La hora de los trapecistas

En los círculos internos del Congreso del Estado circula información extra oficial que en su próxima sesión ordinaria el pleno de esa Soberanía Popular concederá licencia para separarse del cargo a una decena de diputados de las distintas fracciones parlamentarias que aspiran a postularse como precandidatos a presidentes municipales.

El legislador panista Javier Mercado es el único que se separa del cargo para buscar su reelección para los próximos 4 años. Esa posición es digna de reconocimiento porque le apuesta a que hizo un buen desempeño como legislador, lo que garantiza a sus electores que tendrán un digno representante en la próxima legislatura por su experiencia como parlamentario y buen gestor social en la actual legislatura.

En cambio el resto de los que se separarán del cargo para ocupar otro puesto político-administrativo están más motivados por tener acceso a la chequera de los gobiernos municipales que, aunque hoy en crisis financiera, no dejan de ser un gran atractivo porque presuponen que desde ese puesto pueden acumular recursos económicos para promoverse a otros cargos públicos de mayor relevancia política.

Como está próximo la designación de los precandidatos a presidentes municipales, regidores, síndicos y diputados locales en cada una de las organizaciones políticas existe una rebatinga de suspirantes que aspiran a algunos de esos puestos de elección popular.

En donde se vislumbra que habrá serias disputas por las candidaturas a esos cargos de elección popular es en el frente amplio opositor integrado por el PAN-PRD-PT-PRS.

Si bien es cierto que ya existe un convenio de coalición en el cual quedaron consignados los municipios y distritos que corresponderá a cada uno de esos partidos  designar a sus candidatos, el problema radica que al interior de cada uno de los partidos coaligados su militancia y liderazgos municipales enfrentarán una disputa interna para merecer tales candidaturas.

En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) es en donde se están generando este tipo de conflictos internos. El grupo de “los Galileos” encabezado por el diputado federal Guadalupe Acosta Naranjo pretende a toda costa imponer su voluntad de que el alcalde de Tepic con licencia y fallido aspirante a gobernador Dr. Leopoldo Domínguez como no logró su objetivo de que fuera el candidato de la alianza opositora ahora dice ser generoso al proponer que el panista Polo Domínguez sea postulado como candidato a la reelección a la presidencia municipal de Tepic.

Obviamente esta propuesta causó enojo en varios aspirantes perredistas a la presidencia municipal de Tepic al argumentar que de acuerdo al convenio de coalición corresponde al PRD nominar a un militante perredista o en su caso abrirla a un candidato de la sociedad civil, pero en modo alguno a otro panista. Hacer lo contrario sería violar el convenio de coalición.

Entre los aspirantes perredistas a la presidencia municipal de Tepic se apuntaron el Ing. Rodrigo González Barrios, ex secretario del Ayuntamiento en el gobierno de Polo Domínguez, el líder municipal del PRD en Tepic, Luis Zamora y la esposa de Guadalupe Acosta Naranjo, la diputada Sonia Ibarra quien, por cierto en días pasados anunció que retiraba sus aspiraciones y continuaría al frente de la bancada perredista en la XXXI Legislatura. Esta posición que asumió la diputada Sonia Ibarra tapó las bocas de quienes daban por hecho que se impondría el nepotismo de Acosta Naranjo.

Ahora bien, si la corriente hegemónica del PRD insiste en apostarle a imponer la candidatura del panista Leopoldo Domínguez va provocar una división interna en ese partido.

Por otro lado si el Dr. Polo Domínguez que si bien es una persona honrada y respetable acepta competir por la reelección a la alcaldía de Tepic no creo que sea competitivo en la próxima elección porque tiene en su contra el haber incumplido sus promesas de campaña como presidente municipal, entre otras la mejora de los servicios públicos mismos que hoy son peores que en la administración priísta del Ing. Héctor González Curiel. No creo que los tepicenses lo apoyen abrumadoramente con su voto como en la elección del 2014. El saldo de su gestión es más negativo que positivo.

Es más su postulación a la reelección como alcalde de Tepic podría restarle votos al candidato aliancistas a gobernador Antonio Echevarría García, quien por cierto se muestra muy parsimonioso en su trabajo de proselitismo interno como precandidato de la coalición. No muestra un fuerte y enérgico liderazgo en la alianza opositora “Juntos por Ti”…