El candidato de López Obrador

Todo indica que Navarro Quintero será el candidato a Gobernador de Nayarit lanzado por López Obrador y su partido morena.

Es una asombrosa contradicción que el aspirante presidencial en cada evento político que preside en nuestro estado exalte hasta el cansancio la personalidad de Alejandro Gascón Mercado y registre para la contienda por la titularidad del Ejecutivo a celebrarse el próximo año a un individuo que operó el fraude contra el pueblo nayarita en 1975 siendo el atraco más grande que se ha cometido en la historia nacional tan grave ---o más aun--- como el que se le hizo al Doctor Allende en Chile el 11 de septiembre de 1973.

El Arquitecto Navarro, ya fallecido, hermano de Miguel Ángel, fue el ejecutor número dos de aquel crimen. El número uno fue Flores Curiel. Claro, por supuesto, los autores fueron la CIA y Luis Echeverría Álvarez. El Doctor, excandidato: a gobernador y a Presidente Municipal de Tepic, estaba convertido, en 1975, en el brazo derecho de quien entonces ocupó la alcaldía, cuyo personaje, tomó el fascista mando, obviamente, aplicando una feroz represión contra el pueblo, lo cual, no podía ser de otra manera, pues, había que estar a tono con el masacrador de la matanza del jueves de corpus en la capital del país, así como también, con el sanguinario Sam López.

Así, el ahora aspirante a ser el abanderado de morena para encarrerarse por la gubernatura nayaritense en 2017, tiene esa mancha que nada ni nadie, se la podrá quitar ni borrar. El mayor delito que comete un ser humano es violar la voluntad democrática del pueblo. Es un crimen incalificable. En ese cuadro criminal está Navarro Quintero, quien está en la línea de figurar como el candidato del partido que dice ser la esperanza de México.

En Nayarit, López Obrador se equivoca. Nuestro pueblo tiene memoria. La batalla del 75 la lleva en el corazón y está tan presente como hace cuatro décadas. No votará por alguien que participó personal, material y directamente, en la “peor desventura que ha tenido y tendrá Nayarit en su primer siglo de existencia” como lo “es el fraude electoral de 1975”, tal y como muy bien y magistralmente lo define el Licenciado Toño Chumacero, en su brillante diagnóstico titulado: LAS DESVENTURAS DEL NAYARIT ACTUAL.