Regresar al pasado

Tal vez no ande tan errado el presidente Enrique Peña Nieto al decir que en caso de no ganar el PRI en el 2018, nuestro país podría regresar al pasado; y menos con la respuesta que ha dado a los medios el dueño del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, más conocido como Morena, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pues éste último señala que si la oposición se alza con la victoria, los bienes nacionales regresaran a ser eso: propiedad de la Nación y no del gobierno en turno que los ha entregado al capital de la Iniciativa Privada (IP), tanto nacional como extranjera.

Pero también el líder de Morena se refirió a los trenes de pasajeros, cuyo servicio no quieren prestar los nuevos concesionarios de las diversas empresas ferroviarias que operan en el país, aduciendo que los trenes de pasajeros les estorban para mover la carga que es precisamente lo único que quieren, pues es lo que deja ganancias, no así los trenes de pasajeros que no dejan ganancia alguna y se les tendría que dar prioridad de paso antes que a los trenes de carga.

México es el único país que no cuenta con servicio de trenes de pasaje, siendo que según está documentado, en 1937 cuando don Lázaro Cárdenas del Río, entonces Presidente de la República Mexicana, nacionalizó los ferrocarriles, señaló que se establecía el servicio de trenes de pasajeros para satisfacer las necesidades de transporte de las clases más menesterosas. Y si bien, como en todo, hubo gente que podía pagar pasaje en coches dormitorios, primera especial y primera regular, el servicio de segunda clase siempre fue el que más demanda tuvo hasta que este servicio desapareció prácticamente en todo el país, por lo que México ha quedado rezagado en cuestión de este servicio que son los trenes de pasajeros.

Pero volviendo con AMLO, recientemente ha afirmado que de llegar Morena al Poder, aumentarán y se incrementarán las becas para los jóvenes estudiantes, las pensiones a los adultos mayores de 65 años y más, así como mejorar los servicios del Sector Salud y desde luego, atender al Sector Educativo que han quedado relativamente en el olvido.

Y si bien cuando se le cuestiona que con qué recursos haría todo esto, afirma AMLO que no permitiendo el desvío de recursos tal y como se ha documentado últimamente con los exgobernadores de Veracruz, Javier Duarte, el de Chihuahua, César Duarte y Roberto Borge de Quintana Roo y desde luego a Guillermo Padrés, exgobernador de Sonora.

Y quizás no ande tan errado AMLO, porque dinero hay para llevar a cabo todo lo que señaló, porque es un hecho que las pensiones vitalicias a los ex presidentes del país son una verdadera sangría para el erario y más hoy en día que han enflaquecido debido a tantas privatizaciones, ya que el dinero que se llevan las empresas hoy privatizadas deberían seguir entrando a las arcas nacionales, pero no, se van a los bolsillos de la IP. Y obviamente habría más dinero bajando drásticamente los salarios que devenga la clase política y de funcionarios como los magistrados que se dice, ganan mucho más que el propio Presidente de la República. Cortarles de tajo las prebendas de las que goza la casta política, quitándoles el pago de la telefonía móvil, vales de gasolina, seguros médicos de primera, gastos para comida y antojitos, bebidas, etcétera; también que les cuesten sus viajes que hacen frecuentemente cuando no sean por alguna comisión de acuerdo a su cargo. Que todo lo que gasten sea de su propio bolsillo y no con cargo al erario.

Igualmente, se obtendrían más recursos para las arcas nacionales, quitándoles el financiamiento a los partidos políticos, así como al dichoso Instituto Nacional Electoral (INE) que ha sido literalmente un barril sin fondo, pues se ha llevado muchos millones de pesos y no ha dado claros resultados, por lo que ningún beneficio reditúa a la población, más que puros gastos y gastos en donde la mayor parte del presupuesto asignado se va en los altos salarios de sus consejeros.

Pero también se podría obtener más dinero para las arcas nacionales si se cobraran impuestos como es debido a la infinidad de grandes empresas que se ha informado frecuentemente que no pagan sus impuestos como debieran, sino al contrario, la Secretaría de Hacienda a través del Servicio de Administración Tributaria (SAT) les regresa enormes cantidades de dinero debido al juego de números que hacen amparados con las mentadas donaciones altruistas que son exentas o deducibles de impuestos. Pero en fin. Sea pues. Vale.