Polo viola derechos humanos

El conflicto de la Colonia 15 de Mayo rebasa las fronteras de este fraccionamiento para convertirse en un asunto del interés universal por los derechos que allí tienen que defenderse y protegerse, los cuales, atañen a todos quienes habitamos el planeta. No es menor el problema, definitivamente. Es un tema de fondo y profundo, que requiere de una investigación y un análisis riguroso.

Muy positivo que Guillermina Tafoya Dueñas, Presidenta del Comité de Acción Ciudadana, haya decidido llevar el asunto hasta los límites de declarar que ella ejercerá el cargo hasta el día que señaló la convocatoria, es decir, hasta el 17 de enero de 2018, diga la que diga el alcalde y los regidores, haga lo que haga el alcalde y los regidores, resuelva lo que resuelva el alcalde y los regidores.

Al defender sus derechos, Guillermina Tafoya está defendiendo los derechos de todos los humanos que gozan de la prerrogativa de votar y ser elegidos para ocupar cargos en el sector público, así sea, tal cual es su caso, a nivel de una colonia, aunque, política y cualitativamente, es lo mismo que cualesquiera que fue electo por la vía del voto universal.

El alcalde no acierta. Está muy mal asesorado. Tiene a su alrededor sólo leguleyos, huizacheros, abogados cobraletras que no han profundizado en el estudio de la ciencia del Derecho Constitucional, comenzando con el Secretario del Ayuntamiento, Rodrigo González Barrios, enloquecido por la avaricia, cuyo funcionario del primer nivel de la administración municipal, hizo a un lado la herramienta de la política, para enterrarse en el fango de la corrupción y los negocios. Dirigir a la sociedad a través de un órgano del Estado, como es el caso, es otra cosa. Ello, es equilibrar políticamente, cualquier circunstancia, por compleja que sea. La política todo lo resuelve. La política es la ciencia más elevada del pensamiento humano, tal y como la definía el cuadro político más destacado de Nayarit, Alejandro Gascón Mercado, contraria, a la concepción del también nayarita Emilio González, que repetía la consigna que la política era el arte de tragar mierda sin hacer gestos. En este suceso, Rodrigo optó por la línea del priista; se dejó cegar por la avaricia. Hizo a un lado la ciencia de la política, como hubiera sido lo aconsejable, al seguir las directivas del alcalde socialista.

No brindar protección, por parte del alcalde y los regidores, a los derechos que Guillermina Tafoya y los electores de la 15 de Mayo, tienen, es una franca violación masiva, flagrante y sistemática, a los derechos humanos, pisoteados por Polo Domínguez, mismos que, de existir un real y verdadero Estado de Derecho en este país, debería sancionarse con el desafuero del gobernante y penalmente. El delito que él ha cometido es mayúsculo. Y debería castigarse.

La falta de Polo contra la 15 de Mayo, al no dar protección a los derechos de ser elegida y el voto universal, es masiva, virtud a que se aplica a una gran cantidad de personas; toda una colonia está involucrada; con el riesgo de que la violencia, ya desatada, debido al encono entre los habitantes del fraccionamiento, se agudice y haga más crítico, con hechos que pudiesen acaecer, que todos lamentaríamos, pero que, sería demasiado tarde, pudiendo evitarse y prevenirse.

Del mismo modo, la falta del alcalde se exhibe en flagrancia, porque se está ejecutando actualmente y, es tal la evidencia, que no necesita pruebas, pues, no es necesario que el autor del delito huya, porque está y se dio a ojos vistos, como ocurrió con los hechos del sábado 26 de Septiembre, cuando la Coordinadora de Comités de Acción Ciudadana y el Regidor Arce Montiel, se presentaron a la Asamblea General de colonos, como vulgares golpistas, sin cuidar, absolutamente, ninguna forma y actuando como criminales y delincuentes, intentando remover de su cargo a la Presidenta de la Colonia, Guillermina Tafoya Dueñas, obedeciendo a toda costa, la consigna del jefe de la comuna, Polo Domínguez.

La postura del alcalde contra la Presidenta en comento, es una violación sistemática a los derechos humanos de ella y de los habitantes de la colonia, porque ha seguido el conflicto ajustado a un sistema y procediendo por principios, y con absoluta rigidez en su tenor de vida, es decir, actúa como buen cuadro de la derecha panista, que no admite ni tolera la oposición ideológica en su estructura de gobierno, tal y como es el fascismo, que llega en su intolerancia, hasta la quema de libros, porque éste sistema, es enemigo de la cultura,  el saber y la ciencia; su divisa es la ignorancia y analfabetismo.

Pero, los tiempos han cambiado. La democracia se impone. Este delito cometido por el alcalde de Tepic contra Guillermina Tafoya Dueñas y los vecinos de la colonia 15 de Mayo, tarde que temprano, tendrá que pagarlo. La historia, por lo pronto, ya se lo está cobrando y, se lo cobrará, en definitiva.