Experiencias frustrantes de los ferroviarios

Cuando se anunció la visita que haría a Tepic, Nayarit, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), varios grupos de ferroviarios que fueron agraviados con la concesión de los Ferrocarriles Nacionales de México, se comenzaron a organizar para ir a hacer un plantón de protesta a las afueras de donde se llevaría a cabo la conferencia matutina, pues en un principio no se sabía de bien a bien en donde sería esa mañanera.

Cuando corrió la voz de que sería en las instalaciones de la 13ª Zona Militar, por la calzada del Ejército, se sopesó de nuevo la idea de ir a plantarse ahí con el fin de llamar la atención de AMLO para recordarle que todavía hay infinidad de ferrocarrileros sin recibir respuesta a sus demandas laborales al haber quedado en la calle con la reprivatización de las empresas ferroviarias.

Sin embargo, entre este grupo que se estaba organizando, hubo quien recordó aquella anterior visita que hizo AMLO a la capital nayarita y que cuando se presentó en el Parque Tecnológico, estuvieron varios grupos de ferrocarrileros a la entrada de dicho Tecnológico esperando la llegada del presidente; pero resulta que había entrado por otro lado, al parecer por el fraccionamiento Lagos del Country, quien sí llegó por la puerta principal fue el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero. Así que se determinó que no tenía caso presentarse en la Zona Militar, porque tal vez volvería a pasar lo mismo que aquella vez y que se quedaran esperando que los viera AMLO.

Cuando se supo del triunfo electoral de AMLO en 2018, se generaron muchas expectativas en cuanto a que ahora sí los ferroviarios recibirían justicia a sus demandas laborales; dicha esperanza se fue desvaneciendo poco a poco, pues pasaba el tiempo y nada de nada, al contrario, el dirigente sindical, Víctor Félix Flores Morales, continuaba en su cargo como si nada, como si no tuviera sobre sus hombros demandas laborales, civiles y hasta penales y, sin recibir ningún tipo de respuesta. Esta esperanza se acrecentó cuando AMLO anunció en una de sus mañaneras que los trabajadores de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro serían recompensados solucionando sus demandas con liquidaciones y jubilaciones correspondientes.

Y más señales positivas se vieron porque la entonces Secretaria de Gobierno, la exministra doña Olga Sánchez Cordero, había estado atendiendo bien a los ferroviarios en cuanto a sus demandas laborales; pero todo acabó cuando fue sustituida por el señor Adán Augusto López Hernández, pues ya no se hizo caso del gremio ferroviario, a pesar de que se le llegaron a entregar en mano los documentos necesarios para que se diera cuenta de la crítica situación que han padecido los ferrocarrileros  por más de -ahora ya- 25 años. Inclusiva al señor Jesús Ramírez Cuevas, Coordinador General de comunicación Social y vocero de la Presidencia de la República, en una ocasión se le entregaron en mano expedientes y documentos necesarios para poder ser atendidos; sin embargo, a pesar de comprometerse el señor Ramírez Cuevas de dar una respuesta en una semana, ya casi a un año de distancia y no ha habido respuesta alguna. 

En un principio también se tuvo esperanza por parte del gremio ferroviario en desgracia, porque el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas estaba al tanto de la situación de reclamo ferrocarrilero; sin embargo, poco a poco se fue alejando de este asunto quizás por tener otras prioridades con el asunto de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero y otros asuntos que posiblemente le llevan más tiempo.

Quienes estaban organizando un plantón en las afueras de la 13ª Zona Militar en Tepic, desistieron del intento al recordar el trauma de lo sucedido en el Tecnológico; pero con otra esperanza en ciernes, ya que este lunes sale una comisión de este grupo de ferroviarios demandantes hacia la Ciudad de México, para estar mañana martes 1 de agosto en una conferencia que se llevará a cabo en el Senado de la República.

En cuanto a la mañanera del viernes 28, en realidad que fue un poco decepcionante debido a que un reportero de nombre Alfonso Urrutia, de La Jornada, acaparó la mayor parte del tiempo con sus preguntas y, como ya se sabe que AMLO se toma un buen tiempo en responder cada una de las preguntas que se hacen, pues ya no hubo tiempo de que algún reportero cuestionara algo de lo que pasa en Nayarit. Lo que salvó la conferencia fue la intervención de la Maestra, Doctora y comunicadora, María Esther González Aguilar.

Sea pues. Vale.