Oscar González Bonilla
06 de diciembre de 2014
Transcurrían ocho meses del primer año de gobierno, cuando cándido Roberto Sandoval abrió las puertas de su rancho El Sueño en Aután, municipio de San Blas, a las cámaras de programas noticiosos tanto locales como nacionales.
Orgulloso mostró cada uno de los rincones del vergel bajo la mirada complaciente y llena de embeleso de su esposa Lili López de Sandoval, con un aire de exceso de vanidad al ver hasta dónde ha llegado aquel hombre que por pasadas carencias económicas tuvo que ir de ilegal a los Estados Unidos a barrer yardas (jardines) hasta brotar ampollas en las manos.
Pero qué paradoja, mientras las cámaras registraban imágenes de enormes extensiones de verdes pastizales en ese momento regados por aspersión, el gobernador de Nayarit manifestaba a los reporteros su decisión de erradicar la pobreza entre habitantes de nuestra entidad, mientras que millonaria debe ser la inversión para la adquisición de 17 hectáreas (hay quienes aseguran que son 27) que componen el rancho El Sueño, mismo que Roberto declaró que su familia y él poco a poco han adquirido esa tierra desde hace cinco años.
Hizo una alegoría al señalar que Nayarit lo recibió, apuntando hacia allá, tras de una cerca de madera, un terreno con lomerío, pedregoso y enmontado; pero queremos transformarlo así, ahora dirigiendo la mirada hacia su propiedad con abundancia en pasto en terreno nivelado y con riego. El campesino nuestro debe tener amor a la tierra, hacerla producir, argumentando con severidad que sí se puede.
El gobernante montó en pelo un caballo pinto (como de los indios, dicen en mi rancho La Labor en referencia a las películas gringas de vaqueros) para recorrer a galope lugares de la millonaria granja ganadera. En ese ínterin, se visualizó la imagen de una finca de dos pisos de moderna construcción, en nada se parece a la casa construida por Infonavit en un espacio de terreno de siete por veintidós metros, donde vive este humilde reportero. No, aquello es un palacete rural. Del interior no dieron cuenta las cámaras, pero no es de dudar que el menaje sea de alto costo.
Luego, también gustoso, mostró una manada de potrillos. Uno de mayor edad, azabache, dijo que es hijo de El Dandy, aquel caballo de estima que tanto amó el gobernador Sandoval, pero que atacado seguramente por un cólico, como es común suceda a los equinos, de la noche a la mañana apareció muerto. Al Dandy II (no dijo cómo lo nombra) lo entregará con toda seguridad al arrendador para que lo haga a la rienda, pues debe tener a su disposición no sólo éste sino demás servidumbre para la esmerada atención de la gran cantidad de ganado caballar y bovino, entre otros.
El gobernador de Nayarit dio a saber que en su rancho se producen crías de caballos de las razas Azteca y Español, y que en ese propósito se encuentra asociado con el cantante nayarita, de San José del Valle, municipio de Bahía de Banderas, Ezequiel “Cheque” Peña, quien en sus presentaciones artísticas en lienzo charro o plaza de toros hace espectáculo ecuestre; Roberto Sandoval también tiene sociedad con el compositor y cantante Joan Sebastian, quien asimismo en presentaciones utiliza caballos pura sangre.
Pero aquí es donde la puerca torció el rabo. Joan Sebastian tiene estrecha relación con el narcotráfico, según versiones de la ameritada periodista Sanjuana Martínez. Del otro, “Cheque” Peña, nada se le ha sabido sobre complicidades ilícitas.
En reciente artículo, Sanjuana Martínez afirma que “el cantante tiene un pasado y una familia controvertida que en distintas ocasiones ha sido investigada por su presunta participación en redes delincuenciales”.
“Conocido mejor como El Rey del jaripeo, su historial está lleno de sucesos controvertidos en ese sentido. Por ejemplo el 27 de mayo de 2012 balacearon su automóvil estacionado afuera del bar en donde asesinaron a su hijo Juan Sebastian en 2010, ubicado en Cuernavaca, Morelos. Fueron tres impactos de bala en el cofre, pero las autoridades ocultaron toda la información y entregaron el vehículo a Marco Figueroa, el hermano incómodo de Joan Sebastian.
"Sin embargo, en aquella ocasión se informó que el joven de 32 años (Juan Sebastian Figueroa) fue asesinado en una riña con el personal de seguridad de un centro nocturno en la colonia Teopanzolco, en Cuernavaca, aunque después los testimonios señalaban a una persona que lo esperaba a la entrada del antro, en donde le disparó a quemarropa el sábado 12 de junio.
“Ese hecho le dio solidez a la sospecha que desde hacía años pesaba sobre Joan Sebastian, quien en 2004, fue involucrado directamente en actividades de narcotráfico de drogas. Un ex policía denunció su presunta relación con Vicente Carrillo Leyva, hijo de Amado Carrillo Fuentes “El señor de los cielos•, líder del Cártel de Juárez. El testimonio señalaba al cantante por almacenar droga en sus propiedades. El cantante lo negó y la PGR no lo molestó.
“No fue la única vez que Joan Sebastian era relacionado con el narcotráfico.Cuatro años antes, después del asesinato de su hijo Trigo de Jesús Figueroa, en la madrugada del domingo del 27 de agosto de 2006 en Texas, surgieron otras hipótesis.
“A pesar de todo, Joan Sebastian es un hombre poderoso y la PGR no lo molesta. Los crímenes de sus hijos nunca se resolvieron cabalmente, tampoco el atentado que sufrió cuando balacearon su coche. Las autoridades mexicanas no lo molestan. Ni siquiera ahora, cuando después de la tragedia de Ayotzinapa, surge nuevamente la mención a los Figueroa y en concreto, el nombre de su otro hermano “incómodo”, Federico Brito Figueroa”. Hasta aquí la destacada reportera de Proceso, revista nacional.
Este es parte del historial del socio del gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, quien a diferencia de cinco mandatarios estatales del país, no ha hecho pública su declaración de bienes.
Y luego con desparpajo sale a declarar Pepe Espinoza, flamante secretario general del gobierno de Nayarit: “Lo mejor es la transparencia”, para referirse a asuntos relacionados con diputados locales de oposición que obraron en contra de la iniciativa del presupuesto del gobierno de Nayarit para 2015. Causa risa porque evidencia que es opinión de los dientes para afuera.