Manuel Peraza, un delegado con gorgojo

A través de una alianza entre diversos empresarios jaliscienses, organizaciones sociales fachada y el arquitecto Manuel Isaac Peraza Segovia, se ha tejido una sofisticada plataforma de negocios donde se utilizan de manera ilegal la imagen y los recursos de los diversos programas de la Secretaría de Bienestar, con el objetivo de fortalecer la figura del delegado de programas federales, quien busca afanosamente la candidatura al gobierno de Nayarit por morena.

“…Estamos contentos porque estamos llegando a un muy buen principio con toda la gente de Nayarit, teniendo ahorita a un gran delegado que verdaderamente tiene una visión moderna, una visión necesaria para que podamos salir adelante aquí en Nayarit.” (Jaime Enrique Michel Velasco, dulces De La Rosa) (https://bit.ly/38F37q6).

Actuando como cabeza de playa de la oligarquía jalisciense, y no como representante del gobierno federal, Peraza Segovia se apresta a la conquista de la entidad para sus patrocinadores. Toda la estrategia montada por el delegado de programas federales y sus aliados para posicionar su imagen con miras al 2021 se encuentra en la página electrónica: www.nayaritseragrande.mx, y se divide en tres ejes o programas: 1) “Tod@s Reactivamos Nayarit, 2) “Sistema Súper Justo” (https://www.superjusto.org/) y 3) Reconvierte.

En el portal se explica que la iniciativa es una “alianza solidaria de la iniciativa privada, sociedad civil organizada, para coadyuvar con el Presidente de la República y el Gobierno Federal  en la reactivación social y económica de Nayarit”. Entre el contenido que más llama la atención están los marcas de las diversas empresas jaliscienses que patrocinan las aspiraciones políticas del delegado Peraza: salsa Maya y  cerveza Mazatlán, de Eduardo Mercado (nayarita); paquetería Dag Packet, de Miguel Ángel Magaña; Grupo Vidanta, comandada por Daniel Chávez Morán; dulces De La Rosa, del excéntrico Jaime Enrique Michel Velasco; Flosol Motors, de Guillermo Flores Solano; Verde Valle, de la familia Vergara, Minsa-Estrella Blanca, del impresentable Raimundo Gómez Flores; Consejo Mexicano de Comercio Exterior, dirigido  por Miguel Ángel Landeros Volquarts; entre otras. Junto a éstas, los logotipos de las secretarías del Bienestar y Segalmex, Sedatu, Secretaría de Economía, Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, y Comisión Nacional del Agua, lo que representa una violación del artículo 134 constitucional al utilizar propaganda gubernamental para fines personales y su vinculación con el partido político en el poder (la última reforma del 134 buscó que los funcionarios se abstuvieran de utilizar la propaganda institucional y los programas sociales como medio para promocionar la persona e imagen de cualquier servidor público y para lograr una ventaja indebida en las competencias electorales).

En la estrategia antes referida, la parte de la “sociedad civil” es cubierta por una organización fantasma: el Congreso Agroalimentario de Nayarit, de la cual no existen mayor información que una fan page en Facebook (https://www.facebook.com/ConsejoAgroalimentarioNay) que sirve de difusión de las diversas actividades de campaña del delegado federal. La persona que encabeza esta organización fachada, es el también jalisciense, Roberto de Alba Macías (https://www.facebook.com/RoberdeAlba), agroempresario (sic), ex funcionario zapopano, candidato priísta a la diputación del distrito X de Jalisco en 2012 y ex líder de la CNC Jalisco, pero que renunció al PRI en 2018 para apoyar a Enrique Alfaro. En su perfil de Twitter puede corroborarse su  pasado eminentemente priísta (https://twitter.com/RoberDeAlba?s=20).

Toda esta alianza, más los mandos superiores de la delegación, también en manos de puros jaliscienses (hasta aviadores tiene contratados, es el caso del delegado regional zona Centro, Exiquio Alejandro Nava Gómez, quien también aparece en la nómina del CUCEI de la Universidad de Guadalajara como profesor de asignatura) forman la “estructura” con la que Peraza Segovia espera ser candidato.

Y efectivamente "el diablo está en los detalles”. Y es que detrás de una iniciativa aparentemente legal y con fines de apoyo a la reactivación económica local, se parapeta el uso de los programas federales con fines electorales por parte del delegado, quien además descuida las actividades sustantivas de su cargo (no asiste a las reuniones de seguridad ni coordina los operativos de pagos de los programas sociales, pero no falta a las actividades de promoción de su estrategia electoral). Por ejemplo, en una conferencia de prensa (5 de junio de 2020), en la inauguración del programa Súper Justo en la colonia Morelos, Roberto de Alba Macías, comentó: “Esta estrategia (Súper Justo) es un sistema de abasto para la economía familiar, forma parte del proyecto Todos Reactivamos Nayarit, un grupo  de empresarios nacionales, nayaritas (sic) (…) estamos haciendo esto con Diconsa, es una empresa del Gobierno Federal, una iniciativa del presidente de la República donde quiere que lleguen los productos al mejor precio a las mesas de los mexicanos y que pueda dar vueltas el recurso, que los beneficiarios de los programas sociales que tienen una tarjeta de Bienestar, pueda llegar Súper Justo a su casa…” (https://tinyurl.com/y39rz6c5).

Miente Roberto de Alba Macías, es falso de toda falsedad que Súper Justo sea una iniciativa de empresarios nayaritas o un programa federal e iniciativa del presidente; no existe en el catálogo de programas asistenciales, ni tampoco existe ningún convenio oficial de colaboración de Segalmex con empresarios para estos fines. Lo mismo sucede con las “programas” Tod@s Reactivamos Nayarit y Reconvierte, en donde también estarían involucrados recursos e imagen institucional del gobierno federal con fines ajenos al desarrollo social. Hasta espectaculares fueron colocados en distintos puntos de las ciudades de Tepic y Xalisco para promocionar estas iniciativas. Así mismo, no se ha escatimado en el pago de "chayotes". Hace unos días, Jaime Barrera, un plumífero, obviamente jalisciense, escribió linduras del irascible Peraza y su sueño de la gubernatura: “…El interés que han despertado estos proyectos [los tres arriba citados] y que han atraído inversión de empresarios nacionales y extranjeros ha colocado a Peraza Segovia en uno de los fuertes aspirantes a la gubernatura de Nayarit que estará en juego en el 2021 y en la que Morena lleva ventaja”. (https://tinyurl.com/y4owzfjw).

Lee uno esto y se pregunta: ¿con qué autoridad Peraza Segovia ha acusado a Nayar Mayorquín de hacer promoción política y usar los programas de bienestar con propósitos electorales, si él anda en los mismos enjuagues? Y es que, al profundo desgaste de la figura del delegado derivado de su personalidad déspota y majadera -circunstancia que le ha ganado toda suerte de adversarios-, se le deben sumar las recientes pruebas de maltrato y despido de los Servidores de la Nación, y ahora además, su abierta intención de buscar la candidatura al gobierno estatal desde la delegación federal.

Ante estas conductas que van a contrapelo de la legalidad y de los postulados de la 4T ¿es prudente mantener a Peraza Segovia al frente de la delegación de los programas federales de la Secretaría de Bienestar? (“frijol con gorgojo” fue la frase que el genio comunicativo del hoy presidente acuñó para deplorar la manipulación de los programas de gobierno para favorecer a partidos políticos) ¿Merece el pueblo de Nayarit tener a un funcionario que no sirve para servir, que repudia todo lo local, en la misma medida que se decanta por lo jalisciense? No es asunto menor, los acuerdos mostrencos entre el delegado Peraza y sus patrocinadores jaliscienses, parten de una visión despreciativa de la entidad, a la cual, según la evidencia, apenas la consideran como tierra de conquista comercial y política.

Que se sepa.