Vuelven las esperanzas a varios gremios sindicales

Una noticia que en cierta forma ha despertado esperanzas de justicia en diversos gremios sindicales, es la renuncia como trabajador activo de Petróleos Mexicanos (PEMEX), de Carlos Romero Deschamps, quien había sido dirigente del sindicato petrolero, renunciado a ese cargo el año pasado de 2020.

Sin embargo, a pesar de que se informó a nivel nacional que Romero Deschamps ya no era dirigente sindical, aun así, se documentó que seguía teniendo voz de mando dentro del mismo sindicato petrolero, que seguía siendo amo y señor de horca y cuchillo, tanto en el sindicato como en la empresa de PEMEX.

En una conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), un reportero le dijo al presidente que el señor Carlos Romero Deschamps seguía siendo trabajador activo en PEMEX y, que según se decía, seguía teniendo mando dentro de la empresa y el sindicato, y que si bien ahora estaba con un bajo perfil, era porque estaba de vacaciones y que volvería a sus actividades habituales después del año 2024; que esas vacaciones las tenía bien merecidas, porque a lo largo de 26 años que había permanecido como dirigente sindical, jamás había tomado los días de asueto que por ley le correspondían.

Esto, claro que llamó la atención de AMLO, por lo que algo tuvo que hacer, y tal vez lo hizo, porque el pasado martes 16 de marzo, el mismo presidente anunció en su mañanera, que ese mismo día Carlos Romero Deschamps, presentaría su renuncia como trabajador activo de PEMEX, y respecto a las acusaciones que existen en su contra, pues eso era ya cuestión de la fiscalía y los trabajadores que habían presentado esas demandas laborales.

Pero no nada más Carlos Romero Deschamps cuenta con demandas laborales, ya que se ha documentado que el señor tiene demandas civiles y penales por asociación delictuosa y desde luego, enriquecimiento inexplicable.

Aunque eso de inexplicable desde luego que es muy sabido, así se diga y se rumoree entre la opinión pública y pueblo en general, que sí es posible y explicable la fortuna que ha ostentado el mismo Romero Deschamps, así como sus hijas e hijos, presumiendo todos autos de lujo muy costosos, así como yates y viajes en avión particular a diferentes puntos del planeta que ni en sueños el más común de los mortales se imaginaría hacer alguna vez.

Este señor Romero Deschamps, sí que podría considerarse como uno de los parásitos nacionales que ha sabido mamar bien y bonito del presupuesto, pues no nada más ha fungido como dirigente de uno de los sindicatos más fuertes y poderosos no nada más de México, sino de América Latina, sino también ha sido diputado y senador por el otrora partido aplanadora, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), por lo que se cuestiona eso de que quien a dos amos sirve, con alguno queda mal; y obviamente que con quien quedó mal fue con la clase trabajadora afiliada al sindicato petrolero que dirigió amparado, cobijado, tolerado y en la más completa impunidad bajo la tutela de cinco Presidentes de la República; aunque dos de estos hayan sido del Partido Acción Nacional (PAN).

Y si bien, se ha documentado que Romero Deschamps tenía un salario asignado de poco más de 27 mil pesos, ahora resulta que saldrá pensionado o jubilado de PEMEX con más de 100 mil pesos mensuales, pagos de gas, gasolina, canasta básica, gastos médicos y funerarios, etcétera.

Desde luego que la mayoría de Juan Pueblo, y sobre todo infinidad de trabajadores petroleros no piden venganza, sino justicia, por lo que se considera totalmente absurdo e injusto, que Carlos Romero Deschamps, más bien reciba un premio y no un castigo inmediato por todas las atrocidades permitidas por él como dirigente sindical. Porque de haber sido un verdadero dirigente, no hubiese permitido tantos despidos de trabajadores de planta, para que PEMEX fuera engrosando su planta laboral de empleados de confianza y, desde luego, jamás hubiera permitido la reforma energética que favorecía más a la Iniciativa Privada, antes que a la Nación.

Y si bien, esta noticia ha despertado ciertas esperanzas en otros gremios sindicales, así ha sido con el Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM), pues cada día se acrecienta más y más la lucha en contra del actual dirigente sindical Víctor Félix Flores Morales, quien al igual que Romero Deschamps, fue una creación del PRI que, igual que el petrolero, el ferrocarrilero también traicionó en fea forma a los trabajadores ferroviarios dejándolos en la calle.

Sea pues. Vale.