Aquellos tiempos...

HUBO PEDO EN EL EJIDO

Se realizó el acto protocolario de instalación de la trigésima segunda legislatura. Tuvo entre asistentes muy especiales al gobernador entrante y al gobernador saliente, Antonio Echevarría García y Roberto Sandoval Castañeda. Este último trepado en su vehículo blindado y con la protección de buen número de guaruras, salió por la puerta de atrás del edificio sede del Poder Legislativo, una que no sabía existe por la calle Zacatecas, mientras que el primero por la puerta de entrada y aclamado por algunos del numeroso grupo en la calle simpatizante del diputado panista y presidente del Congreso, Leopoldo Domínguez. “Polo, Polo, Polo” era la constante arenga.

Llegué puntual al recinto de la Cámara de Diputados, pero me extrañó que la entrada principal estuviera cerrada, si se había designado para los reporteros integrantes de la perrada el patio central, donde pudiéramos apreciar a través de monitores de televisión el importante acto de instalación. Muchas personas estaban fuera del edificio. Entonces me acerqué a la otra entrada, a la sala de sesiones, donde mujer de la oficina de Prensa del Congreso autorizó mi acceso. Por pasadizos me llevaron hasta el patio central, cuya sillería estaba totalmente ocupada al parecer por familiares y amigos de los diputados que tomarían posesión.

Previamente a la perrada se nos informó que, en el espacio de la sala de sesiones, donde se llevó a cabo el protocolo de instalación, solo tendrían acceso periodistas representantes de medios nacionales y televisoras locales con su respectiva acreditación de acceso. Estaban amontonados detrás de la batería de cámaras en espera del arranque, anunciado para las seis de la tarde (inició como media hora después). Se hallaban expectantes, cuando alguien se tiró un pedo, flatulencia que apestó a diablos. Algunos periodistas se retiraron del lugar, como fue el caso del columnista Martín Elías Robles, quien al tiempo que me lo platicó expresaba: “Fue horrible”. Y se ventilaba la nariz con carpeta en mano. Luego llegó Alberto Martínez “El Tico”, quien ratificó lo dicho por Martín. Le echaron la culpa a algún chilango que tragó pescado zarandeado. Estos periodistas nuestros dicen que se colaron a ese lugar, pero fueron rechazados a pedos.

Ante el desprecio a la perrada que cubre de manera religiosa actividades de la Cámara de Diputados, comenté: Ojalá y los periodistas de medios nacionales vengan a cubrir las sesiones de la trigésima segunda legislatura, como usualmente lo hacemos los reporteros locales, verbi gracia, Héctor Gabriel Velázquez que su servidor (además padrino de boda del interfecto) considera el cronista legislativo.

POLO Y COMISIÓN DE LA VERDAD

Ayer terminó la inquietud de muchos al darse a saber que mediante aprobación de todos los involucrados, el diputado Leopoldo Domínguez González fue designado coordinador del Grupo Parlamentario del PAN de la trigésima segunda legislatura.

Ese status le permite por ley ser el presidente del Congreso del Estado para beneplácito de muchos de sus seguidores, que este jueves se dieron cita en masa fuera del edificio del Poder Legislativo para mostrar adhesión al legislador. Allí permanecieron hasta el final del acto de instalación, casi 45 minutos.

Al final, el también ex presidente municipal de Tepic, conjuntamente con los siete legisladores panistas restantes, recibieron en el patio central a nutrido contingente de la Comisión de la Verdad que encabezaron Rodrigo González Barrios y Octavio Campa Bonilla. Les solicitaron audiencia para el próximo miércoles para darles a conocer cuatro casos, debidamente documentados, de arbitrariedades cometidas por el Fiscal Edgar Veytia y solapadas por el gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval.

En este acto no hubo pedo hediondo.