nos lleva a reflexionar lo que puntual señala el abogado Jorge Vargas: la hizo a la sombra de su patrón el gobernador Roberto Sandoval. Y esto último nos hace pensar que ha sido galopante la corrupción en el gobierno de Nayarit.
Según publicación nacional, la dirigencia del PAN, representada por Ricardo Anaya, le puso marcación personal al gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, y obtuvo información de uno y mil escándalos que planea usarlos cuando más daño hagan, seguro durante el transcurso del proceso electoral en puerta donde se disputará la gubernatura del Estado. Ojalá no sea Pepe Espinoza uno de los involucrados en los escándalos de corrupción a destapar. En lo personal, muy aparte de las posibles denuncias del PAN, creo que una vez Roberto Sandoval fuera del poder se harán del conocimiento público corruptelas de funcionarios del gobierno de la gente y atrocidades del gobernante, aunque éste haya blindado todos los flancos para evitar castigo penal.
Veremos y diremos, decía don Alberto Casillas Larios.
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