Tepic, Nayarit, viernes 29 de marzo de 2024

Justo y trascendental reconocimiento al líder campesino Manuel Lozada

Raúl A. Méndez-Lugo

30 de julio de 2020

"Soldados, vais a presenciar mi muerte que ha sido mandada por el gobierno y que así lo habrá querido Dios; no me arrepiento de lo que he hecho. Mi intención era procurar el bien de los pueblos. Adiós Distrito de Tepic. ¡ Muero como hombre !"

Manuel Lozada, fusilado el 19 de julio de 1873.

El martes 28 de julio de 2020, el Gobernador del Estado de Nayarit, CP Antonio Echevarría García, develó el monumento en honor al líder agrarista Gral. Manuel Lozada, el "Tigre de Álica", en el Jardín que ahora lleva su nombre y que está ubicado en la carretera Tepic-Guadalajara entronque con la Avenida Aguamilpa, en la capital del estado, Tepic de Nervo.

En una ceremonia sencilla pero muy significativa para todos los que ahí estuvimos presentes, se tuvo la participación de dos oradores principales, el Profesor-Investigador de la UAN Mtro. Pedro Luna Jiménez y el C. Gobernador Lic. Antonio Echevarría García.

Entre los invitados estuvieron tres ex gobernadores del estado, el Lic. Celso Humberto Delgado Ramírez (1987-1993), el C. Rigoberto Ochoa Zaragoza (1993-1999) y el C.P. Antonio Echevarría Domínguez (1999-2005), también destacó la presencia del Obispo de Tepic, Mons. Luis Artemio Flores Calzada.

Con todas las medidas sanitarias establecidas para prevenir el contagio del Covid-19, el público asistente se conformó por autoridades de los tres poderes del Estado, Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Como invitados especiales estuvieron las autoridades municipales y ejidales del pueblo de San Luis de Lozada, el delegado estatal del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Arq. Othón Quiroga y el director general del CECAN, Mtro. Antonio Ruiz Barrios, así como cronistas e historiadores representantes de La Crónica de Nayarit A.C. y académicos de la Universidad Autónoma de Nayarit, entre ellos figuraron la Dra. Lourdes Pacheco Ladrón de Guevara, el Mtro. Miguel González Lomelí, el Dr. Jorge Briones Franco, el Antrop. Raúl Andrés Méndez Lugo, el Mtro. Julián Pineda, el Hist. Gregorio Miranda Navarrete, el Hist. Javier Berecochea García, la Lic. Alba Sarahí Durán, el Ing. Rolando Toledo, la fotógrafa Lourdes Carrillo Reina, entre otros conocedores de la historia y la cultura de nuestro estado.

El programa del evento se inició con la proyección del video "Arbol para un Ahorcado" de la Mtra. Dalinda Sandoval, donde se hace una síntesis histórica de las luchas campesinas e indígenas protagonizadas por el Indio Mariano "Máscara de Oro" en 1801, la lucha del líder campesino Gral. Manuel Lozada de 1857 a 1873 y, de los agraristas revolucionarios Antonio R. Laureles y Prisciliano Góngora, asesinados en 1922 por órdenes de los grandes hacendados que se resistían al reparto agrario.

Inmediatamente después vino la disertación sobre el Movimiento Lozadista y su legado histórico a cargo del Mtro. Pedro Luna Jiménez, quien en pocos minutos nos habló sobre las características y trascendencia de este personaje controvertido del siglo XIX, señalando categóricamente que fue un hombre de su tiempo, que su convicción en la defensa de las tierras de los pueblos de la comarca tepiqueña.

Como todos sabemos, Lozada se enfrentó, por un lado, a las leyes liberales de la época, pero principalmente a la Ley Lerdo de 1856, conocida con el nombre de Ley de Desamortización de los Bienes Eclesiásticos y Corporaciones Civiles (léase comunidades campesinas e indígenas) y, en conjunto a las llamadas Leyes de Reforma que se sucedieron entre 1855 y 1859, por otra parte, se tuvo que enfrentar a la clase pudiente de los hacendados, estableciendo alianzas con otros empresarios y hacendados contrarios a los liberales, incluso, existe la razón ideológica del porqué la historia oficial siempre ha condenado su alianza con el Imperio de Maximiliano (1864-1867). Lo cierto es que Lozada y su movimiento regional se enfrentó principalmente al despojo y usurpación de las tierras de los pueblos por parte de los dueños de las haciendas, en ese sentido las proclamas y manifiestos emitidos por Lozada y su gente se centraron casi exclusivamente a defender y recuperar sus tierras, asunto fundamental que muchos años después enarboló también el caudillo del sur Emiliano Zapata, a partir de 1911 hasta su asesinato en 1919, de eso no hay ninguna duda, pues los ejércitos campesinos se fueron a la revolución con el propósito de lograr la restitución de sus tierras que habían sido arrebatadas por los hacendados, gracias a las leyes liberales mencionadas y la mano firme y represiva de los gobernantes a partir de la constitución de 1857 hasta el fin de la dictadura del porfiriato.

Para cerrar este importante e histórico evento, el C. Gobernador del Estado, ofreció un mensaje a la concurrencia donde destacó la trascendencia del líder guerrillero, campesino y agrarista del siglo XIX, mencionando que gracias a su lucha el 7° Cantón de Tepic se independizó del Estado de Jalisco en 1867, cuando Juárez decretó la creación del Distrito Militar. Es importante recordar que Juárez y Porfirio Díaz respetaron su liderazgo en la región, incluso, Díaz en su movimiento por alcanzar el poder de la nación, le pidió a Lozada su apoyo, sin embargo, como se ha documentado, Lozada no accedió a ello debido a su declaratoria de neutralidad cuando Juárez derrotó al imperio de Maximiliano y logró la restauración de la república. En julio de 1872 muere Juárez y es Sebastián Lerdo de Tejada quien lanza una embestida contra el poder y dominio del Tigre de Álica en la región del Distrito Militar de Tepic.

El gobernador del estado, también en su mensaje propuso que el nombre de Manuel Lozada figure en el Muro de Honor del Congreso del Estado, junto con los hombres y mujeres que han dejado un legado imborrable en el proceso histórico de Nayarit, reiterando que Lozada y su movimiento fue clave para la conformación del Territorio de Tepic en 1884 y como Estado Libre y Soberano en 1917.

Estoy convencido que la polémica sobre Lozada continuará, algunos seguirán sosteniendo que fue un traidor a la patria y un bandolero aliado a los conservadores, sin embargo, los resultados de los congresos académicos sobre el tema llevados a cabo en 1950 y en 1999, han sido muy claros y contundentes: Lozada fue un luchador social, pionero del agrarismo en México y fuerte impulsor de la conformación de Nayarit como Estado Libre y Soberano, por ello no es gratuito que el principal estudioso de la vida y obra del “Tigre de Álica”, el historiador Jean Meyer, haya dicho durante el Festival de Letras de Tepic en 2015, que Lozada, sin duda, fue el “Zapata del siglo XIX”.

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