Un dictador a modo de algunos periodistas

Bueno, pues no cabe duda de que los adversarios del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se aprovechan de cualquier circunstancia, dicho o hecho del primer mandatario para llevar agua a su molino; un claro ejemplo reciente es el argüende que se armó con la salida de Milenio Televisión de la lectora de noticias, Azucena Uresti, salida que de inmediato los adversarios, así como periodistas no afines a AMLO, le atribuyeron este hecho.

Pero como ha dicho constantemente el mismo AMLO en sus conferencias matutinas: “esto para los jóvenes”, ya que hoy en día por más que se aclaren las cosas de todos modos hay quien se crea a pie juntillas esos ataquen contra el presidente, de que sí es cierto todo lo que se dice de él, como ahora en este caso de la conductora de televisión que por cierto, no ha aclarado del todo su dicho de “por las actuales circunstancias” dejando en el aire cierta duda entre los malquerientes del presidente de la República, así que por lo mismo, gran parte de las nuevas generaciones y ya no tan nuevas, pero que crecieron dentro de un sistema que más bien se dedicó al engaño y que dan por hecho lo que leen, les dicen o lo que oyen.

Si estos jóvenes que se creen todo lo malo que le achacan al presidente hubiesen vivido en la época de esplendor del PRI, se darían cuenta de que todo lo que se diga de AMLO es un vil engaño y que se desengañarían claramente leyendo la historia reciente del país, sobre todo de los acontecimientos del 2 de octubre (no se olvida) y del 10 de junio de 1971; así como también de las represiones de las huelgas de médicos y enfermeras, de los ferrocarrileros, de los profesores, de la clase trabajadora en sí, para que se dieran cuenta de lo que era en realidad una dictadura disfrazada de democracia.

Hoy en día los detractores de AMLO, así como a los que no les cae nada bien lo que ha hecho y dicho, no lo bajan de dictador, palabra que llega a hacer mella precisamente entre las nuevas generaciones que posiblemente ninguna idea de lo que han sido y son los dictadores en realidad; pero para no ir tan lejos, aquí mismo en nuestro país se han dado hechos prácticamente dictatoriales como los sucedidos en la llamada guerra sucia que se dio en los años 60, 70 y aún parte de los 80 del siglo pasado, cuando infinidad de jóvenes fueron desaparecidos, encarcelados y torturados por ser disidentes del régimen dictatorial en que se había convertido a nuestro país; pero también la desaparición de estudiantes, campesinos y obreros; he ahí la truculenta historia de Miguel Nazar Haro, de quien se llegó a decir que ha sido el mayor represor y torturador en nuestro país.

Pero volviendo a Azucena Uresti, muchos de los periodistas se han rasgado las vestiduras echándole la culpa a AMLO de su salida de Milenio Televisión; sin embargo, estos mismo que hoy despotrican contra AMLO nunca dijeron una palabra cuando se corrió de su programa de radio a José Gutiérrez Vivó, y jamás protestaron cuando le ocurrió lo mismo a Carmen Aristegui y a otros tantos periodistas de los que algunos tuvieron que pedir asilo en otros países por sentirse perseguidos. Pero tal y como señalan otros periodistas: de los periodistas que han cambiado de rumbo o que han sido despedidor de sus centros de trabajo o de los que se dice que corrieron por culpa de AMLO, ninguna prueba se ha mostrado y demostrado de que hayan sido despidos por órdenes del presidente AMLO.

El mismo Carlos Loret de Mola, de quien se dijo en un principio de que su salida de Televisa era por decisión del tabasqueño, jamás ha probar de que esto fuera cierto; sin embargo, ahora sale en defensa de la señora Uresti y echándole la culpa al presidente AMLO de ser el artífice de su salida de Milenio Televisión.

Y a propósito de AMLO y algunos periodistas. El presidente del país en sus mañaneras de ha referido constantemente a un dicho que se le atribuye al hermano de don Francisco I. Madero, Gustavo Adolfo al decirle a los periodistas de entonces que no dejaban de atacar a su hermano, el presidente, diciéndoles: “muerden la mano que les quitó el bozal”; algo parecido o similar a lo que ocurre hoy en día, pues AMLO no ha reprimido a ningún periodista ni siquiera a quienes le han echado la viga o lo han llamado pendejo como Héctor Aguilar Camín o el mismo Víctor Trujillo en su papel de Brozo. Así que si como dicen algunos analistas y hasta el mismo AMLO: si fuera dictador muchos de estos periodistas estarían en el bote, desaparecidos o exiliados.

Sea pues. Vale.