Después de la feria, la realidad

Concluyó en santa paz la Feria de Nayarit. Por fortuna no hubo saldo rojo. Se divirtieron miles de gente de escasos recursos del municipio de Tepic y de rancherías de otros municipios aledaños. Con justo derecho disfrutaron 21 días de espectáculos públicos totalmente gratuitos. Como solía decir Ney González  demagógicamente demos “un pedacito de justicia a la gente” claro el pedazo más grande del pastel se lo llevó él y sus leales amigos.

¿Qué viene ahora después de esta emotiva pachanga? Sin duda la cruda realidad, es decir, volver a enfrentar los mismos problemas cotidianos: la falta de empleo, los malos servicios en el sector salud, la carencia de una vivienda digna, el incremento en los precios de la canasta básica, la caída de los precios de la producción agrícola, el desastre natural en las zonas pesqueras, el abuso de autoridad en contra de la gente más jodida, el diario batallar con maestros guevones que a la hora que quieran se ausentan del salón de clase, las pillerías de funcionarios que no trabajan pero si cobran con puntualidad sus quincenas, las grandes tiendas departamentales y bancos que utilizan el terrorismo telefónico para cobrar carteras vencidas.

Luego, a partir de abril, tendremos el gran espectáculo por quienes a nombre del pueblo ambicionan seguir mamando de la ubre del presupuesto público. Serán cientos de ellos los que buscarán amarrar  una candidatura de elección popular. Diputados que quieran gobernar a un municipio y alcaldes que ya se sueñan sentados en un cómodo sillón en el Congreso del Estado. Habrá muchos más que de perdis el pueblo les haga justicia con una regiduría o una sindicatura.

Para lograr ese objetivo esos cientos de ciudadanos los veremos en los próximos tres meses en las calles con discursos de frases comunes y gastadas por el tiempo. Promesas de cambio, eso es lo que escucharemos a lo largo y ancho del estado. No creo que nadie se salga de la regla. Como siempre la descalificación flamígera en contra del adversario.

Lo que es un rumor a voces es que en la próxima contienda electoral estatal no habrá lugar como candidatos a quienes lleven tufo neycista; menos aun a los viejos cuadros priistas los que en la visión de la actual administración estatal huelen a cacicazgo.

De acuerdo a esta visión maniqueista se dice que es tiempo de los jóvenes no importa si carecen de oficio político, capacidad profesional y tengan una que otra maña; lo que importa es que sean leales, discretos y dispuestos a trabajar por transformar a Nayarit.

Por supuesto no es una generalización. En cada uno de los municipios y distrito electorales hay jóvenes que están haciendo bien la talacha de cerca al pueblo.

Como lo dije  alguna vez y lo reitero ahora el Gobierno de Roberto Sandoval está sostenido en siete pilares; a saber: la Secretaría General de Gobierno, la Secretaría de Administración y Finanzas, la Fiscalía General del Estado, Obras Públicas, Copladenay, la Secretaría de Turismo y Comunicación, y el DIF Estatal. Los demás titulares del resto de las dependencias de gobierno continúan  nadando de muertito.

Por el lado del partido en el gobierno todavía no me explico el por qué no se ha coordinado con la estructura territorial denominada fuerza nayarita. Existe la percepción que continúan existiendo dos estructuras paralelas dentro del PRI; la del partido y la denominada “fuerza nayarita” subordinada y alimentada desde Palacio de Gobierno.

Lo mismo sucede en las delegaciones federales en el estado. Sus delegados actúan como si fueran empleados del ejecutivo estatal, no del federal. El que ha sido más funcional hasta ahora es el delegado de la Conagua en Nayarit. El Resto son medrosos y no toman iniciativas propias para ayudarle al mandatario estatal.

¿Ante este panorama el tricolor podrá recuperar los 10 municipios en manos de la oposición? Es probable que recupere algunos de ellos ante una oposición totalmente fracturada PAN-PRD que le apostó a una coalición de facto que en vez de atraer el voto popular a su causa lo confundirá con resultados imprevisibles.

Desde esta perspectiva a partir de los resultados de los comicios del 6 de julio próximo veremos un reacomodo de las fuerzas políticas en el estado. El proyecto de gobierno de Roberto Sandoval dependerá de que su partido obtenga la mayoría en el Congreso del Estado y recupere los municipios estratégicos que para la contienda federal del 2015 gane los tres distritos electorales federales. De esta manera el gobierno de Roberto Sandoval aportaría más votos al PRI para que el Gobierno de Peña Nieto obtenga la mayoría calificada en la próxima legislatura federal.