La desigualdad en México
Octavio Camelo Romero
16 de octubre de 2015
Aunque no es novedad para los mexicanos la existencia de la desigualdad social y, por ende, de la injusticia social, si es de llamar la atención que el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, haya asegurado que pese a los avances en el combate a la pobreza, México es el país más desigual de esta agrupación de 34 naciones. Ante tal situación el funcionario al servicio del capitalismo global norteamericano señaló que se requiere de una segunda ola de reformas para enfrentar los desafíos estructurales que tiene México. Y al respecto enfatizó que es necesario fortalecer el estado de derecho, el combate a la corrupción, la reducción de la informalidad, y avanzar en erradicar las carencias en el sistema educativo. También indicó que a nivel global las perspectivas de crecimiento se han debilitado y ahora se espera un crecimiento promedio de tres por ciento con respecto al cuatro por ciento que se preveía inicialmente. En relación con América Latina dijo que se espera que la región crezca alrededor de uno por ciento, muy por abajo del promedio de la OCDE, por lo que será necesario diversificar las economías de la región. Y para el caso México llamó a tener un "optimismo cauteloso".
Sin reponernos de las declaraciones de José Ángel Gurría, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), surgen las remembranzas de José Antonio Meade, secretario de Desarrollo Social, quien nos recuerda que de acuerdo con la metodología del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en México hay 11.4 millones de mexicanos en pobreza extrema y aproximadamente 50 millones más en pobreza alimentaria. Y en este entorno surge de nuevo la propuesta de elevar la productividad de la inversión, o sea, de congelar los salarios para que el capitalista pueda tener mayores ganancias.
Este tema ya lo hemos tratado varias veces en este medio. No es novedad de que a medida que se desarrolla el capitalismo se agudizan las contradicciones sociales y en un polo se aglomeran un puñado de magnates con una centralización y concentración de capital mientras que en el otro se populariza la pobreza y la miseria. Esa realidad la vemos a cada momento. Por ejemplo en la actualidad China cuenta actualmente con 596 personas cuya fortuna supera los mil millones de dólares, lo que representa un crecimiento "increíble" de 242 personas con relación a 2014. Esta nueva realidad del país asiático hace a pesar de la desaceleración en la segunda economía mundial el número de dueños de fortunas por encima de los mil millones de dólares sea mayor en China que el de Estados Unidos que tan sólo tiene 537 millonarios con un patrimonio superior a los mil millones de dólares. Pero también nos deja la enseñanza de que no obstante que la economía de ambos países se ha desacelerado, esto no ha impedido el crecimiento y desarrollo del fenómeno de la concentración y centralización del capital. Más aún, la crisis capitalista se está resolviendo capitalísticamente y, con ello, las contradicciones se están agudizando más. Por lo tanto, el capitalismo no es la vía para resolver sus crisis, necesariamente tienen que ser una nueva sociedad en donde la democracia será necesariamente la esencia del sistema. En fin.
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