Chisgarabís

En su reciente visita al municipio de Tecuala, en Quimichis, Roberto Sandoval presumió que por primera vez al lugar llegó el gobernador de Nayarit junto con un secretario de Estado. Cuándo habían tenido ese privilegio los quimichenses ¡Nunca! Muchas de las acciones que emprende Roberto Sandoval piensa que como gobernador son por primera vez. Como se ve que no conoce la historia de gobernantes anteriores.

En compañía del titular de la Secretaria de Desarrollo Social, José Antonio Meade, fue a decir que no nadamás llegaron a Quimichis para “echar discursos sino a entregar apoyos para salir adelante como pueblo”. Entre otras muchas cosas entregaron televisores digitales de plasma. Y la gente encantada.

Por su parte Meade afirmó que “Nayarit es el estado que más adelantó contra la pobreza”. ¿Qué quiso decir? Que más combatió la pobreza o que se ubica en los primeros lugares nacionales en ese propósito. Como haya sido, ello no significa, con base en el argumento de Meade, que sea Nayarit donde más se abatió la pobreza. Ni por asomo, el municipio Del Nayar nos evidencia.

MAYORITEO PRIISTA

El pago de tenencia y reemplacamiento sumió a los diputados integrantes de la trigésima primera legislatura local en prolongada discusión en sesión pública ordinaria.

Los legisladores de los grupos de oposición PAN y PRD en tribuna hicieron mil rabietas para hacer entender a los priistas y adláteres de lo nocivo que en estos momentos representa para la alicaída economía los pagos impositivos a los motorizados habitantes del medio rural y también de la ciudad de todo Nayarit.

Los priistas y aliados, fieles a su costumbre, no cambiaron de actitud ni un ápice, no les importó lesionar el gasto familiar de miles de nayaritas y obedecieron fielmente el dictado desde el Poder Ejecutivo. Por ello los oposicionistas señalan que en esta legislatura Roberto Sandoval está convertido en el gran legislador.

Ni modo, a apechugar. El año entrante hay que pagar tenencia y emplacamiento, siempre con la mira puesta en que el dinero será destinado por el gobierno en salud, educación y seguridad, entre otros rubros, jamás pensar que pudiera parar en bolsillos de funcionarios estatales. Se acerca el año de Hidalgo, hay riesgo.