Contra la reelección en el SPAUAN por perniciosa
Oscar González Bonilla
27 de Junio de 2016
Reconoce Sigifredo Esteban Quezada Montero que el Sindicato de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Nayarit (SPAUAN) en los últimos años no ha cumplido su misión fundamental: la protección de sus representados, derecho plasmado en el contrato colectivo de trabajo.
Sigifredo, es candidato a la secretaría general del SPAUAN, al igual que cuatro profesores más, entre los cuales Carlos Muñoz busca la reelección. A propósito el declarante afirma que tres de los aspirantes opositores coinciden en que “no es posible la reelección”, también en que el sindicato “requiere cirugía mayor para que pueda cumplir su función elemental”.
Quezada Montero siente orgullo de que el actual rector de la UAN, Jorge Ignacio Peña González, quien asumió el cargo apenas el 9 del presente mes, haya sido su alumno durante tres semestres, en consecuencia presume tener una magnífica relación con él. Le reconoce inteligencia para gobernar bien la máxima casa de estudios, tan es así que “sé que resolverá el grave problema financiero que vive la universidad”.
Agrega: “Nuestra relación es muy cordial, seguro estoy que conmigo al frente del sindicato, al que haremos el más fuerte de la universidad, vamos a trabajar juntos; no con dependencia hacia él, sino trabajar juntos, porque él necesita el apoyo e impulso de los tres sectores universitarios: SPAUAN, SETUAN y FEUAN. Insisto: nosotros como el sector pensante, sector que debe ser el eje rector de la vida universitaria, estaremos a su lado para contribuir a solventar el problema financiero. Requerimos que primero le vaya bien a la universidad para después a nosotros nos vaya mejor”.
Sigifredo Quezada entiende la importancia de lograr una real unidad al interior del sindicato. Y no sólo eso, intenta la alianza hacia su candidatura de parte de quienes también aspiran a la secretaría general del SPAUAN, “pero ello no significa que no podemos ganar”. Sentencia que busca la unidad, pero no producto de la decisión de dos-tres, sino del respaldo de quienes están atrás de cada uno de los candidatos. “En esa unidad sí creo. Hace tres años Carlos Muñoz fue candidato de unidad por determinación de dos o tres personas, luego dirigente, y ahí están los desastrosos resultados. Llegas con las manos atadas, sin independencia para la toma de decisiones exclusividad de representantes y representados de nuestro sindicato”.
Machaca en la indispensable unidad real, “sí lo logramos, ¡qué bueno!”. Enseguida expone que a su proyecto se sumó el aspirante José María Curiel, van en alianza, cree que ello ocurrió porque Sigifredo ya dio prueba que por encima de los intereses personales están los del gremio. “No debemos ir pulverizados, si queremos fortaleza para nuestro sindicato y haya verdadero liderazgo, sólo con la unidad lo podemos lograr”.
Comenta el maestro Sigifredo que en el contrato colectivo de trabajo se halla estipulado el derecho a los servicios médicos universitarios para quienes ingresaron a la docencia antes del año 2000, sin embargo para resolver conflictos en el ese rubro es cuestión de poner orden. La atención médica se entrega también a estudiantes y a administrativos, “lo cual no veo mal, porque somos universitarios”. Aunque acepta que el raquítico presupuesto mensual de un millón 800 mil pesos para los servicios médicos no es suficiente ni para la compra de medicamentos. “Hace 20 años íbamos para ser atendidos de raspones y gripe, hoy con graves enfermedades crónico degenerativas cuya atención requiere un costo muy alto”.
El maestro jubilado tiene derecho a que un familiar ingrese en su lugar, pero a cambio endosa su cheque, medida con la que Sigifredo se declara en contra y piensa terminar. Promete que el hijo del maestro jubilado será capacitado por espacio de seis meses en la práctica didáctica.
Referente al descapitalizado fondo de pensiones, Quezada Montero sostiene que antes de aportar porcentaje salarial conveniente es necesario conocer el resultado de la investigación contable de la Auditoría Superior de la Federación. Sin embargo, asegura que “técnicamente hay una propuesta muy sencilla: profesores y trabajadores administrativos le aportemos más al fondo de pensiones. Si entregamos el 10 por ciento, la autoridad rectoral se verá obligada a aportar el 30 por ciento”.
La auditoría federal fue solicitada por los maestros jubilados, jamás por Carlos Muñoz en su calidad de secretario general del sindicato de personal académico. “Ha sido muy apático en trámites para beneficio de los agremiados”.
¿Existe la presunción de desviación del dinero del fondo de pensiones por el anterior rector de la Universidad Autónoma de Nayarit?
“Yo no me atrevo a afirmar, pero tampoco a negar. Yo no sé qué pasó ahí en los últimos seis años, cuando en el fondo había 232 millones de pesos, pero hace seis años había 375 jubilados, ahora 750. A lo mejor por ahí puede venir una explicación”, expuso Sigifredo Quezada.
“Los tres candidatos de oposición tenemos un común denominador: no reelección. Por perniciosa”.
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