La disyuntiva educativa de López Obrador
Carlos Delgado Camacho
01 de Octubre de 2018
En el variado y complejo conglomerado de políticas públicas que son facultad constitucional del gobierno de la república determinar y establecer, seguramente la política educativa es en este momento una de las que más preocupan al próximo Presidente de México. ¿La razón? Sencillamente porque muy pronto deberá presentar a la sociedad mexicana la iniciativa que turnará al Congreso de la Unión y que constituirá la propuesta educativa operacional con la que su gobierno sustituirá todo el engranaje legal, técnico y administrativo bajo el que ha venido funcionando el sistema educativo nacional durante el presente sexenio. Engranaje que sabemos, tiene como sustento jurídico y normativo el artículo tercero constitucional que fue reformado para dar vigencia a la Ley General del Servicio Profesional Docente (LGSPD) y al propio Instituto Nacional de Evaluación (INE) que con su actuación, fue básicamente la causa de la inconformidad y el malestar de gran parte del magisterio en servicio. Descrito brevemente, esta es la realidad que tendrá que enfrentar el hoy Presidente Electo, mismo que seguramente sabe que no se pueden retirar los pilares de sostén a un edificio, sin antes tener listos los que se van a colocar en sustitución. Que igualmente está consciente por un lado de que “la campaña ya quedó muy atrás”, y por el otro, que tomar decisiones en torno a un asunto tan delicado como lo es sin duda el educativo, no es tan sencillo como aquello de “enchílame esta gorda”. Así las cosas, quien esto escribe, considera que pasará un buen tiempo para que ANDRÉS MANUEL y su Secretario de Educación pueda cumplir a los maestros la promesa de que “llegando a la Presidencia echaría abajo la Reforma Educativa Peñista”; promesa que personalmente dudo pueda cumplir a cabalidad y dejando plenamente satisfechos sobre todo, a quienes exigen libertad y flexibilidad plena para realizar su trabajo. Para el caso, al igual que en el asunto de la construcción del Nuevo Aeropuerto Nacional y otros de similar complejidad y polémica, “EL PEJEPRESIDENTE” ordenó se llevara a cabo LA CONSULTA NACIONAL, misma que inteligentemente y para disgusto de “algunos actores” se está convocando “a todo mundo” interesado en el tema y no sólo a los maestros “ANTI REFORMA”; a efecto de que se opine libremente y se hagan propuestas innovadoras y de mejora mediante las cuales se pueda alcanzar el ansiado anhelo de que en las escuelas públicas mexicanas se tome verdaderamente en serio la delicada tarea de educar, y por consiguiente, que nuestros niños y jóvenes egresen de las mismas con niveles de conocimiento y aptitud similares a los de cualquier país desarrollado. Me atrevo a afirmar por mi parte que seguramente en LA CONSULTA NACIONAL SOBRE EDUCACIÓN, los Padres de Familia y la ciudadanía participante defenderán justificadamente y con todo este punto, es decir, EL DERECHO QUE TIENEN LOS NIÑOS Y JÓVENES MEXICANOS A RECIBIR UNA EDUCACIÓN DE EXCELENCIA. Este argumento de indiscutible importancia, seguramente la próxima administración que encabece ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR será valorado y tomado en cuenta para justificar y blindar socialmente las decisiones normativas que tomará al respecto y que quizá, no sean precisamente las que esperan muchos de los maestros que le dieron su voto. Particularmente creo que este asunto no debiera ponerse a manera de dos partes necesariamente excluyentes en que los maestros inconformes están por un lado, y por el otro el interés ciudadano. Mis estimados lectores estarán de acuerdo con un servidor en cuanto a que “el buscar el punto de equilibrio entre las partes discordantes” deberá ser el propósito a alcanzar en este debate. Equilibrio en el que por un lado el Nuevo Gobierno deberá comprometerse a valorar, reconocer e incentivar de diferentes maneras la función de los docentes; brindarles seguridad laboral y mejores condiciones y materiales para desempeñar su trabajo, y por el otro, que éstos reconozcan (pero en serio) que “SU RAZÓN DE EXISTIR” son los niños y jóvenes, y por tanto, se comprometan profesionalmente a cumplir la normatividad educativa oficial y estar a la altura del alto compromiso que tienen en sus manos. El tema está en el aíre y hay que muy estar pendientes de lo que suceda, pues no olvidemos que “LA EDUCACIÓN DE UN PUEBLO DEFINE SU DESTINO”.
COROLARIO.- ¡Mucho ojo! Ya se observan destacados representantes del “purulento” cacicazgo magisterial nayarita, culpable de los graves daños que ha sufrido la Educación Pública, que ahora intentan aparecer como “adalides e impulsores” de la Política Educativa del Nuevo Gobierno. Pero su historia los delata ¿o no? Hasta la próxima.
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