Ojalá y vuelvan los trenes de pasajeros
Sergio Mejía Cano
06 de Agosto de 2018
No cabe duda que los ferrocarriles dan materia a algunos políticos para crear polémica, ya sea como candidatos u ocupando un cargo de elección popular; y más, el tema sobre los trenes de pasajeros que desaparecieron de nuestro país en 1998, quedando únicamente el tren turístico de Ojinaga, Chihuahua a Los Mochis, Sinaloa, aunque también le da servicio de pasaje a los habitantes de la Sierra Tarahumara que no tienen otro medio de acceso a sus comunidades más que por tren.
También está el tren tequilero que sale todos los fines de semana de la ciudad de Guadalajara, Jalisco, a las poblaciones de Amatitán y Tequila en el mismo estado; y se dice, que debido a protestas, quejas y presiones de los pobladores de una parte de la Sierra que atraviesa el estado de Oaxaca que no tiene o cuenta con otro medio de llegar a sus comunidades más que por tren, solicitaron que se pusiera en servicio un tren de pasajeros, aunque existen caminos serranos, al parecer son muy riesgosos; sin embargo, al parecer no surtieron efecto las quejas y presiones quedando todo en veremos.
Pero mucha gente añora a lo largo y ancho de nuestra depauperada Nación los trenes de pasajeros, de los que la gran mayoría de las nuevas generaciones ni idea se dan de cómo llegaron a funcionar; si acaso quienes cuando niños, sus papás los pasearon en este tipo de transporte y aún guardan recuerdos de cuando viajaron en tren de pasajeros. Pero hoy en día hay adultos que no conocieron dichos trenes.
Y ahora, de nueva cuenta se comienza a hablar sobre la posibilidad de que vuelvan los trenes de pasajeros, debido a que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no ha quitado el dedo del renglón sobre este tema desde siempre, promoviendo que vuelva a haber trenes de pasajeros a lo largo y ancho del país, y más ahora que será Presidente de la República. Y si bien en su toma de posesión el aún presidente Enrique Peña Nieto prometió al menos una línea ferroviaria en la península de Yucatán, y aunque no se cumplió, el proyecto sigue en pie según la próxima administración, al igual que la de la ruta de la costa occidental para volver a llegar a la frontera norte por este lado.
Sin embargo, en caso de concretarse este proyecto, es probable que no vuelva a restablecerse el servicio tal y como tradicionalmente fue conocido, porque ahora se habla de que más bien el servicio sea de trenes de lujo y no para satisfacer las necesidades de transporte de las clases más menesterosas del país, tal y como lo plasmó el Tata don Lázaro Cárdenas del Río cuando nacionalizó los ferrocarriles en el año de 1937; y eso que hoy en día hay más gente necesitada y con pocos recursos económicos; pero según los que saben y conocen de volver a correr trenes de pasajeros, sería un servicio más parecido al primer mundo que a la realidad de pobreza en que estamos la mayoría de los habitantes del país.
Pero no todo es miel sobre hojuelas en cuanto a que se puedan cristalizar los proyectos de que vuelvan los trenes de pasajeros a nuestro país, debido a los concesionarios que ahora administran los ferrocarriles en México, porque una de sus primordiales exigencias fue precisamente que se cancelaran los trenes de pasajeros porque les estorbaban al tenerles que dar prioridad de paso ante los trenes de carga que es lo único que les interesa: manejar los trenes de carga y no los de pasaje que siempre se manejaron sin fines de lucro, y a lo que vienen los inversionistas es a obtener ganancias y no pérdidas que es más bien lo que podría suceder con los de pasajeros.
En el inicio de esta concesión de los ferrocarriles a la Iniciativa Privada, y que originó la desaparición de los trenes de pasajeros, el pretexto que puso el gobierno de entonces fue que ya la mayoría de las poblaciones del país estaban conectadas por vía terrestre y que quedaban muy pocas localidades sin acceso carretero pero que era probable que en un futuro cercano también estuvieran conectadas; y además, que el transporte terrestre era lo suficientemente amplio para satisfacer a prácticamente todas las poblaciones del país.
Viaje seguro, llegue satisfecho, viaje por ferrocarril, era uno de los eslogan de la otrora orgullosa ruta de la costa occidental, el Ferrocarril del Pacífico. Y sí, viajar en tren siempre ha sido más satisfactorio y cómodo que viajar en autobús por más plus que sea el servicio, ya que en los trenes se podía caminar a lo largo del tren para desentumir las piernas y desde luego, observar el paisaje más abiertamente.
Sea pues. Vale.
Comentarios