Chisgarabís
Elvira Galaviz
27 de marzo de 2020
SALARIOS A REPORTEROS
Es común que en Nayarit propietarios o directores de periódicos, así como de canales de televisión o despachos en redes sociales, hagan alarde de que todos sus reporteros perciben un salario digno por las labores que desempeñan y ninguno está autorizado a pedir apoyos de ninguna especie.
Pero el problema es saber el monto salarial, porque ni siquiera son capaces de especificar en cantidades que los reporteros perciben un buen salario.
Sin embargo, es cotidiano que empresas periodísticas hagan regateo de prestaciones sociales a su cuerpo de reporteros y que los salarios se ajusten a su mínima expresión, provocan entonces que el periodista especializado busque allegarse por otra vía recursos para cumplir con elementales provisiones para la subsistencia de su familia.
Será suficiente el pago de empresarios a reporteros como para que estos cubran gastos correspondiente a gasolina del auto de su propiedad utilizado para trasladarse a las fuentes informativas, de luz eléctrica, de celular para concertar citas de entrevista, para la compra de la útil computadora portátil, pago de cuando menos un café al informante, compra de periódicos, revistas y libros para estar bien informado y capacitado para desarrollar su quehacer reporteril con mucha más eficiencia, trabajo que eleva la calidad informativa al lector y aumenta la credibilidad del medio de comunicación.
Un periódico, o cualesquiera otros medios, son una patente de corso, muchos aparecen a la luz pública para defensa de los intereses del dueño, como otros así han surgido bajo la dirección de empresarios, ayunos de elementales conocimientos de periodismo, pero provistos de una exquisita manera para negociar y convertirse así en un medio fácil de manipulación gubernamental, ejercer un periodismo de boletines, manejado más con base en alabanzas que noticias.
De los altos subsidios que anteriormente entregaba el gobierno, quizá en la actualidad persista la costumbre oficial, sólo que ahora selectiva, a los reporteros les corresponden migajas disfrazadas de salario quincenal. Por eso muchos son de la idea de que embute que no te corrompa, acéptalo.
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