Recuerdos nostálgicos de algunos ferroviarios

Comentando con algunos camaradas y compañeros ferroviarios tanto jubilados, como pensionados y liquidados respecto a que volverán a circular los trenes de pasajeros en nuestro país, sobre todo en esta ruta de la costa occidental en la que figura también el estado de Nayarit, obviamente que nos llegó la nostalgia; claro que no por volver al servicio debido a nuestra edad productiva en cuanto a la fuerza física se refiere, sino porque será una buna fuente de empleos lo que esto significará para las nuevas generaciones.

Pero aparte de los empleos que generarán la reinstalación de los trenes de pasajeros, está también contemplado el que la gente vuelva a viajar lo más cómoda posible y ya no haciendo más tiempo que por carretera, pues se dice que los nuevos trenes serán más modernos y diseñados para alcanzar más velocidad; aunque en esta zona de Guadalajara, Jalisco a estación Ruiz, Nayarit, está contemplada como zona de montaña, ya que la actual vía férrea atraviesa la Sierra Madre Occidental entre La Quemada, Jalisco e Ixtlán, Nayarit y, de Tepic, a Ruiz, Nayarit, existe una pendiente de descenso al bajar de 900 metros al nivel del Mar tal y como dice el corrido de “el caballo blanco”, de José Alfredo Jiménez: entre cerros verdes y lo azul del cielo, por lo que en el resto del trayecto de Ruiz, Nayarit y los estados de Sinaloa y Sonora, sí se podrían desarrollar altas velocidades por ser más plana la topografía.

Recordando cómo fue que se comenzó a deteriorar el servicio de los trenes de pasajeros, fue la curiosidad que se dio cuando casi al unísono que comenzaron a surgir las líneas del transporte foráneo de pasajeros, después de hacer quebrar a la otrora famosa línea “Tres Estrellas de Oro”, que obligó a sus trabajadores a ir a una huelga que aún no termina o quizá ya terminó al ir desapareciendo de la vida la mayoría de aquellos trabajadores que hasta se vieron vendiendo dulces en las centrales camioneras para el sustento de sus familias; trabajadores que, al igual que muchos ferroviarios, abandonaron y están abandonando este mundo sin ver llegar la justicia laboral en cuando a sus demandas al quedar sin trabajo.

Así que al ver cómo se reforzaban las líneas del transporte foráneo de pasajeros, a los coches de pasajeros del ferrocarril se les dejó de dar mantenimiento, pues a los coches dormitorio, comedores y observatorios al descomponérseles la refrigeración ya no se les arregló ni reparó en lo absoluto, por lo que fueron retirados del servicio. A los coches de primera especial, primera regula y segunda clase, se dejó de proporcionárseles agua y luz, pues como ya estaba en proceso la concesión a la Iniciativa Privada (IP) desde mediados de los años 90 del siglo pasado y, se rumoraba que políticos de altos vuelos eran los dueños de las compañías de camiones foráneos, para desestimar a la gente de viajar por ferrocarril y prefiriera viajar en camión por carretera fue que se habían dejado caer a los coches de pasajeros del ferrocarril en todo el país.

Sin embargo, a pesar de que los coches de pasajeros ya no traían luz ni agua aun así la gente seguía viajando en estos trenes, lo que ocasionó que cada día fueran los trenes de pasajeros con menos coches, pues de haber arrastrado hasta 15 unidades estos trenes y, en vacaciones hasta 22 coches entre segunda, primera, primera especial, comedor y dormitorios, ya casi al último se corrían con tres coches; hasta que llegó el mes de febrero de 1998 cuando desaparecieron por completo los trenes de pasajeros, una vez que cuajó por completo la concesión a la IP, la que impuso como condición la eliminación de los trenes de pasajeros para dedicarse únicamente al transporte de carga, pues los trenes de pasajeros nunca se corrieron con fines de lucro, sino como un servicio social; un servicio social confirmado en los considerandos del general, don Lázaro Cárdenas del Río siendo presidente de la República Mexicana (1934-1940) al nacionalizar los ferrocarriles en 1937, añadiendo en uno de estos considerandos que: “Se establece el servicio de los trenes de pasajeros, para favorecer a las clases más menesterosas en cuestión de transporte por todo el país”.

Pero al igual como repuntaron las líneas de transporte de pasajeros por carretera, también surgieron las empresas de mensajería a nivel nacional, por lo que se eliminó también el servicio de flete exprés y de menos de carro entero que ofrecía el ferrocarril; eliminar la competencia ferroviaria por ser más barata, pues.

Sea pues. Vale.