Marco Vinicio Jaime
22 de Febrero de 2021
El mundo cambió, y nada es ni volverá a ser igual, después de la consabida devastación sanitaria y económica que trajo la pandemia de Covid-19, y por lo cual, adaptarse al abrupto trastoque, conlleva una gran responsabilidad unificada que no admite más demora de gobiernos, instituciones, empresarios, sectores productivos, trabajadores y sociedad en general; más aún ante la aparición de la vacuna, que sólo surtirá verdadero efecto en una especial organización de parte de todos, por todos y para todos.
El "Gran confinamiento" del 2020, la medida emergente que adoptaron las diferentes naciones del orbe, incluído México, de estricta reclusión domiciliaria y detención de la actividad productiva para intentar poner control al virus, no fue sino tan solo el principio de una terrible caída de la economía junto al cruento desempleo derivado, que tomó sin duda por sorpresa a poderes y órdenes de gobierno, para el caso del propio México, y en el trance, justo es decirlo, no hubo tiempo ni la capacidad de dejar atrás sus tradicionales métodos de desempeño, caracterizados más por el individualismo, la confronta ideológica y de hegemonías político-electorales, a fin de estructurar un solo bloque que mitigara la hecatombe con el menor número de daños posible a la vida, la salud y la propia subsistencia del pueblo, y aún ahora, las dificultades continúan, para consumar un gran acuerdo garante de avances en una sola dirección.
Hoy, se torna por lo tanto, imprescindible la conjunción de esfuerzos bajo una línea transversal que permita tener el pulso inmediato de la evolución del mal y sus impactos reales en cada uno de los sectores sociales, teniendo como punto de referencia la salud y la vida, al igual que en un elemental equilibrio la rehabilitación del flujo económico mismo. Es decir, ¿hasta qué punto se logrará una coyuntural sincronía entre el semáforo de la vida, del Gobierno, de los aspirantes a los diferentes espacios de representación popular y de gobernanza, y de los protagonistas de la actividad productiva: empresarios y trabajadores?
Con la premisa antedicha, la Unión de Columnistas y Articulistas de Nayarit (UCAN), que coordina la periodista Lily Cayeros, y la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), que dirige Alejandro Valdés Menchaca en la Entidad, llevaron a cabo este viernes 19 de febrero, bajo la atinada moderación de la comunicadora Concepción Rodríguez, el conversatorio virtual: "Escenarios y estrategias para la reactivación económica", en el que se tuvo la participación especial de la Cámara Nacional de la Industria y la Transformación (CANACINTRA), a través de su titular en el Estado, Brenda Vega Peña, de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC), vía su Presidente local Alfonso Aguilar Barr, y de la Asociación de Hoteles y Moteles de Tepic, también por medio de su titular, Juan Enrique del Real Tostado.
Para el Presidente de Coparmex, Valdés Menchaca, quedó claro que ya no hay marcha atrás: no hay más opción que continuar adelante y adaptarse al ‘nuevo mundo’ que trajo el virus SARS CoV-2, donde no cabe acción alguna en solitario, puesto que la reversión primero, de los daños acaecidos a la salud y la vida, requieren de responsabilidad mancomunada sociedad y Gobierno, y después, resulta obvio la necesidad de una reinvención económica, donde empresarios y trabajadores deben adquirir sin duda una nueva cultura de producción y consumo, privilegiando la solidaridad en costo y vías de distribución con auxilio estratégico de la tecnología.
“Debemos -enfatizó el representante de COPARMEX-, como parte de una nueva manera de comercializar, dar atención al servicio a domicilio. Es necesario adaptar todo un sistema de servicios para sostener fuentes de empleo. Tenemos que convencer a la gente de reinventarse; no podemos manejar el comercio como hace cuatro años. El mundo cambió, de que hay cosas buenas, las hay, pero es preciso buscarlas de diferente manera y propiciarlas en equipo, solo así serán posibles. En los últimos meses ahora sí hemos estamos entendiendo a cabalidad la importancia del concepto de la unidad. En tanto, es de reconocer, que ante la necesidad también el Gobierno en el Estado nos ha escuchado más, ha entendido lo que estamos pidiendo, y estamos participando en la ‘mesa de Covid-19’. Solo falta que el Gobierno Federal también lo entienda, y aprenda a vernos como aliados. Con unidad empresarial, se saldrá adelante. Porque es un hecho que nadie vamos a salir de este problema solos, ni el Gobierno ni nadie: necesitamos consumo local, con estrategias coordinadas, es la única manera en que podremos mantenernos, salvar y mantener la economía”.
Mientras tanto, la Presidenta de CANACINTRA, Brenda Vega Peña -la primera mujer en llegar a tal responsabilidad dentro del organismo-, coincidió en que la situación es difícil por cuanto sus desafíos son a su vez inéditos. Estamos, indicó, trabajando en reeducar y asumir una nueva cultura empresarial. “Hay que reenfocarse -añadió-, reinventarse y renovarse; reforzar a las empresas para que se mantengan vivas. Es urgente contar con una estructura definida, para que se pueda salir adelante de cualquier crisis. En CANACINTRA no solo nos concentramos en empresas grandes, de industria, sino que aceptamos cualquier actividad de personas morales con actividad empresarial, porque eso es lo que la emergencia dicta, los estamos apoyando. La unidad es importante, la solidaridad de los socios”.
Vega Peña explicó que la capacitación es de vital importancia, dotar a los socios del conocimiento necesario para crecer, a un tiempo que se impulsa la emprendeduría, con todos los cuidados de la salud de los trabajadores. De conformidad, aseveró que se esfuerzan por estar preparados para mayores adversidades como nuevas caídas al color rojo del semáforo epidemiológico, donde es sabido, la actividad comercial resiente significativamente las limitantes.
CANACINTRA, indicó, también apoya la agroindustria: mantiene estrategias de fortalecimiento de organización de productores, empacadores y de comercio, como por ejemplo, de frijol, cuya última producción tuvo resultados favorables en el norte del Estado, y se persigue una compra-venta justa.
Asimismo la titular de CANACINTRA dio especial importancia a la innovación comunicacional como el “networking” o comercio virtual: pastelerías, florerías, etc., en pro del establecimiento de una red de negocios. Cabe destacar que al ser la primera mujer en encabezar esta cámara empresarial, Brenda Vega anunció que ya tienen contemplado enriquecer la actividad de comités de mujeres empresarias, y el próximo 8 de marzo, con motivo del Día Internacional de la Mujer, efectuarán un evento de emprendimiento de la mujer. “Para que expongan productos -agregó- y trasciendan a los demás. Estamos haciendo labor de comunicación, de difusión entre socios de los productos que se ofertan. Buscamos pues que la tecnología, la ciencia y la unidad, sean base de una nueva cultura empresarial”.
Por su parte, el Presidente de la CANIRAC, Alfonso Aguilar Barr, afirmó que la ineludible reinvención empresarial parte de la idea del “como sí”: del cómo es posible hacer las cosas “más unidos que nunca'. “Ahorita -hizo hincapié- nos hemos unido bastante, y aplaudimos el apoyo de Juan Enrique (Presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Tepic), como representante del sector hotelero: me ha motivado bastante para seguir adelante en el sector restaurantero. Vimos como bajó el índice de contagios tras el semáforo rojo, quizá porque en Tepic caen enfermos de todo el Estado, ante escasez de medicamentos y tratamientos, yo creo que el Gobierno Federal se arrepiente de no haber entablado suficientes estrategias coordinadas y haber invertido en salud y en sectores de la economía, con claras acciones de cuidado de empleados, de clientes, familias y proveedores, que es lo que hacemos con especial énfasis para continuar con un servicio de calidad, y asegurar las fuentes de empleo”.
Aguilar Barr, destacó un aspecto neurálgico: “si cuidamos a la gente, y si predicamos con el ejemplo desde la empresa, habrá mejores resultados, es algo que se está multiplicando. Ya vamos hacia el color amarillo, debemos de cuidar mucho el semáforo, no hay que malinterpretar los colores o los avances tenidos. Me gustaría que el semáforo de la salud se mantuviera en alerta, cuidarnos como si estuviéramos en semáforo rojo”.
El Presidente de CANIRAC, expuso entonces que la reinvención incluye además el impulso de una ‘cadena de conciencia’, o lo que es lo mismo el apoyo solidario de todos los empresarios para consensar una reducción razonable al índice de ganacias, a fin de sumar clientes facilitandoles productos acorde a su poder adquisitivo; un proceso que integra desde los servicios en una plataforma digital común, hasta el servicio a domicilio.
El Presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de la Capital, Juan Enrique del Real Tostado, consideró que en efecto, si el mundo cambió, también la manera en la que la presente generación, y más la que vendrá, se recrea, divierte y descansa, situación complicada que impacta indefectiblemente en todos sectores. “Al final del día -dijo- somos ancla: lugar de recreación y diversión, y todo cambió. Se generaron cambios de hábitos, y nos enfrentamos a una pandemia que desconocemos el final. Nos toca presenciar pues el surgimiento de una generación bastante diferente a nosotros, y desde la perspectiva empresarial tendremos que realizar sinergia para hacer frente con éxito al reto consabido. Nos damos cuenta que batallamos en diferentes frentes: hoy es el rescate de empresas y que los trabajadores se acoplen a nueva forma de trabajar. Y por supuesto ningún sector saldrá adelante si no hay sinergia entre nosotros y con los gobiernos”.
Del Real Tostado, acuñó la necesidad expuesta pues con las siguientes palabras: “Cámaras unidas en una sinergia estratégica con la autoridad, más tiempo a negocios, nuevos hábitos de cambio y movilización de la economía”.
Así, la Unión de Columnistas y Articulistas de Nayarit (UCAN), como actor en permanente lucha “¡por el ejercicio y defensa de la libertad de expresión!” de una nueva normalidad en cumplimiento a su vez con su misión comunicacional ante la sociedad, coincidió en voz de sus miembros Marco Vinicio Jaime, Lily Cayeros (Coordinadora General), Sergio Mejía Cano, Carlos Fránquez Villaseñor, Luis Alberto Bravo Mora, Ángel Carbajal Aguilar y Bernardo Narváez Avila, en la importancia de un gran pacto transversal por la salud y el rescate económico con gran sentido social, pueblo, gobierno y empresarios, teniendo como elementos de auxilio a mismos grupos locales de artífices en materia por ejemplo, de arte y cultura, y de la propia comunicación, a fin de hacer frente a los retos de un incierto futuro que exigirá cada vez más de unidad, suma de voluntades y criterios con un solo objetivo: sobrevivir para la reconstrucción de los cimientos de una nueva Era. ¿Se podrá alcanzar la meta oportunamente? Veamos.