Manuel Cota desatado y Raúl Mejía tranquilo

Durante estos primeros días del año, las redes de internet  fueron inundadas por los seguidores de MANUEL COTA con fotos en que aparece con el presidente mexicano ENRIQUE PEÑA NIETO. El propósito evidentemente se dirige a construir la idea de que el referido senador, ya cuenta con el visto bueno del primer priísta nacional para ser el abanderado tricolor en la contienda que se verificará el próximo año. Esta profusa propaganda en su favor promovida evidentemente por su equipo  de marketing, contrasta con la meticulosa actividad de bajo perfil que  venía desarrollando, y con la conocida actitud mesurada de un político como él, que siempre ha sabido “leer y esperar  los tiempos”. Ante esta “nueva conducta” de Manuel Cota, surge una pregunta obligada ¿Será esto cierto? O quizá al contrario, sabiendo que  NO ES EL BUENO ¿Intenta forzar la decisión? Personalmente pongo en tela de duda lo primero y me inclino por lo segundo. Para el caso, me apoyo en  aquel dicho popular que señala…. “Si la gallina es tuya para que la correteas”. Es decir, si verdaderamente MANUEL COTA supiera ya que en función del aprecio, la amistad personal, su currículum, sus virtudes y su peso político es el candidato de PEÑA NIETO, ¿Creen ustedes mis estimados lectores que daría instrucciones para que tan tempranamente se cacaraqueara una noticia de esa dimensión? A reserva de mejor opinión, personalmente creo que no. Por lo contrario, tan intensa promoción  en los medios electrónicos de las fotos tomadas durante un evento de la CNC sin duda importante por ser de nivel nacional, denota más el esfuerzo que este aspirante está haciendo para SER TOMADO EN CUENTA LLEGADO EL MOMENTO. Momento mismo que quizá aún no llega y seguramente va a tardar. Lo anterior no implica que en lo personal un servidor considere que COTA ESTÁ YA FUERA DE LA CARRERA. Por lo contrario, no se puede negar que sus cartas de presentación  son inobjetables, y que  hoy por hoy es uno de los más sólidos precandidatos al interior de ese partido en virtud de que por cierto, NO HAY MUCHA TELA DE DONDE CORTAR para el caso. En este contexto entonces, habría que resaltar que su tradicional comportamiento de “Priísta cuidadoso y disciplinado”, hasta hoy le ha valido para construir una ininterrumpida trayectoria política en que ha ocupado todos los puestos de elección popular habidos y por haber. Entonces, tal como se dice en el argot beisbolero, “Hasta hoy su cuenta es prácticamente de juego perfecto”. Cuestión que lograría efectivamente si se convirtiera primero en CANDIDATO A GOBERNANTE, y después por supuesto, lograra ganar la elección y convertirse en GOBERNADOR.  Ambas situaciones ciertamente aún están por verse, y sobre todo la última, no está nada fácil según las circunstancias actuales de grave descrédito  estatal y nacionalmente de su partido el tricolor. Todo mundo conoce su desempeño como  Regidor, como Diputado local, como Diputado federal, como burócrata del partido y ahora como senador. En mi opinión, si bien no ha sido brillante en ninguno de esos puestos,  MANUEL COTA ha aprovechado los mismos para acumular experiencia y amigos que en su momento, podrían hacer la diferencia y llevarlo a tan ambicionado propósito. Sin embargo, personalmente reitero mi duda respecto a que MANUEL COTA YA SEA EL ELEGIDO.

En contraparte, RAÚL MEJÍA, hombre serio, culto y de indudable experiencia y presencia nacional, parece ser el gran obstáculo que tendrá que sortear COTA o cualquier otro aspirante que se sienta con derecho a disputar la referida candidatura tricolor. Compadre y amigo muy cercano al actual presidente nacional del PRI (que seguramente estará sentado en la mesa de las definiciones), RAÚL desarrolla con tranquilidad un sigiloso pero sistemático trabajo por toda la entidad desde hace meses también. Sin falsos alardes y sin protagonismos espectaculares, construye una red de seguidores que llegado el momento, conformarían su estructura de campaña EN CASO DE QUE SU COMPADRE BELTRONES LE CUMPLA Y  NO LE FALLE. Así que finalmente, un servidor se atrevería a   asegurar  que SON SOLO DOS LOS GALLOS TRICOLORESCON ESPOLONES SUFICIENTES; y de estos saldrá EL CANDIDATO OFICIAL. ¿A cuál le van? De ser COTA el agraciado, continuaría su “racha de buena suerte”.  De ser de otra forma, es decir, si quienes mandan en el PRI consideran que ya se le ha dado demasiado y ahora le dicen que NO; no hay la menor duda que estaríamos viendo EL FINAL de su carrera política. Por su parte, creo que RAÚL MEJÍA está en una posición más cómoda en virtud de que NO TIENE NADA QUE PERDER y MUCHO QUE GANAR. Sin ocupar desde hace años ningún puesto de elección popular, en caso de salir premiado, estaríamos presenciando el gran retorno de RAÚL A LAS GRANDES LIGAS DE LA POLÍTICA. Pues la moneda está en el aire así que….AMIGOSPRIISTAS,  ¡Hagan sus apuestas!

COROLARIO.- Dicen los que saben, que COTA podría correr la misma suerte que SALVADOR SÁNCHEZ VÁZQUEZ, mismo que ocupó todos los puestos pero  nunca obtuvo la candidatura por la gubernatura. ¿Será? Hasta la próxima.