¿Qué periodista sigue?
Oscar González Bonilla
05 de enero de 2015
Lastima lo más profundo del ser enterarse de la manera vil, cobarde y despiadada en que fue ultimada la pareja matrimonial de Jazmín Martínez Sánchez y Alejandro Ramírez Topete, jóvenes bastante estimados en la sociedad tepicense muy al margen de que ella se hubiera desempeñado como reportera de Televisa Tepic.
Según informaciones, fueron secuestrados por malvivientes cuando la noche del 31 de diciembre el vehículo en que se transportaban rumbo a Guadalajara con el interés de pasar la velada de año nuevo con la madre de ella, tuvo una falla mecánica que obligó suspender la marcha en la autopista cerca del crucero de Jala.
Los tipos, que seguramente recorren la autopista con toda impunidad en busca de víctimas, los apresaron con suma facilidad porque eran personas de bien. Se los llevaron con rumbo a la Meseta de Juanacatlán, conocida así la zona de la montaña del municipio de Jala donde se asientan por lo menos cinco comunidades. Desde allí, según se sabe, exigieron vía telefónica a sus familiares dos millones de pesos por el rescate.
Quién que vive al día sin la posibilidad de ahorro tiene en su poder o cuenta bancaria tan exorbitante cantidad. Creo que nadie. Se dificultó el pago de la recompensa, por ello los delincuentes optaron por darles muerte sin misericordia alguna y con la bestialidad propia de seres irracionales, con el infame argumento de que serían reconocidos porque actuaron descubierto el rostro. Nada hubiera pasado, estoy seguro, si los dejan ir con vida.
Con base en la información, se supo que otros restos humanos fueron hallados a corta distancia del sitio donde se encontraron (por la mencionada carretera, pero cerca de Ixtlán del Río) los cuerpos de la pareja, lo que indica que los malhechores tenían, si se me permite la expresión, cementerio particular, pero además operaban, como alguien bien lo dijo, de tal manera como si la autopista fuera a ellos concesionada por la Fiscalía General del Estado de Nayarit.
El lamentable acontecimiento, aún en días de guardar, ha sacudido la conciencia de los nayaritas porque a fuerza de repetir hasta el cansancio sabíamos que Nayarit es de las entidades del país con más eficiente seguridad pública, pero con base en los hechos hoy la idea que permea en la cabeza de todos es que la oficialidad miente. La delincuencia común hace de las suyas en el lugar y hora que le pega la gana, pues las autoridades policíacas fijan su atención al combate de narcotraficantes, de la delincuencia organizada que violenta y que mata.
Ahora la vanagloria del fiscal estatal, Edgar Veytia, él mismo la pontifica después de dar a conocer en conferencia de prensa la detención de dos de las cinco bestias que participaron en el infame asesinato. Hizo resaltar el funcionario favorito del gobernador de la gente, Roberto Sandoval, la prontitud y precisión de las policías a su mando para lograr la captura y medio resolver el asunto. Pero finalmente no se trata de eso, sino de evitar con medidas de prevención policial sucesos que enardecen a la sociedad nayarita ¿Entonces para que sirve el mando único que tanto se afana en poseer el gobierno de la gente frente a los 20 municipios de la entidad? Ya se vio, no es la panacea.
Si esta eventualidad en verdad indigna al Estado, como lo declaró el Fiscal Veytia, el gobernador Roberto Sandoval deberá hacer ajustes en el cuerpo de seguridad estatal con el que se reúne cada mes para diseñar estrategias y en el que participan comandantes del ejército y la marina, entre otros, a cual más desacreditados, para descargar el peso de la responsabilidad en el fiscal que como se observa le gana la delincuencia.
Y deberá ser así, puesto que esta vez una reportera fue víctima fatal de la delincuencia común, al rato cualesquiera quienes nos dedicamos al libre ejercicio del periodismo seremos en Nayarit presa fácil de los que quieran acallar voces por medio de la violencia organizada y no organizada. Y como la perrada sabe responder y ser solidaria cuando se trata de la agresión a un compañero del gremio venga esta de donde venga, podría generarse al gobernador de la gente un escándalo nacional con severas consecuencias.
Comentarios