Con quién te quedas, ¿con melón o con sandía?
Sergio Mejía Cano
06 de febrero de 2020
El rector de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), Ignacio Peña González, hace un llamado a los trabajadores universitarios que estén laborando en algún otro lado y a la vez que están cobrando en la universidad bajo su rectoría, para que aclaren su situación en caso de que no sean compatibles los horarios en uno o más lugares de trabajo.
El problema podría estribar en que tal vez muy pocos o nadie le haga caso, en el entendido de que como dice el refrán: “gavilán que suelta su presa vale sombrilla”; pero de todos modos la piedra está lanzada, así que quién quita y pega, aunque posiblemente sea que los aludidos traten de esquivar este llamamiento y dejar que se calmen las aguas creyendo tal vez de que todo pasará y quedará igual que como siempre ha estado: ganando aquí, allá y acullá, a la mejor en la creencia de que lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en cuanto a que ya no se va a tolerar la corrupción y menos ahora que ya es considerada como delito grave y sin derecho a fianza, sea puro discurso. Y el hecho de que alguien acepte dos salarios diferentes sin desquitar uno o ambos de ellos, se podría considerar como fraude y obviamente como corrupción, pero no nada más de quien está recibiendo un salario que no desquita, sino también envolvería a quien se lo ha estado proporcionando durante todo el tiempo que ha estado en esta situación recibiendo un sueldo que no se justifica bajo ningún concepto.
Se ha documentado y es un secreto a voces que en el H. Ayuntamiento de Tepic hay algunas personas en el estatus de estar cobrando tanto en la UAN como en dicho H. Ayuntamiento tepiqueño; sin embargo, aquí el problema no sería tanto de estas personas que ostenten dos servicios, sino en el presidente municipal Francisco Castellón Fonseca que los aceptó en estas circunstancias de no haber pedido licencia en la UAN para poder dedicarse de tiempo completo a las labores del Cabildo del municipio de Tepic u otros, porque tal y como se tiene contemplado de que los empleados de confianza están en servicio las 24 horas del día, esto no les daría tiempo alguno para ir a desempeñar el otro trabajo en la UAN, por lo que desde luego que están en una situación muy anómala. Y esta situación pinta de frente la poca honestidad de los que aceptaron tener dos salarios sin desquitar uno o ambos a la vez, porque ni modo que no supieran que estaban o están obrando mal y en perjuicio del presupuesto ya sea de la UAN o del H. Ayuntamiento de Tepic y posiblemente de otros más de los 20 que conforman el estado de Nayarit.
Ahora bien: desde luego que es muy probable que tanto el rector Peña González como el presidente municipal Castellón Fonseca saben de bien a bien quiénes son las personas que están en el ojo de este huracán, por lo que no se deberían de esperar a que venga la auditoría programada porque se correría el riesgo de que se destape aún más la cloaca que ha llevado prácticamente a la quiebra virtual a la UAN, así que de inmediato debieron cortarles el agua a quienes se presume ganan tanto en la UAN como en el municipio; pero también sancionarlos y obligarlos a devolver todo el dinero que ingresó a sus bolsillos indebidamente, además de ser investigados a fondo para saber el cómo y por qué llegaron a esta situación. Aunque lo más seguro sería que tanto los beneficiados como quienes los favorecieron para ganar aquí y allá, únicamente hicieron lo que habían visto que se hacía desde que se hicieron universitarios, es decir, una costumbre tolerada y aceptada desde siempre; sin embargo, como todo mal es progresivo y por lo regular tiende a colapsar, este día tenía que llegar y llegó al ya no ser posible seguir como antaño y desde luego que a los que disfrutan hasta hoy de una costumbre que se hizo una ley no escrita, pues les va a tener que pagar el pato. Lo malo es que posiblemente hasta estos personajes que están siendo llamados a aclarar las cuentas llegue el asunto y se detenga, porque si se le escarbara al asunto como debería de ser, se comprobaría que el hecho de que haya trabajadores universitarios ganando tanto en la UAN como en un H. Ayuntamiento u otra dependencia gubernamental, viene tal vez desde la misma creación de la UAN.
Así que no nada más sea que pidan licencia, sino que se les investigue para saber el porqué se prestaron a este chanchullo, lo que no habla muy bien de esta gente que a sabiendas de que está mal, con gusto cobran en una ventanilla y en la otra. Mira tú que suave.
Sea pues. Vale.
Comentarios